CAPÍTULO XI

1.3K 103 14
                                    

POV LAUREN

Todo mi cuerpo me dolía y quise hacerme la fuerte cuando Camila estuvo hace unos días aquí, pero al sentirla tan cerca de mi, sentí paz con ese dulce beso que dejó en mi frente, con su carita de preocupación al verme y sintiéndose culpable por algo que no tenía nada que ver ella, sin yo saber me gané una enemiga, pero al hablar con mi padre algo que sé que la dejo muy desconcertada, espero todo haya sido para bien referente a ese caso. Sabía que Camila tenía muchas preguntas pero primero yo tenía que resolver las mías, no recordé nada de esa noche apenas abrí los ojos, con los días mis pensamientos se fueron aclarando y tomé la decisión de llamar a mi padre.

Flashback 

Me gustaba pasar tiempo con ella, es una de esas personas que no necesitas saber mucho para que te caiga bien, o tal vez es el miedo que tenemos de que no sea lo que creíamos y preferimos quedarnos con la primera impresión o con lo poco que nos da. 

Estaba exhausta, este trabajo me tenia al borde, pero el resultado sería lindo y le daría un poco de vida a este lugar, miré hacia donde estaba Camila y ya estaba recogiendo todo para irse, no había hecho el trabajo completo y no lo terminaría, mis compañeras estaban haciendo lo mismo, pero quería terminar lo que me faltaba, solo sería tres piezas más por pintar y quedaría listo para mañana solo para montar la cerca, así que no me apresuré por irme con ellas. 

Las dejé apoyadas de la pared para que pasaran toda la noche secándose, fui a buscar mis cosas, ya estaba oscuro y el frío comenzaba aumentar, vi como unas chicas venían, no les hice caso, cuando noté que en realidad venían hacia mi dirección, sentí miedo, pero luego vi que eran las chicas que Angelique me había presentando en mis primeros días aquí, Rita, Amber, Jenna y Dinah. 

—Hola... —Dijo Rita cuando ya estaba frente de mi —Que bonito está quedando todo. 

—Hola chicas! —Respondí amablemente. —Bueno en realidad no hemos avanzado casi nada, ya entre unos días se vera el cambio —Sonrió.

—Y tu grupo? —No dije nada por unos segundos, pero no sé a donde iba esto.

—Imagino que están yendo al comedor, es hora de la cena. —Esto me estaba colocando algo incomoda. —Y yo también iba para allá, así que bueno nos estamos viendo. —Al tratar de marcharme, me detuvo dándome un leve empujón.

—Espera, es que contigo quería hablar. —Miré como Amber y Jenna caminaron detrás de mi. 

—Y eso que será? —Soné tranquila y despreocupada. —Necesitas un consejo médico? —Dije riéndome débilmente, al ver que la situación no daba para chistes ni sarcasmos. 

—Que graciosa, pero no nada de eso. —Busco un pequeño banco que estaba cerca y se sentó. —El día que te conocí, me diste una leve curiosidad, pero bueno aunque no quise meterme no pude evitarlo. 

—Y que será? —Crucé mis brazos. 

—Te dije que conocía a tu padre recuerdas? —Asentí —Bueno, empecé a deducir algunas cosas y todo dio como lo imaginé. 

—Si me explicas mejor, creo que entendería todo esto —Las señalé a todas, ya mi tono de voz era fuerte. 

—Bien! De acuerdo, tu padre fue bueno muy bueno diría yo, con mi familia hasta que mi mamá cayó en sus redes y como era de verse tuvieron una aventura. —Fruncí mi entrecejo.

—Eso no me sorprende, mi padre a tenido miles de amoríos. —En eso sentí un golpe en mi espalda por parte de Amber haciéndome caer, cuando pude me giré y tenía una de las tablas en sus manos. —Pero que carajos! —Grité.

En el lugar que estuvimos. | Camren.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora