Capítulo Veinticincoavo.

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- Oye, tontito. Tengo unas cositas tuyas. ¿Qué está pasando? - envió como mensaje de voz a su chat privado con el noruego.

Le enviaba mensajes. Llegaban a su dispositivo pero la marca de la izquierda no se pintaba de azul. Rubius no leía sus mensajes pero sí los recibía.

¿Qué tanto haces que no contestas?✔✔19:20

OYE✔✔19:22

QUE TENGO MALETAS ACÁ ✔✔19:22

Las voy a abrir y voy a quemarlo todo o igual lo vendo a la caridad.  ✔✔19:26

DOBLAS! 😡✔✔19:30

 ¿Doblas?✔✔19: 38

Finalmente se decidió por llamarle. Sonaba pero él no aceptaba la llamada.

No contestaba. Y todos los que se llevaban con él sabían que habían ciertas situaciones donde no contestaba. Naturalmente, mientras duerme y se baña. Podrá ser otaku pero se ducha como ser humano, y por supuesto que no va a detener su aseo para ir por el móvil.

Otra cosa en la que no suele contestar es mientras graba. Y en la que definitivamente no toma el móvil, es mientras conduce. ¿Cuál de estas opciones era la actual? Se preguntaba Samuel.

Pero dejó de preocuparse. Ya luego vería los mensajes y le respondería algo que lo dejaría como un total exagerado.

Sinceramente ni recuerdo si mencioné en capítulos anteriores la hora y pues le puse una al azar

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Sinceramente ni recuerdo si mencioné en capítulos anteriores la hora y pues le puse una al azar.

¿Doblas?┊ 𝙍𝙪𝙗𝙚𝙜𝙚𝙩𝙩𝙖.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora