Give me love (Nick Jonas y tú).

Capítulo 38.

Y así, mientras yo caminaba hacia el colegio, Nicholas estaba subiéndose a un avión que lo llevaría lejos de mí. Aun tenía que caminas unas cuatro cuadras, pero sentía que un poco de aire fresco antes de entrar a ese lugar me caería bien.

El timbre sonó justo cuando entré al establecimiento. Cuando llegué a mi salón el profesor de historia ya estaba escribiendo la fecha en el pizarrón. Toqué la puerta y me asomé un poco.

“¿Me permite pasar?” Pregunté cortésmente.

Me miró a través de sus lentes y asintió con la cabeza. Cerré la puerta detrás de mí y caminé hasta mi asiento.

“A penas es la segunda semana y ya llegaste tarde.” Me dijo Michelle.

“Sí, bueno… hoy me vine caminando.”

Me miró por unos segundos. “Excusas. Excusas. Todos tienen una.”

Michelle era con la persona que más hablaba en el día. No siempre hemos sido amigas, creo que todo empezó el año pasado. Desde entonces siempre se ha sentado enfrente de mí y pues… yo atrás de ella. Lógico. Eso era dentro del colegio, pero afuera las cosas eran un poco diferentes.

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Ahora me encontraba tratando de inventar una excusa buena del porque no había asistido a la famosa pijamada de Amber.

“Err, mis padres tuvieron que salir esa noche y me quedé cuidando a Tyler.” Creo que después de todo Michelle estaba en lo correcto.

“Oh, qué mal.” Se lamentó la rubia. “Bueno, otra vez será.” Me tocó el brazo y luego se fue.

“Algo de lo que acabas de decir no me convence del todo.” Dijo mi amiga castaña. “Aquí hay gato encerrado.”

“No sé de que hablas.” Me hice la desentendida y seguí comiendo mi barra de cereal.

“Podría haber jurado ver una figura masculina en la puerta de tu casa a media noche.”Mis ojos se abrieron como plato al escucharla decir eso. Ella rió por mi expresión. “Tranquila, solo bromeaba. A esa hora esta en lo de Amber cantando arriba del sofá.”

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Miercoles. Mitad de semana. Solo había hablado una vez con él e intercambiado unos cuantos mensajes. Demi seguía aquí en Dallas pero no la había visto. Estaba sola en la sala viendo MTV, aunque admito que se había vuelto algo aburrido hacerlo yo sola.

Te has olvidado de mi! Haha. Salimos hoy?

 

Oprimí el botón de Enviar y listo. Ahora solo faltaba esperar por una respuesta por parte de ella.

_______! Lo siento! Hacía mucho que no veía a mis amigos y he estado saliendo con ellos, pero sabes que puedes venir si quieres.

 

Claro, me olvidaba que no soy su única amiga por aquí.

Oh, no te preocupes. Diviértete!

 

Creía que vería MTV por el resto del día, pero el timbre de mi casa sonó y aunque no quería, tenía que abrir la puerta. Sorpresa, sorpresa.

“Hola.” Saludó, pero yo no respondí. “No vengo a discutir. Solo… quiero hablar con alguien.”

Odiaba verlo a los ojos porque sabía que terminaría cediendo.

“Pasa.” Dije rindiéndome. La verdad, no tenía ganas de sostener otra discusión y creo que yo también necesitaba hablar con alguien.