Ya había pasado una semana desde aquel beso con Calum. Una semana que, puedo decir, había sido la mejor. No solo por estar de nuevo con Calum, sino porque a todos nos iba todo genial.
Noa acompañó a Michael a su casa para hablar con sus padres y hablar del tema de Zoe. Después de mucho esfuerzo, Noa consiguió que los padres de Michael confiaran en Zoe, aunque no les gustó la idea que fuera Noa quien diera la cara por ella.
Noa y Nick estaban lo más adorable que se podía estar. Estaban en ese punto medio, que ni muy pasteloso ni muy poco romántico. “Creo que me estoy pillando, Mel” me dijo mi hermano hace días. Llevaban poco más de un mes, y lo estaban disfrutando al máximo, como debía ser.
Michael y Zoe tuvieron varios días que no se dejaban ver el pelo, solo durante los conciertos y ensayos, pero ahora todos volvemos a estar juntos.
Y sobre mí, ¿qué decir? Estaba en una nube, y aunque sabía en el fondo que esa nube podría explotar en cualquier momento, entre Calum y yo estábamos haciendo que duráramos. Los dos nos conocíamos demasiado bien,como para saber que él no debe llevarme a citas romanticonas ni yo a él al cine. Tampoco podríamos ir a pasar el día a la playa, porque terminaría quemándome y tampoco sé nadar.
Todos esos detalles, él ya los conocía. Y adoraba tener que saltarme esa fase de conocer a la otra persona, porque es ahí donde sueles ver las cosas que no te gustan de la otra persona y la dices adiós para siempre.
Pero Calum sabía mis malas costumbres, y yo las suyas, y estaba dispuesta a tener que aguantarlas si así puedo estar con él.
Eso era lo único que me importaba en aquel momento.
POV Luke
Ya había pasado un mes entero de gira. Los nervios estaban olvidados en algún rincón de Sidney, donde fueron las primeras actuaciones. Ahora nos tocaba Perth, y estábamos todos más que preparados. Estábamos en la mejor etapa, y yo lo sabía. Sabía que si comenzábamos a ser reconocimos mundialmente no íbamos a tener tanta libertad, y estar en este punto intermedio, donde te conocen por la calle pero no tienes gritos siguiéndote a todos los lados, era genial.
Estábamos los siete terminando una twitcam, las fans adoraban a las chicas, y aquello era genial en cuanto a poder hacer público al salir con ellas. Aunque bueno, esto les interesaba sobre todo a Calum y Michael.
Luke: ¿Te hace una cena de lo más romántica esta noche? – dije acercándome a Mel haciendo que se girara, una vez cerramos el portátil y no estar bajo la vista de las fans –
Mel: ¿Quieres decir que me llevarás al McDonalds? – dijo riéndose y yo asentí – me parece un buen plan. Se levantó y se acercó a Calum, avisándole de que esta noche saldría conmigo. –
Calum: No dejes que se la acerque ningún tío, ¿sí? – asentí firmemente, Calum era muy sobreprotector con ella, y allí salió Mel diciendo que nadie la iba a hacer nada, que estuviera tranquilo. Tras tener que soportar un largo beso entre ellos y las risas de Ashton por la escenita, se acercó a mí y nos largamos de aquel cuarto –
POV Mel
Nos pedimos un Happy Meal cada uno, y nos sentamos en la mesa más alejada, no sin antes tener que atender a un par de fans que había por ahí, sacándose fotos con Luke.
“¿Me puedo sacar una foto contigo, Melanie?”
Miré a la chica, y rápidamente me señalé.
“Eres genial, tienes una voz increíble”
“Oh, gracias” Sonreí y me saqué una foto con ella.
Luke comenzó a reírse mientras se sentaba en la mesa.
Mel: ¿De qué te ríes? – dije sin poder evitar sonreírle –
Luke: Deberías haber visto tu cara cuando te pidió la foto… - dijo entre lágrimas –
Mel: Ha sido mi primera foto con una fan, no sé… - Luke se detuvo y me sonrió –
Luke: Te esperan un montón más, y lo sabes.
Tuvimos una cena alucinante, adoraba aquellos momentos a solas con Luke en el que nos contábamos todo.
Absolutamente todo, incluso el detalle más insignificante.
Luke: Oye Mel, quería comentarte una cosa. – asentí – Bueno, tú eres chica y… necesito opinión.
Mel: Buena observación – dije provocándole una corta risa – Bueno, di.
Luke: Verás – dijo sonrojándose – He conocido a alguien en este tiempo – llevé mis manos a la boca, ¡ya era hora!
Mel: ¡Cielo santo Luke! ¡Por fin! ¡Tus hormonas se han despertado! – comenté feliz; mi mejor amigo nunca me había mencionado ningún tema sobre amor, ni me contó sobre sus ex ni nada –
Luke: Es que yo pensaba… que seguía por mi anterior ex. Pero me temo que no. – dijo mirando a su caja de Happy Meal ya vacía -
Mel: ¿Y eso es malo? – su expresión hacía ver que lo era –
Luke: No sé cómo tomármelo. Quiero decir, a ella le gusta otro… pero con mi ex no tenía nada que hacer tampoco.
Mel: No creo que pierdas nada hablando con esa chica, Luke. No se lo digas directamente, solo pregúntala cosas sobre ese chico que dices que le gusta. Las chicas no sabemos mentir en eso, y además… si ve que estás interesado va a caer rendida ante esos ojos azules – Luke sonrió, pero aun así no me miraba. Estaba triste, se le notaba. Y no sabía qué más decirle para poder animarle. - ¿Nos vamos ya?
Luke me asintió y recogió su caja y la mía, tirándolas a la papelera, para después dirigirnos al hotel.
El camino fue silencioso, pero para nada incómodo. Luke estaba pensando aún en aquello, y no quería molestarle. Pero yo no paraba de preguntarme algo.
Mel: Luke, ¿cómo se llama?
Luke sacó su mano derecha del bolsillo del pantalón, para después abrocharse la sudadera que llevaba, dejando cubierta su camiseta de Vans. Por un momento pensé que no iba a contestarme. Pero lo hizo.
Luke: Alex, de Alexandra.
