I GOT YOUR BACK

9.- @Anotta18, este va para ti💕

NATALIA

Conduciendo de nuevo hacia Alicante, iba pensando que la novata y yo, no hacíamos tan mal equipo después de todo, yo podía interrogar a las familias y ellas comerse los marrones de los familiares que eran " más expresivos, o más cariñosos de la cuenta".

Alba le había pedido permiso a la madre de Silvia para llevarnos su diario, y estaba hojeándolo con atención, sentada en el asiento del copiloto.

Era totalmente consciente de que la escenita que había montado en el restaurante, había estado totalmente fuera de lugar y más aún, después de la charla monumental que había recibido de Julia y Sabela tras aquello. No debí decirle que me daba asco, pero ese era un tema que me hacía colapsar a menudo y no sabía muy bien como disculparme o como explicarme sin parecer más loca de lo que ya le debía parecer.

- Alba...

- ¿Si? - Respondió levantando la vista del enorme diario que tenía entre sus manos.

- Verás... yo... quiero disculparme... yo no debí alterarme, no debí decirte que me dabas asco... no es cierto... no es propio de una oficial de la Guardia Civil tratar así a una subordinada... yo no sé como explicártelo...

- Tranquila- me interrumpió - no tienes que explicar nada, te acabas de disculpar, para mí es más que suficiente. ¿Estás arrepentida de corazón o te disculpas sólo porque es lo políticamente correcto?

Me miró directamente a los ojos mientras mostraba una leve sonrisa y acariciaba suavemente la tapa del diario.

- Estoy arrepentida - respondí sinceramente, retirando un segundo la vista de la carretera para mirarla a los ojos - yo no soy así... bueno, sí, soy así, pero no insulto a las personas, no le falto el respeto a mis compañeros, te diría que no se lo que me ha pasado, pero sí lo se, y no es excusa.

- Vale, pues ya está - respondió colocando su mano sobre la mía, que estaba apoyada en la palanca de cambios - no tienes que excusarte ni darme explicaciones, cada una tiene sus demonios, solo espero que me des un poco que cuartelillo, como habrás podido comprobar, soy bastante torpe y no hago estas cosas aposta, pero por desgracia me pasa a menudo.

Retiré la mano rápidamente, zafándome de la suya, el contacto me había incomodado y ella se había dado cuenta, pero se limitó a sonreír.

- Procura ser más cuidadosa, por favor, hay cosas con las que no se lidiar muy bien, y si no pones de tu parte, vamos a chocar más veces.

- Vale, hagamos una cosa - respondió girándose hacia mi, sentándose sobre su pierna derecha - yo voy a intentar no ponerme cerca de ti cuando coma o beba, y voy a prestar especial atención a los obstáculos que tenga cerca, pero si por algún casual la lío, tú vas a poner de tu parte y vas a contar hasta diez antes de montarme un pollo, maldecirme o querer quemarme en la hoguera.

- Hecho - sonreí afirmando con la cabeza - pero si algún día ves que me da un brote, no me lo tengas en cuenta. Ya habrás podido imaginar que soy un poco... especial.

- Pues la verdad es que no había notado nada - bromeó con naturalidad- no se de qué me estás hablando.

Se echó a reír como si lo que hacía dicho fuera los más gracioso que había escuchado en la vida, y esa risa ronca, que en otra ocasión me había irritado hasta el extremo, me pareció lo más sexy que había escuchado en años.

- Bueno - corté el ambiente de repente, intentando volver a mi zona de confort y de control - ¿Has encontrado algo en la habitación de la chica?

- Vaya forma de cortar el rollo - añadió sonriendo antes de continuar con su explicación - no, solo el diario, la habitación estaba bastante ordenada, no había pistas que nos pudieran ayudar, pero creo que el hallazgo del diario con un poco de suerte, nos puede ayudar bastante.