Give me love (Nick Jonas y tú).

Capítulo 21.

“Últimamente has estado viniendo muy seguido, ¿no crees?” Comentaba mi papá mientras entrabamos a la calle donde se encontraba la casa Jonas. Me vio de reojo mientras trataba de concentrarse en el camino.

“Y tu punto es…” Reí. Sabía que no había dicho eso solo porque si. Nunca se los dije, pero amo a mi papá. Tal vez no se lo decía mucho, y era porque me costaba un poco expresarme con él, pero siempre m hacía sentir bien y la pasaba muy bien con él.

“No sé, tal vez hay ‘algo’ ahí con un Jonas.” Me miró sonriendo y lo único que pude hacer fue reír. “¿El chico de los rizos que estaba pegado en tu pared hace unos meses?” Volví a reír.

“¡Claro que no! Yo estoy enamorada del pequeña Frankie.” Lleve mis manos a mi corazón.

“Claro.” Dijo él sarcásticamente y al mismo tiempo se estacionó frente a la casa.

“Nos vemos luego, papá.” Besé su mejilla y abrí la puerta para salir del auto.

“Cuídate. Mucho cuidado con lo que haces.” Me dijo antes de que cerrara la puerta y guiño el ojo. Yo le saqué la lengua en forma de juego y camine hacia la entrada.

Toqué el timbre y volteé hacia el camino para ver como el auto de mi papá se alejaba poco a poco. Se escucharon ruidos como si trataran de abrir la puerta. Cuando la puerta por fin se abrió, vi unos ojos y un chico muy lindo parado enfrente de mi listo para salir con mi nueva mejor amiga.

“¿Cómo me veo?” Me dijo el inmediatamente, sonriendo.

“Definitivamente saldría contigo.” Le dije dándole a entender que se veía muy bien. Pero en realidad, se veía mejor de lo que puedo describirlo. La forma en que su cabello estaba peinado, su ropa, todo. Se hizo a un lado y me dejo pasar.

“Gracias por tu opinión.” Pasamos a la sala y ahí estaban Denise y Paul desempacando unas cosas de unas cajas.

“Hola, ______” Me saludó Denise. “Hacia días que no te veía.”

“¿Qué tal?” Dijo Paul sonriendo.

“Buenas noches.” Dije tímidamente y les devolví la sonrisa. En eso Kevin baja de las escaleras usando su sonrisa más linda.

“¡______, has llegado!” Me abrazó y besó mi mejilla.  “¿A dónde iremos?” Me preguntó.

“No sé, ¿A dónde quieres ir?”

Volteé a las escaleras y ahí venia mi mejor amigo. Bajaba los escalones a un paso algo apresurado. Sus rizos iban de arriba a abajo. Llevaba una camisa de color azul, y como siempre, traía las mangas dobladas hasta los codos. Se acercó a nosotros y besó mi mejilla.

“Hola.” Sonrió.

“Hola, Nick.”

“Creo que es hora de irme.” Anunció Joe, tomando las llaves de su auto. “Deséenme suerte, familia.”

“Suerte, hijo.” Dijo Paul.

“Compórtate.” Le dijo su mamá, y no sé porque pero el comentario me pareció gracioso.

“Conquístala, hermano.” Kevin le palmeó la espalda.

“No lo eches a perder.” Le advirtió Nick.

“Exacto, no lo eches a perder.” Le dije. “Suerte, galán.” Tomó un gran respiro y salió por la puerta, no sin antes de agitar su mano en el aire. Denise se disculpó y subió a la segunda planta. 

“¿A dónde irán esos dos?” Pregunté curiosa.

“No sabemos. No quiso decir.” Respondió Kevin.