Crystallize

Descendientes

— ¡Nerón! —vuelve a gritar Urania.

—Está muerto. —le habla Melanie. —Hermana.

La chica se voltea lentamente y mira a su hermana. — Melpómene. —Dice incrédula— estas viva...
—Urania. —la llama su otra hermana, la mencionada se voltea y sonríe al ver a Tessa su sonrisa crece al ver a la otra rubia que está detrás de ella.

—Euterpe por todos los dioses están vivas. —Sophie frunce el ceño pero se mantiene callada.
Otra chica da un paso al frente, saliendo detrás de Sophie, la castaña con la mariposa dorada dibujada en la mejilla. La castaña de ojos grises  mira a la otra chica que es igual que la rubia. Todos sus rasgos son iguales excepto por el cabello y los ojos.

— ¿Qué clase de poder es este?—pregunta Urania claramente confundida, los ojos de ellas pasan por sus hermanas y Phoe abre la boca.

Pero Tessa se adelanta. —Ella no es Euterpe, es su reencarnación, al igual que ella. —Dice señalando a Sophie. —Ella posee la transcendencia, la poseedora de la transcendencia. Y ella, es la guardiana.

—Ocuparon el lugar de Euterpe. —intercede Melanie. —Ellas dos han ocupado el lugar de nuestra hermana, la castaña se hace pasar por ella. No quiere que volvamos, le ha convencido a Terpsícore.

— ¡No! Yo he aceptado estar del lado de ellas porque no es correcto resucitar de la muerte. Esta es otra época, un nuevo siglo. Y por más que quiera a Mel no puedo aceptar los di quiere llevar acabo.

— ¿Y qué es lo que quiere llevar a cabo?

—Traer a esta época a los titanes. —Habla por primera vez Sophie. —Me llamo Sophie, Sophie Johnson. Yo y mi hermana somos descendientes de la que tú llamas Euterpe. No ocupamos su lugar, ella nos lo cedió. No buscamos la guerra, buscamos la paz. Hemos estado luchando tres años contra el dios de la destrucción Apolo, ganamos. Pero tu hermana nos quiere robar la paz.

Urania permanece en medio de las cuatro chicas.-Que tienes que decir a todo esto Melanie.

—Apolo buscaba la manera de revivirnos  a las nueve, pero para eso las hermanas Gonzales debían morir. Para traer a Euterpe, deben morir. Apolo solo buscaba la manera de resucitarnos, y ellas. —dice señalando a las dos hermanas. —lo mataron, debemos traer a los titanes solo así gobernaremos. Es hora de que las nueve musas gobiernen lo que se merecen.

Tessa da un paso al frente. —Eso no es verdad, no podemos esclavizar a los mortales.

—Entonces ellos si nos pueden esclavizar, nos esclavizaron una vez. Fuimos víctimas de los mortales. —las cinco chicas se miran entre sí, es voz no es de ellas. Desde arriba se ve caer una sombra, que a la hora de tocar tierra cae con delicadeza. El cabello rojo es lo que mas resalta. —Ni yo ni Melanie vamos a dejar que nos vuelvan a tratar como animales. Te unes a nosotras o nos haces la guerra.

Los ojos grises de la chica de debaten entre los dos bandos. —Una cosa más. —dice Phoe. —Cuando la guerra empezó las estrellas se nos fueron arrebatadas.
—Y lo única forma de verlas era así.-agrega Sophie, sus manos se extiende. Los parpados de la rubia se cierran y al momento de cerrarse pequeñas estrellas empiezan aparecer por todo el lugar iluminando en la penumbra.

Los ojos grises de Urania se abren impresionados al ver todo su alrededor lleno de estrellas. —No queremos que las estrellas vuelvan a desaparecer. —termina de decir Tessa.

Urania le lanza una mirada inquisitoria a sus otras dos hermanas.-Siempre he estado en contra de la esclavitud  y de la guerra, vosotras de veis saberlo. Si he de haber guerra, me asegurare de estar del lado bueno. Y claro está que ese lado no es el vuestro, lo siento mis queridas hermanas pero me iré con las que se hacen llamar hermanas Gonzales. Yo tampoco quiero ver un cielo sin estrellas.