Me, Myself and I [Junhao]

Capítulo 31

Íbamos ya de regreso a casa de los Xù, después de pasar prácticamente la mitad del día en los juegos de la heladería.

Mi celular comenzó a sonar, escarbé en el desorden que había en mi mochila hasta que lo localicé. Era el número de mi casa.

—¿Si?

—Señor JunHui — se escuchó del otro lado de la línea —Su madre pregunta a qué hora llegará.

—Dile que no llegaré— conteste serio y note como Minghao volteaba a verme y luego regresaba su mirada al camino. —Dile que me quedare en casa de Soonyoung. — Tiangfan, una de las encargadas de la casa tapó la bocina y escuché como le repetía mis palabras a mi madre, quien apuesto todos mis suéteres a que estaba perdida en su computadora y hablando por su celular.

—Dice que está bien, que tenga cuidado—ahora necesitaba hablar con Hoshi.
Colgué y dejé presionado el uno, que era la marcación rápida para Soonyoung, llevé mi celular a mi oído.

MINGHAO

¿Con esa facilidad lo dejaban quedarse en casa de Hoshi? Había pasado todo el día fuera y porque simplemente no le apetecía llegar a su casa, no lo hacía.

— ¿Hoshi? ¿Dónde estás?— dijo pasando una de sus manos por su cabello. — ¿Me puedo quedar en tu casa hoy?— preguntó y volteé a verlo, una sonrisa se coló por sus labios. —Gracias— dijo entusiasmado — Nos vemos— presiono el botón rojo. Una vez más volteé a verlo, él también volteo y me sonrió arrugando la nariz. Regresé mi mirada al camino.

—¿Y cuándo vendrás de nuevo?— le preguntó Minjoo a Jun, al momento que se despedía.

—P-Pues... Yo— balbuceó y levantó su mirada buscando la mía —Pues, cuando tú me invites— le dijo sonriente.

—¡Ahora!— Minjoo comenzó a saltar —Quédate más ¿sí?.

—Si, dile, Hao. — me pidió Minseok.

—No niños— dijo con un tierno tono de voz —Es tarde, y mañana tienen colegio, al igual yo— les explicó, pero era imposible hacerlos cambiar de opinión.

—Vayan adentro, ya— les dije y ambos voltearon a verme ¿tristes?.

—Está bien— dijeron al unísono, ambos dieron un beso en la mejilla de JunHui y caminaron enfilados hacia la casa.

—Bueno...— alargo caminando hacia su auto —Adiós Minghao— ¿Qué? ¿Así nada mas? ¡Mierda! ¡Eso es! ¡Eso es lo que precisamente odio de él! En un momento es uno y a los pocos minutos ya es otro.

Caminé detrás de él y cuando intento abrir la puerta puse mi brazo y volví a cerrarla.

—¿Se puede saber qué haces?— preguntó dándose la media vuelta.

—No dejare que te vayas— dije firmemente, acorralándolo, poniendo mis brazos a sus costados, él abrió sus ojos como platos —No hasta que me prometas que no saldrás con Hyuk.

—¿Y por qué habría de prometerte eso?— frunció el ceño — ¿A ti qué te importa si salgo con él o no?.

—Solo no quiero que salgas con él— ni siquiera yo sabía el por qué de mi petición.

—¿Celos?— preguntó tratando de provocarme, no le diría lo que quería escuchar.

—Sabes de sobra que no.

—Lo que yo sé es que te mueres de celos de que salga con Hyuk, pero no tienes el suficiente valor para decirlo— te está provocando Minghao, no caigas. —¿Lo ves?— sonrió — Te gusto...— movió sus manos lentamente por mi cuello hasta sostener mis mejillas—Incluso sé que crees que soy lindo.