Golpes y celos

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Conway guió a Gustabo, Horacio y Anya por toda la comisaria hasta una amplia sala llena de taquillas donde estaba esperando Volkov. Tardaron unos minutos de más porque Gustabo y Horacio se quedaron atrás al entretenerse insultando a un hombre que se encontraba en una celda, acción que provocó un golpe de porrazo a cada uno de la mano del superintendente y risas por parte de la chica.

-Bien supernenas, Volkov y yo os vamos a enseñar algunas maniobras de autodefensa, así que prestad atención.-Dijo Conway, acto seguido se colocó en forma defensiva colocando un brazo delante de otro con los puños cerrados.-Venga Volkov, intenta golpearme.-

Volkov suspiró y procedió a intentar darle una patada a Conway, lo cual este último sin esforzarse lo esquivó y cogió la pierna de Volkov y lo lanzó al suelo. Los dos presentes observaban la escena emocionados imaginándose a ellos mismos realizando movimientos de pelea "guays", mientras Anya no podía evitar pensar que Volkov era manejado como un saco de patatas.

Las demostraciones y explicaciones continuaron durante media hora, hasta que Conway decidió que era hora de poner en práctica esas clases.

-Muy bien ¿quién quiere empezar?.-Preguntó Conway, los tres "alumnos" se miraron y de entre ellos salió Horacio bastante motivado.

-¡Yo quiero intentarlo super!.- Dijo Horacio dando saltitos con los brazos en posición "pelea".

-Venga Horacio, ¡cometelo como haces con los problemas!.-Gritó Gustabo animando al de la cresta.

-Muy bien, Volkov ataca y tu defiendes, yo observaré para ver tus errores.-Dijo Conway posicionandose mas atrás.

-¿Qué maniobra será la primera comisario?.-Preguntó Horacio guiñándole un ojo a Volkov.

-Como si un asaltante te lo fuera a decir Horacio.-Respondió Volkov y acto seguido se abalanzo hacia Horacio haciendo un amago y golpeándole en el estomago, cosa que hizo que el de la cresta cayerá de culo al suelo.

-Pero vamos a ver capullo, ¿de verdad esperas que un enemigo te diga donde te va a golpear?.Dijo Conway pasando su mano por la cara.-Venga, Gustabo, tu eres el siguiente.-

Con Gustabo el resultado no fue muy diferente, Volkov cogió del brazo al del bigote y lo acabó tirando al suelo, había que reconocer que a Volkov se le daba muy bien la pelea cuerpo a cuerpo.

-Venga, ahora la policia, a ver que tal lo haces tú.-Al revelar Conway el anterior oficio de la chica hizo que las miradas de los dos amigos y el comisario se posicionaron con total rapidez en ella,lo cual la chica bufó.

-Ex-policia, señor superintendente.- Dijo mientras cogía la goma del pelo que llevaba en la muñeca y se hacía una coleta mientras se acercaba al medio de la sala.

Tanto Volkov como Anya se pusieron en posición de ataque, esta vez el ambiente era diferente, Volkov sabía que ella podría defenderse mucho mejor que los dos anteriores y Anya sabía que el no se contendría tanto con ella. 

El comisario comenzó por un golpe directo hacía la cara de la chica, la cual esta última esquivó con facilidad. Sin embargo ella no contaba en que eso es lo que quería el peligris, en ese momento Volkov la tenía como quería ya que al esquivarlo estaba situado detrás de Anya. Con el brazo la cogió del cuello e intentó tirarla al suelo, pero la chica agarró como pudo la pierna de Volkov y lo desestabilizó tirándolo al suelo, cosa que ella cayó encima del comisario al estar agarrada por él.

-Esa ha sido buena, señorita Anya-Dijo Volkov poniendo una mano en el hombro de la joven.

-Gracias comisario.-Dijo la chica girándose a él y dedicandole una sonrisa. Se quedaron un momento mirándose a los ojos hasta que el superintendente carraspeó llamando su atención. Acto seguido Anya se levantó y le tendió la mano a Volkov para ayudarlo a levantarse.

-¿Veis supernenas? teneís que pensar en los puntos que desestabilicen o dejen K.O. al enemigo con los menores golpe posibles.-Dijo Conway.

-Es fácil decirlo papu, pero luego hacerlo...-Se excusó Gustabo.

-¡Pues en vez de hacer el mariconetti por ahí practicad en vuestro tiempo libre!.-Les gritó el superintendente.

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 El superintendente al cabo de una hora les dejó "libres" de la clase de autodefensa.Anya se despidió de los dos amigos y entró en el baño de la comisaria. Gustabo y Horacio estaban hablando de lo todo lo ocurrido en las clases de camino al audi:

-Tengo unas ganas de aprender esas llaves, ¡así no nos secuestrará ni dios!.-Decía todo emocionado Gustabo a su amigo de la cresta.

-A mi me hubiera gustado caerme encima de Volkov como Anya, menuda suerte tiene la tía.-Dijo apenado Horacio.

-Ay mi querido Horacio..."amigo date cuenta".-Dijo finalmente Gustabo dándole palmaditas en la espalda a Horacio y entrando al coche.

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Espero que os esté gustando la historia :3

Mi señor comisario VolkovDonde viven las historias. Descúbrelo ahora