Que duro es ser la esposa de un F4.

Capítulo 25: No puedo.

-¡Maldita loca!- los chicos le agarraron -¡Abre bien esas orejas, yo no me casare contigo porque yo ya estoy casado y no pienso divorciarme!

-Si, ya, no vengas con mentiras ahora, si estuvieras casado tu madre no te hubiera ofrecido como mi prometido y aunque lo tuvieras yo ya lo he decidido, serás mi marido si o si.

-¡Para de decir tonterías!

-¡Sherlock saca a esa mujer de aquí…! Pase de ellos.

-¡Vientito! ¡¿A dónde vas?!

-¡Fuera de la escuela, me pillo el día libre por asuntos laborables!

-¡VIENTITO! Le deje chillando y me fui camino a la salida.

-Sherlock es un nombre muy cool- Sigeru vino tras de mi -es nombre del detective ese inglés.

-Si, mi padre eligió mi segundo nombre.

-¿Y el primer nombre?

-Es Eurus, me lo puso mi madre porque nací cuando soplaba el viento del Este muy fuerte.

-¡Wuah! Que lindo.

-¡Uhm! Ahora tenía pensado ir hablar sobre un trabajo.

-¿Y por qué no cambias de planes? Quiero hablar contigo sobre que seas la esposa de mi prometido.

-Sigeru, por eso no te preocupes, soy consciente de la situación, por eso tengo pensado conseguir un abogado y romper todo lo que nos une, en si ese matrimonio fue echo para proteger a mi hermano, no es por amor.

-Me calma oír eso, pues no soy alguien que le robe el marido a otra, yo soy de luchar justamente, pero si es cierto que te casaste para proteger a tu hermano te ayudaré hacerlo a la vez que te ayudo con lo de tu divorcio.

-¡Uhm!

-Bien, vamos a pasar el día juntas y me cuentas más de como es Tsukasa como marido, pues te recogeré el relevo.

Con ella pase casi todo el día sin parar, siempre yendo de un lado para otro, con la intención de comprar algo que haga enamorar a Tsukasa.

-Tienes suerte de tener chófer, porque con todo lo que haz comprado te veía difícil volver a tu casa.

-¿Quieres que te alcance?

-No, vivo cerca y caminar me vendrá bien.

-Vale, pero antes toma, este vestidito seguro que te irá bien cuando salgas con otro chico que si te guste cuando seas libre.

-No hacia falta, yo…

-No me vale un no, quiero que pronto encuentres a alguien que no sea por obligación, te aseguro que le haré que deje de estar obsesionado contigo.

-Bueno…yo…

-Venga, ve a casa y no hables con extraños.

-Ju, si lo sé, gracias por todo.

Ella se marchó en su coche y yo me fui caminando oyendo música, pero al no tener ganas de volver decido ir por el camino largo y despacio.

-¡Vientito! ¡¿Qué son estas horas de venir?! ¡¿Dónde estabas?!- al llegar me encontré a Tsukasa en mi piso -¡Me tenias preocupado…! Me fue abrazar.

-Tsukasa ya para con esto, sabias que este matrimonio no tenia futuro, yo respetos los temas de los compromisos.

-¡Compromiso que no es válido, porque estamos casados!

-¡Matrimonio que sólo existe porque quiero proteger a mi hermano…! Tsukasa me agarro.

-¡Tú dices eso, pero sé que mientes, tu me amas y haces eso para no dañar a esa mujer, pero lo único que haces es dañarme a mi! Me puse a llorar