Yuuri se sentía muy incómodo. Desde que aquella mujer, la cual suponía sería la madre de Viktor, había aparecido, era casi como si no existiera. Su atención estaba sobre el peliplata y la otra Omega, pero parecía ignorar la cara de molestia de su hijo, quien seguía tratando de quitarse a una rubia teñida de encima.
Viktor, por su lado, estaba arrepintiéndose de siguiera haber aceptado venir. Debía haber imaginado que sus padres harían algo como esto, pero quería darles el beneficio de la duda por una vez en su vida.
—Será mejor que vayamos al comedor, la cena se enfriará y-
—Mamá —la interrumpió el peliplata—. Quisiera presentarte a alguien.
Tanto su madre como la Omega se quedaron estáticas, claramente no esperando algo como aquello. Rochelle finalmente lo soltó y cruzó sus brazos, dirigiendo su mirada hacia Yuuri con una clara señal de disgusto y superioridad. Por otro lado, su madre, aunque se encontraba escéptica ante sus palabras, le dio el beneficio de la duda, dejando que su hijo la llevara hasta donde se encontraba parado aquel azabache.
—Mamá, él es Yuuri. Él es-
—Nos hubieras avisado que traías un amigo —lo interrumpió al tiempo que se acercaba más al Omega—. Soy Irina.
Su madre sonreía con amabilidad, pero Viktor estaba seguro de que era la amabilidad más fingida que había visto. Le había molestado que lo interrumpiera, pero por otro lado, ¿que eran ellos? No era como que hubiera hablado con Yuuri al respecto. No podía presentarlo como su pareja, pero tampoco era correcto decir que eran amigos, sería un insulto a lo que tenían.
Sin decir nada, dejo que su madre creyera por el momento que solo era un amigo. Lo agarro del brazo y empezaron a caminar hasta el comedor, donde todo estaba casi preparado para la cena, faltando solo el lugar del azabache.
—Madre ¿por qué está Rochelle aquí? —preguntó al tiempo que seguía a su madre hacia la cocina, dando órdenes de aquí para allá.
—¿Qué no es obvio? —preguntó con sarcasmo—. Debes de pasar tiempo con tu futura pareja.
—Ella no será mi pareja.
—Eso dices ahora, pero verás que Rochelle es una excelente persona —hizo una mueca—. Muy en el fondo.
—Tampoco la toleras —afirmó cruzándose de brazos.
—Eso no es cierto. Ahora, será mejor que vayamos a sentarnos y empecemos con la cena, tu padre llegará dentro de poco.
Viktor suspiro frustrado, no importaba cuanto tratara de hablar con su madre, está fingía no escucharlo. Por su parte, Yuuri estaba pasando un rato bastante agradable con Antón, quien se lo había llevado a la sala, lejos de Rochelle.
—Me cuesta creer que Lucas y Viktor se hayan metido en problemas —comentó mientras trataba de ocultar su risa.
—Uy... de lo que no te enteras. Si te dijera todas las veces que mi hermano metió la pata, nos haría falta más de una noche para ponerlos al corriente —comentó riendo—. Y dime Yuuri, ¿qué tal las cosas con mi hermano?
—¿Con tu hermano? —preguntó nervioso y desviando la mirada.
Antón sonrió divertido.
—Ya sabes —dijo poniendo sus brazos detrás de su cabeza—. ¿Se agarran de las manos? ¿Un abrazo? ¿Un beso? ¿Dormir juntos? Ese tipo de cosas.
El sonrojo de Yuuri aumentaba con cada palabra que salía de la boca del Alfa. La forma tan casual en que las decía era algo que él nunca podría hacer, no sin caer en un sonrojo tan intenso que preocuparía a cualquiera.
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Besos de Hielo - Omegaverse - Viktuuri
FanfictionSer un Omega podía ser lo peor. Yuuri ya lo odiaba lo suficiente. Su condición de Omega lo dejaba vulnerable ante muchas amenazas, insinuaciones y momentos incómodos, por lo que la soledad era bien recibida. Hasta que aquel día llego. Cuando un...