Después de varios días preparando mi sorpresa para Calum, me tumbé en el sofá de la sala y no me moví en varios minutos.
¿Estaba haciendo lo correcto? No sabía cómo iba a reaccionar Calum a mi regalo, pero suponía que le haría ilusión. Es lo que él me dijo que quería.
De Luke seguía sin saber nada. Ya había pasado un mes en el cual el único contacto que tenía con él eran los centímetros de distancia que nos separaban en la mesa a la hora de comer y su mirada cuando coincidíamos por los pasillos.
Las cosas cada vez estaban más frías, pero suponía que estaba haciendo bien, al fin y al cabo, fue él quien quiso que nuestra relación fuera así.
Supongo que lo único que ha cambiado en él durante este mes, es que Calum y él están más juntos que nunca. Y eso me alegraba, me gustaba verles así de felices.
Zoe: Toc toc, tierra llamando a Melanie.
Abrí los ojos y despejé todos aquellos pensamientos centrando mi atención en Zoe.
Zoe: ¿Ya tienes todo preparado? – asentí sonriéndola –
Mel: Espero que le guste…
Zoe: ¿Bromeas? Le va a encantar, sabes que lo está deseando.
Imaginé la cara de Calum cuando le diera mi regalo; sabía que le iba a encantar.
Mel: ¿Y Noa dónde anda?
Zoe: Adivina adivinanza… - dijo alzando las cejas –
Mel: Debí suponerlo – me levanté y me dirigí a la habitación – Me voy a dormir un rato, en cuanto lleguen los chicos despiértame, ¿sí? – me asintió –
POV Michael
Entramos los tres en casa entre risas, como siempre. Tener a Luke y Calum de vuelta era lo mejor que nos había podido pasar, porque antes, para Ashton y para mí, era un marrón tener que estar en medio.
Michael: ¿Qué tal estás? – dije dándola un pequeño beso –
Zoe: Bien – echó un vistazo hacia los chicos - ¿qué tal va la cosa?
Michael: Mejor de lo que me esperaba, pensé que iba a tener que aguantar algún momento incómodo yo solo porque el cabrón de Ash se ha ido con Noa –
“Otra vez” dijimos al unísono y empezamos a reírnos
Zoe: Michael, tengo que ir a despertar a Mel, ha estado toda la mañana zanjando el asunto… - miró a Calum –
Michael: Bien, entiendo – sonreí –
Zoe: Luego tengo que hablar contigo – dijo mirándome seria –
Michael: Me acojonas cuando me miras así.
Rio mientras negaba la cabeza y subía a despertar a Mel.
POV Mel
Me desperté por el ruido de algo que no sabía reconocer muy bien qué era. Abrí los ojos y me encontré a Zoe sentada en mi escritorio removiendo varias hojas.
Salí de la cama disparada y la aparté de aquellas hojas.
Zoe: ¡Ey! ¿¡Qué te pasa!?
Mel: ¿Quién te ha dicho que tengas que hurgar entre mis cosas? Joder Zoe, son cosas muy personales.
Zoe: ¿Quién es Jason? – la miré indicándola que se callara – está bien, lo siento.
Mel: Es solo una historia más que estaba escribiendo.
Zoe: ¿Sigues escribiendo? Pensé que lo habías dejado. – negué –
Mel: Bueno, ahora tenemos tiempo libre, así que… - sonreí - ¿han llegado ya los chicos?
Zoe: Sí, a eso venía cuando me he encontrado con esto.
Fui a salir del cuarto pero Zoe me detuvo.
Zoe: ¿Puedo contarte una cosa? – asentí – Mira, últimamente solo confío en ti y en Michael, Noa está como…
Mel: Como ausente – me asintió – si.
Zoe: Prométeme que no vas a chillarme ni nada del estilo, pero es que es algo muy serio estoy muy nerviosa Mel…
Mel: Prometido, ahora solo suéltalo.
Zoe: Es difícil… Mel… - se acercó a mí y me cogió de la mano – creo que estoy embarazada.
Me quedé petrificada al segundo. Agarré su mano fuertemente; esa fue mi única reacción. Fui a hablar pero Zoe continuó hablando.
Zoe: No me he hecho ninguna prueba, pero joder, siempre soy muy regular Mel, y tengo un retraso de seis días. No sé qué hacer, soy imbécil, y quiero decírselo a Michael pero…
Mel: Ey, tranquila, ¿sí? – dije abrazándola – No le digas nada por ahora. Esta tarde iba a salir con Calum, pero vamos a ir las dos a la farmacia y vamos a hacer la prueba, y ya salgo a la noche con él, ¿vale?
Zoe me asintió y vi que estaba llorando.
Mel: Mira chica, como sigas llorando me vas a hacer salir corriendo del cuarto de lo fea que estás – dije sonriéndola – me cambio, y en lo que tardo vete maquillándote para disimular la rojez que se te ha quedado de llorar, anda.
Dicho aquello, al de media hora estábamos las dos abajo, pasamos un rato con los chicos (en el cual, como era habitual, Luke se pasaba mirando a su pantalla del teléfono) y nos dirigimos a la puerta, avisando que iríamos al centro a mirar ropa.
Calum: ¿Ni un beso de despedida? – me dijo Calum bajito –
Mel: Me los guardo para esta noche.
Calum: Me has cambiado por Zoe, ya te vale – dijo haciéndose el ofendido.
Mel: Las dos necesitamos tarde de chicas, y esta noche me tienes, no te preocupes – dije dándole un beso en la naríz–
Miré hacia Zoe, que hablaba con Michael, y después miré al resto.
Recuerdo el día que nos conocimos, se debieron pensar que estaba loca.
Salí huyendo con la maleta porque no quería ver a Calum.
