05. Modus Operandi.

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Ted levantó a Ada a las seis de la mañana, para que pudiese bañarse y prepararse para el colegio, en lo que él preparaba el desayuno y se alistaba de igual manera.

—La niñera irá por ti al colegio, quiero que te portes bien ¿de acuerdo? –Observó a su hija.

—Sí, siempre lo hago –informó la niña –por cierto ¿podría venir Clare a visitarme mañana?

—Cariño...

—Cuando Angie estaba no había problema con que ella viniera –le recordó Ada.

—Bueno, Angie y yo teníamos un arreglo, sin embargo, la señorita Potter... lo hablaré con ella y si no tiene inconvenientes en cuidar de Clare, bienvenida sea.

—Gracias, papi –le sonrió encantada –te quiero.

—Y yo a ti –admitió alegre, pero con el semblante tranquilo.

Sujetó las cosas de la niña y salieron de casa, para su sorpresa, sus llaves estaban colgadas donde siempre, frunció el ceño, consternado ¿había tenido tiempo de sacar copia ayer mismo?

—Ada ¿a dónde te llevó la señorita Potter antes de venir a casa?

—No fuimos a ningún lugar, papi, de tu oficina vinimos directamente a casa ¿algún problema? –elevó la vista hasta Ted.

—Nada, dejó mis llaves, no sé si podrán entrar...

—Ah, eso, cuando pasó por mí al colegio, un amigo suyo la había llevado hasta allá, y luego nos llevó a tu oficina, y le pidió favor de que sacara la copia, lo hizo sin chistar y con una gran sonrisa, creo que le gusta.

—Gracias por la información, cariño –le sonrió a su hija.

La sujetó de la mano cuando cerró la puerta y avanzaron hasta la camioneta, no estaba de un buen humor, esa chica estaba exponiendo a su hija con un tipo que él no conocía y no había autorizado para acercarse a Ada, tenía que hablarlo con ella en cuanto llegara a la casa por la tarde.

—Te veré en la tarde, papi –se despidió la niña y avanzó tranquilamente al edificio.

Ted se sentó en la camioneta, observando a la nada durante un momento, recordando las palabras que Ada le había dicho "Un amigo de ella, creo que le gusta" él no dudaba eso, la había llevado casi por media ciudad, ¿a qué precio o con qué recompensa? Sacudió la cabeza y encendió el motor, para dirigirse a la oficina.

—X—

Victoire entró a la oficina de su jefe con un montón de cosas que tenía que revisar, aprobar y firmar, frunció el ceño cuando lo encontró de mal humor ¿hacía cuanto que Ted no iba enfadado por las mañanas al trabajo?

—Dime ¿qué pasó esta vez? ¿Alguien se te atravesó en el camino?

—Vic ¿tu prima sale con alguien?

La mirada del varón se topó directamente con la de ella, aquella pregunta la sorprendió por completo ¿Ted estaba interesado en Lily? Era demasiado pronto, pero bueno, según su anécdota, Laura le había interesado desde el primer momento en que la vio, era su modus operandi al parecer.

—No que yo sepa –se encogió de hombros –la última chica con la que supe que estuvo, sólo duró una semana con ella.

—Chica ¿a tu prima le gustan las chicas?

Victoire rió divertida. —Creo que no tiene problemas con el género, si le gusta una persona, va por ello, la envidio, de cierta manera, pero dime ¿por qué el interés?

The Sitter [Teddy & Lily]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora