My Precious Treasure: Why so shy? [YUNSANG]

[diez]

Le estaban quitando la via cuando se fijó en la mirada  alicaída que Wooyoung le dedicaba a la ventana. En cuanto la enfermera se fue se levantó de su cama y se dirigió hacia la de su compañero de cuarto. Le dolía al caminar, pero no tanto como antes; sin embargo prefirió hacerlo a paso lento. Se sentó poco a poco al lado del otro chico y lo miró con una sonrisa. Este, al notar su presencia, volvió la vista hacia él.

- ¿Qué te pasa? Estás más triste de lo usual - le dijo intentando sonar alegre.

- ¿Volveremos a vernos? - Wooyoung le preguntó como si se estuvieran despidiendo para siempre.

- ¿No eres muy dramático? Tengo tu número y tú el mío. Podemos llamarnos y vernos siempre que queramos. Quedar en algún lado cuando salgas del hospital y puedo venirte a ver todos los días si quieres. Solo dejaremos de compartir habitación, eso es todo.

- Es que... - bajó la mirada - Apenas nos conocemos de hace tres días pero me he acostumbrado a tenerte aquí... Te he cogido mucho aprecio en muy poco tiempo.

Mingi lo tomó de la barbilla y lo hizo mirarlo a los ojos - Yo también a ti. No te voy a dejar por nada del mundo, ¿me oyes? Tal vez nos veamos menos, pero vendré a verte cada día si hace falta.

- Mingi... - Wooyoung no sabía que decir. Su corazón latía con fuerza y sentía cómo sus mejillas se encendían. Se estaba enamorando, pero no podía permitírselo. Ya no. Su enfermedad haría que aquel luminoso ser se apagara si se quedaba a su lado. ¿Pero que otra cosa podía hacer si no quería dejar de verlo nunca? ¿Cómo no ser egoísta cuando te conviertes en adicto a alguien? Si es lo que él también quiere, ¿por qué negárselo? Porque le haría daño. No podía hacerle daño. No quería hacerle daño. Pero tampoco quería perderle. Se dejó caer sobre el pecho de Mingi y comenzó a llorar con sus manos apoyadas sobre este. El mayor solo lo abrazó acariciando su espalda con delicadeza para intentar hacerlo sentir mejor.

- Wooyoung... - no entendía lo que le pasaba. No sabía por qué lloraba así, por qué se sentía así. Pero iba a apoyarlo y ayudarlo con todo lo que pudiera porque él también le había cogido cariño demasiado rápido. En aquellos casi tres días habían hablado, jugado, reído y bromeado mientras se iban conociendo. Aquella persona se había convertido en alguien demasiado especial para él como para dejarlo ir. No sabía por qué estaba en el hospital puesto que Wooyoung odiaba hablar de ello, pero fuera lo que fuera le dañaba más tener la enfermedad que esta misma. Podía verlo y no le iba a dejar fuera lo que fuera que le afectara. Se reía de Yunho por su enamoramiento con Yeosang, pero él también se estaba enamorado de una persona solitaria.

- No sé que hacer Mingi - dijo el contrario después de un rato, mientras se secaba las lágrimas.

- Si me cuentas que te pasa tal vez pueda ayudarte.

- No sé que va a pasar conmigo, con mi futuro... No puedo prometerte estar ahí siempre. Al menos no físicamente... Pero quiero estar contigo, no quiero perderte por nada. Pero quedándote conmigo, mi enfermedad puede terminar haciéndote mucho daño y no quiero eso. No quiero hacerte daño. No sé qué hacer. Ahora que te vas de aquí ya no hay razón para seguir en contacto. Podríamos dejarlo aquí. Es nuestra oportunidad.

- Me da igual que enfermedad tengas, Wooyoung. No me voy a ir. Soy más fuerte de lo que crees. Y si que hay razón para seguir en contacto. Somos... - iba a decir amigos pero no quería ser solo su amigo. Al principio sí pero ya no. Quería más. Si decía la palabra amigos sería una forma de poner distancias. 

- ¿Qué?

- Quiero decirte que somos amigos pero...

-¿Pero?

- Ven al festival de Navidad de mi instituto. Le pediré permiso a las enfermeras para llevarte conmigo. Así te da un poco el aire. Van a actuar Yunho y Hongjoong que ya les conoces. Mi amigo San también. Lo que pasa que cuando vino a verme estabas dormido y no pudiste conocerlo. Será divertido.