Capítulo 29: Una auténtica ama de casa.

22 3 0
                                    

-Hoy ha hecho un buen trabajo, pero para la próxima evita hacer locuras.

-Si tío John.

-Es que tu hermano mayor y Nakamura-sama no veas como se ponen cuando se enteran que te metiste en peligro, por no decir de tu maridito- se puso sonriente señalándome detrás -y hablan del rey de Roma. Tras de mi estaba Tsukasa sonriente.

-Tsukasa ¿Qué haces aquí?

-Quería hablar contigo.

-Os dejo pareja. Mi tío John nos dejó solo.

-¿Y de qué quiere hablar mi maridito?

-Es que me siento muy solito y necesito que alguien me de mimitos.

-¿Y qué pasa con la otra mujer?

-Sabes bien que no hubo nada y más porque unos pajaritos me contaron que retaste a mi madre.

-Ju, no tardaron en ir a contarte el cuento.

-Bueno, por unos días vendrías a la mansión a cuidarme, para que te vuelvas a acostumbrar y vuelvas pronto a mudarte completamente.

-¡Uhm! Vale, dos meses, si no pasa nada en esos dos meses me vuelvo a mudar completamente a la mansión.

-¡Que bien mi amada vientito vuelve conmigo!- Tsukasa me abrazo -ya veras que nada nos volverá hacer alejarnos.

-Ju, voy por algo de ropa…

-No hace falta, te he preparado todo para un tiempo.

-¿En serio haz preparado todo? Me puso una tableta de chocolate delante de mi.

-Todo.

Contenta fui a la mansión Domyoji y mientras Tsukasa me iba esperar trabajando yo me fui a la cocina a prepararle la cena, ya que se molesto que le hiciera comida a los otros y a él hacia tiempo que no.

-Al fin apareces jovencita- una señora mayor apareció -encima de tardonada vienes a trabajar sin el uniforme ¿Qué clase de empleada es? Vaya y póngase su uniforme.

-Esto…

-No me repliques y vaya.

-Si, claro señora.

-Para usted señorita soy Tama-sempai.

-Vale, ahora hago lo que me ha ordenado, Tama-sempai. Obediente me puse un uniforme de Maid y retome el hacer la comida.

-Veo que es usted una buena cocinera, no todas las nuevas empleadas son tan eficiente.

-He vivido desde que mis padres murieron sola.

-Bueno, no te despiste y ve a servir la comida al señor.

-Si Tama-sempai.

Con una sonrisa discreta fui al comedor donde se encontraba Tsukasa leyendo el periódico sin prestar atención a lo que pasa a su alrededor.

-Disculpen señor, aquí tiene su cena. Le puse la comida y luego me puse parada de pie con mis manos delante de mi falda.

-Yo pedí…- me miro y se puso rojo -¿Uhm? ¿A qué viene que te vistas de Maid? ¿Es por algo que tenga que ver con los vales?

-¿Vales?

-Si- saco los vales que hice para su regalo de cumpleaños -aunque preferiría que lo hicieras como una buena ama de casa, de Maid me provocas mucho. Tsukasa me paso la mano por la cintura hasta tocar mi culo.

-¡¿Qué clase de empleada es usted?! ¡Yo no contrate a una Porn-Maid!

-Sobre eso…

-¡Que no me rechista y váyase a su puesto! Iba hacer caso, pero Tsukasa me agarro.

-Tama-san, no sabía que volvió.

-Su madre me lo pidió.

-Conozco su manera de pedírtelo y seguro que no te habrá contado de mi feliz enlace con mi esposa.

-No, eso no me dijo, pero si me dijo que vigilará que una chica aprovechará no se acercará a usted señor mientras se hallará en casa.

-Serás mi madre, pero no sabe como tocarme…

-¡Tsukasa…! Tama-sempai me dio una colleja.

-¡Se respetuosa con tu señor!

-¡Jope! ¿Tampoco puedo reñir a mi maridito?

-¿Maridito?- me miro -jovencita ¿Cuántos años tienes?

-16… Miro a Tsukasa que se hacía el loco.

-¿En serio se ha casado con una niña?

-No puedo mandar sobre mi corazón y créame, no puedo perder a esta mujer.

-Bueno, por lo que he visto ella es una buena chica, pero me gustaría conocerla mejor.

-Este tranquila, yo fui criada también para cuidar de quien fuera mi marido, así que le pido por favor que me permita ser la que cuide de mi marido como una buena ama de casa.

-Ves lo que te digo, no puedo perder a esta mujer.

-De acuerdo señorita…

-Señora, ya es una Domyoji más.

-Si señor.

-También pido que cuando ella estudie o haga sus deberes en casa no la molesten, a parte de ser mi amada esposa es la alumna modelo que posee la rama estudiantil de mi negocios.

-Tsukasa mis deberes y mis estudios lo suelo hacer en clases o en mis prácticas de ingeniería tecnológica que me ha otorgado mi hermano mayor en ST para mi futuro puesto.

-Algo me dijo, yo solo te pido que si estás cansada dejes a las empleadas ayudarte ¿Vale? No quiero volverte a ingresar con amarres.

-Perdona.

-Anda come conmigo.

-Déjame traer mis cubiertos y mi comida.

-No te tardes. Fui hacer lo que le dije dejándole hablando con Tama-sempai.

Sin más problemas retome la vida de esposa con Tsukasa, al igual que como dije en mi tiempo libre hacia mi función como ama de casa ayudando incluso a Tama-sempai en lo que me pidiera.

Continuara…

Que duro es ser la esposa de un F4.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora