Capítulo 5: Frío desprecio.

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-¡Uhm! Que dulce aroma a mar. En Atami lo primero que hice fue respirar el aire puro.

-Si hermana.

-Al final tu chica no pudo venir.

-No, dijo que iba ir a la excursión de la escuela, según me dijo ella su abuela le dijo que para su salud era mejor ese sitio.

-Otra vez será…

-¡Hey!- Kazuya vino -perdonad por la tardanza, dejad que os ayude.

-Gracias.

-Susumu me dijo que tu más que nadie necesitabas estás vacaciones.

-Si, la escuela la esta matando de agotamiento.

-Lo normal de ella, te la pasas estudiando sin parar.

-Digamos que es por eso y olvidemos lo otro que por unos días no los veremos.

-Bueno, dejemos las cosas y vamos a dar una vuelta antes de ir a la fiesta de la playa.

-“¡Si!”

Así hicimos dimos una vuelta por el lugar hasta llegar al muelle a ver los barcos que están amarrados, aunque hay uno que no pegaba con los otros barcos ya que era un jate de lujo de los grandes.

-¡Wuah! Ese es inmenso.

-Ni que lo digas, es la primera vez que veo uno aquí.

-¿Quién…?- mire a una parte y me vi a Tsukasa saludando -pero ¿No iba a ir a Hawái?

-Voy a preguntar- fui a donde estaba Tsukasa que se bajo con chulería -¿Qué haces aquí?

-Bueno, me apetecía venir a descansar y Hawái ya me aburría, además allí no esta una cosita que me gusta mirar.

-Ju, no sabes…

-¡Aaah! ¡¿Qué hace esa pobretona aquí?! De una puerta salieron las pijas de mi clase, Sojiro, Akira con unas chicas y Rui junto con Shizuka.

-Encima vienes con esas tres pija, flipo contigo.

-Sherlock-chan no sabíamos que estabas aquí.

-Si…

-¡Hey Sherlock tenemos que volver ya para no llegar tarde a la fiesta de la playa!

-¡Voy…!

-¿Quién es ese?

-Mi amigo Kazuya, el nos invitó y bueno como haz oído voy a la fiesta de la playa ¿Van a ir ustedes?

-Por mi parte si, Sherlock-chan no vemos allí.

-Yo también iré. Dice Rui serio.

-Vale, os veo a los dos allí, no olvidéis este año es bar coyote, hasta luego.

Les deje a todos, me volví a la casa de Kazuya y me prepare con ropa de cowgirl ya que esa es la temática de este año, aunque a mi eso me encanta y puedo bailar cumbias sobre una barra como si fuera un bar coyote.

En la fiesta me puse a bailar y cantar desde una zona en donde veo a Tsukasa mirándome con cara de enojado, así que para chincharlo le enseño la lengua, pero lo que hace es venir a donde estoy justo cuando vino uno a bailar conmigo.

-Tú aire, ella no está disponible.

-Ni que ahora está chica fuera un objeto y las mujeres no tienen dueño amigo.

-No soy tu amigo y vete ante que reparta…

-“¡Damas y caballeros, llega el momento de la noche, el minuto de los beso en la oscuridad, empecemos con la cuenta atrás!”- Tsukasa agarro mi mano –“¡3, 2, 1!” Se apagaron las luces y fue entonces cuando tirando de mi Tsukasa me dio un beso hasta que se entendieron las luces.

Que duro es ser la esposa de un F4.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora