♦34. El regreso♦

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|POV BAKUGOU|

Por fin nos largamos de este maldito bosque, y regresamos a U.A.,  ¡Ya era hora! Por fin, de vuelta a la normalidad, a mis estudios como héroe, y a concentrarme en lo que realmente importa. Claro que el tiempo que pasaré con Todoroki será menos, no afectará mi carrera como pro-heroe, tal vez a él no se de cuenta, por todo lo de su padre y sus problemas, pero será bueno para ambos. Aunque definitivamente extrañare cuando me pregunten al gana a dormir junto a el... Bueno, que se le puede hacer, es una pena.

|POV TODOROKI|

Mmmm, volveremos a U.A., eso es algo bueno, pero ya no podré pasar mucho tiempo a solas con Bakugou, y eso me molesta poco. Pero, conociéndolo, estoy seguro de que no le importa ni un poco, típico de él. Me gustaría que se preocuparía tanto como yo por nuestra relación, pero es no es posible, su mente está en otros asuntos, y la mía también, aunque la mayor parte del tiempo pienso en Bakugou, también tengo mis propios problemas, uno de ellos es mi padre. No debo de darle tanta importancia, si me preocupo mucho por el tiempo que pasó con Bakugou, eso solo mostraría que dependo de el, y no es así, bueno, no del todo. Y si paso mucho tiempo con, lo molestaría, porque se que le gusta ocupar su tiempo libre para si mismo, y no voy a quitárselo por nada del mundo, el vendrá a mi cuando así lo quiera.

...

|POV NARRADOR|

La clase A llegó a su academia, todos bajaron ordenadamente, y se dispusieron a entrar a los dormitorios, como se les fue indicado. Algunos se fueron a dormir, mientras que otros se quedaron en la sala común para compartir sus experiencias en el campamento, o simplemente conversar un rato. Era sábado, así que no tendrían clases hasta el inicio de semana, que era en dos días, y eso significaba que el domingo era su día libre, podían salir del campus, y andar por la ciudad a su gusto. Esas eran buenas noticias para cierto chico bicolor, pues significaba que podía salir con Bakugou, claro, si este quería.

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Varios jóvenes de la clase A descansaban tranquilamente en la planta baja de los dormitorios, a diferencia de dos chicos, uno de Don explosivo, y otro de Don dual, quienes se encontraban en sus respectivas habitaciones, realizando diferentes actividades. A uno de ellos se le pasó por la mente ir a la habitación del otro, pero no estaba seguro de como reaccionaria. No le importo y se dispuso a ir hasta la habitación del chico.
Cuando llegó, dudo un poco antes de tocar la puerta, pero todas esas dudas se disiparon cuando un impulso oculto le hizo golpear la puerta, y cuando se dio cuenta de lo que había hecho, era muy tarde pues este ya la había abierto, dejando ver su expresión de confusión al verlo a el en la puerta de su habitación. Ninguno de los dos sabía cómo reaccionar ante tan incomoda situación, y sin más, el chico que había ido hasta allí, entro dándose permiso a entrar en la ajena habitación, acción que desconcertó aún más al dueño del cuarto. Ambos se sentaron en la cama, sin decir palabra alguna, buscando en sus mentes algún tema de conversación, sin resultado aparente. Hasta que la curiosidad lo hizo preguntar el por qué de su visita, lo que paralizó por completo al chico.

–¿Tienes algún problema con eso?– Trató de aparentar estar calmado, pero su tono de voz lo delataba.

–Por supuesto que no, tu eres bienvenido aquí y lo sabes, Bakugou.

–¿Entonces que tiene de malo que haya venido de visita?

–Nada en realidad, es solo que me pareció extraño, es todo.

–¿Extraño? ¿Por qué demonios es extraño?

–Pues, tu no eres... Así, digo, no es normal en ti que vengas a buscarme.

–Tsk, no es tan raro si lo piensas bien, después de todo somos pareja.

–Hmm, tienes razón, no es raro en absoluto.– Con la duda ya resuelta, no quedaba más de que hablar, provocando que el cuarto quedará en completo silencio, solo con sonidos de ambiente de fondo, las risas de sus amigos a lo lejos, y charlas distantes.

–O-oye, ¿Tienes algo planeado para mañana?

–¿Huh? No, ¿Y tú?

–Pensaba visitar a mis padres, pero no suena tan interesante.

–¿Por qué lo dices?

–Seria mejor si salimos a otro lado, dudo que mis padres te interesen.– Algo en Todoroki hizo click, ¿Bakugou quería que conociera a sus padres? Eso lo puso nervioso.

–¿Quieres que conozca a tus padres?

–No sería mala idea, estamos saliendo, ¿O no? Eso es lo que hacen las parejas.

–Hmm, cierto.

–¿Tu qué piensas?

–Claro que quiero conocer a tus padres.

–Entoces está decidido, iremos a casa de mis padres.

–¿Debería llevar algo en especial?

–Como quieras, a mis padres no les importará lo que lleves o no.

–Bien.

–Supongo que eso es todo, regresaré si habitación, nos vemos.

–Si, nos vemos.– Con esto último el rubio salió de la habitación, dejando s un Todoroki bastante confundido y pensativo.
Simplemente no podía creer que mañana saldría a conocer a los padres de su novio, era un sueño hecho realidad, pero la idea lo ponía más nervioso de lo que lo emocionaba, no conocía en absoluto los padres de Bakugou, ¿Y si no les agradaba? ¿Y si le prohibian salir con Bakugou? Eso no sería bueno para nada. Pero todo eso lo sabría hasta mañana, y no podía esperar tanto tiempo, definitivamente los nervios se lo comerían vivo.

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|Continuará.|

♦Bomba de Amor♦ [Todobaku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora