– Llegas tarde.
La voz ronca del peligris resonó en toda el aula, al ver al castaño entrar por la puerta.
Él castaño mordió su labio inferior sintiendo la penetrante mirada del alfa en él, más no atreviéndose a mirar sus ojos, no porque tuviera miedo o se sintiera expuesto sino porqué sabía que si lo miraba empezaría a discutir con él por la mínima cosa.
– Lo sé, tuve un percance... – dejó las palabras en el aire sintiendo el ambiente tenso.
Entró completamente al aula, cerrando detrás de si la puerta y levantando la mirada hacia el alfa peligris, quien se encontraba recargado en una de las paredes del aula. Su mirada estaba fija en el suelo viendo un punto inexistente. Se veía tan tranquilo que Jimin quiso que así se viera siempre. Negó con la cabeza ante sus pensamientos que empezaban a perturbar a su lobo.
Carraspeó llamando la atención del peligris, quien fijo su mirada en él.
– Entonces... – él castaño dejo sus palabras al aire – ¿Qué haremos? – continúo su pregunta, viendo al peligris enderezarse en su lugar y comenzar a caminar a donde el estaba.
El indiferente rostro del peligris lo hacia sentir un poco intimidado pero Jimin no se lo haría saber, su orgullo era más como para hacerlo. Él alfa llegó frente a él haciendo a su lobo estremecerse por su apetecible aroma a yerbabuena, menta con eucalipto, en verdad ese aroma era muy atrayente pero no debía dejarse llevar.
– Creo que esta claro, yo haré la pista de la canción y tú harás la coreografía, dame dos días y te la entregaré aunque me falta escribir la letra de la canción que cantarás – habló con simpleza. El castaño frente a él abrió sus ojos con sorpresa al escuchar lo último dicho por él alfa.
– ¿Cantar? ¿Yo?
– Sí, él profesor Lee, le dijo a la profesora Song, que tú cantabas hermoso – habló Yoongi viendo a él castaño fruncir el ceño – Ella quedo encantada con eso y me recomendó que tú cantarás.
– Yo estoy aquí por la danza y la coreografía, no para cantar – aclaró el castaño, frustrado por lo que dijo el alfa, quien solo se limitó a elevar sus hombros sin importancia.
– Eso ve y dile a la profesora Song.
Él peligris vio al chico frente a él rodar sus ojos mientras inflaba sus mejillas con molestia pues su ceño seguí fruncido. Sonrió ligeramente, pues la acción del castaño le resulto muy tierna y por un momento creyó que él chico frente a él no era más que un lindo omega. Esa idea paso por su mente, sin duda el delicado cuerpo del chico y sus finas facciones de su rostro, lo hacían ver como un omega, lo único que faltaba era su aroma y que no fuera un rebelde e insolente todo él tiempo.
Fue ahí en donde él alfa se dió cuenta de sus pensamientos y se reprendió mentalmente al pensar así de ese, simple beta insolente.
– Esta bien, cantaré – dijó Jimin sacando al alfa de sus pensamientos, quien solo asintió dándole a entender que siguiera hablando – Solo con una condición – añadió sonriendo malévolamente a lo que él peligris alzo una ceja.
– ¿Cuál es? – preguntó temeroso de la respuesta del castaño.
– Fácil y simple. Qué tú cantes conmigo – contestó Jimin, haciendo al alfa fruncir el ceño con molestia.
– Yo no canto, yo escribo las canciones y compongo música – aclaró desafiante, viendo al castaño bufar por lo bajo, también molesto.
– Pues te aguantas. Tómalo o dejalo.
Yoongi se sentía frustrado por la actitud del castaño, tan irritante y berrinchudo, que solo pudo darse por vencido y aceptar lo que este le decía.
– Esta bien.
Jimin sonrió orgulloso ante las palabras del alfa mirando sus oscuros ojos, sabiendo que esté estaba molesto.
– Te daré mi número, para que me marques, cuando tengas la pista y así poder trabajar en la coreografía.
Después de intercambiar números y advertirle a Yoongi que cantaría con él, salió de esa aula sintiéndose un poco abrumado por el aroma del peligris.
Sí bien, sabía que su lobo se alborotaba con ese alfa aún no comprendía el porque, si a él la presencia del alfa lo hacia sentir hastiado e irritado, pues a veces su personalidad era superficial y dominante. Nunca permitiría que un alfa lo dominará aunque era un omega, no se permitiría que las personas lo vieran como tal, pues nunca se sentiría orgulloso de ser uno.
Al igual que nunca olvidaría, los días en la preparatoria en donde lo humillaban y despreciaban por su horrible olor. Aún recordaba los días en los que todas esas personas hicieron de él una persona insegura y tímida, que destrozaron sus ideas de tener un buen alfa y ser el mejor omega, que iluso fue al creer que lo aceptarían por su jerarquía.
Los constantes golpes, las hirientes palabras y las humillaciones, terminaron con aquel joven amable y adorable, que solo quería disfrutar y experimentar lo que es ser un omega.
¿Y por qué sucedía todo eso?
Todo por su asqueroso aroma, que con tan solo recordarlo hacía querer rociarse miles de neutralizadores y tomar miles de supresores, para ver si así desaparecería aunque sabia que si hacía eso, su lobo moriría y con ello él también, algo que en realidad le importaba poco.
No es que quisiera dejar de vivir pero aún no se hacía la idea de que alguien lo quisiera siendo el mismo. Sabiendo que no es un beta sino un omega con olor empalagoso.
Tal vez nunca encontraría alguien que lo amara por ser el mismo, y aún más faltaba para que él se amara a sí mismo con los miles de defectos que tenía, solo quedaba esperar, el tiempo decidiría si amaría o su omega y él se quedarían solos aunque la última idea hacia a su lobo sentirse triste al igual que a él.
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Notita kawaii :3
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Espero les guste pues hago mi mejor intento.
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¡Los amoo!
LittleShooky12~~
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¿Beta? o ¿Omega? #1 [YOONMIN]
Fanfic© Escrito por: LittleShooky12 en Wattpad Su aroma era algo que debía ocultar de todos, pues no era necesario saber que era más que empalagoso y raro. Y pasarse por un simple beta sin duda ayudaría. Pero su lobo no podía ser escondido por toda su vi...