Cap 27

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POV Amy

No, no, no. Esto no me puede estar pasando a mi.
¡Nooooo!.
Se me acabaron los churros.
¿¡Porqueeeeee!?.
Maldito Sonic.
¡Me vengare!.
>:V.
- No te metas con el mejor- Como odio oírlo pavoneandose así.- Puedo verme delgado pero soy un pozo sin fondo.
- De eso estoy segura, hartón.
- ¡Oie!.
- Oye, Shado...Oh, ¿¡Que mierd*!?- Q-qué?...como? :V
- ¿Qué?- Lo dice muy tranquilo el pendejo, como si no se hubiera comido 23 churros.
-...Nada, olvidalo.
- ¿C-como te comiste....?.- Casi lo olvido, le ganó a Sonic, ÙwÚ. Ya puedo morir en paz.

Debo admitir que la casa de Shadow es bastante bonita, está bien ordenada y todo...y yo que ni siquiera tengo apartamento ahora. :"3.
No sé a dónde me iré a vivir. Ya que mi presupuesto se recortará debido a lo que le tengo que pagar al dueño de mi antiguo e incinerado departamento.
No esta muy feliz, pero tampoco es que me quiere matar...creo.
De seguro está planeando su venganza todas las noches.
De seguro está pensando en cómo meterme una dinamita adentro y utilizarla para amenazarme por si no le pagó.
De seguro va a secuestrar a mi perro y-y....espera...yo no tengo perro.
Bueno...
De seguro está pensando como hacerse pasar por mi profesor de historia y reprobarme en todos los exámenes para que me quede en 8° por toda la vida y pueda torturarme por lo que me queda de aliento.
¡Nooooo!.
El muy hijo de su madre sabe que no voy bien en historia.

-Rose...¡Rose!
- ¡Noooo, Sr. Chantick, no me repruebe, por favor!.
- Eh...¿Sr. Chantilly?
- ¿Uh?...Ah...Shadow...je. Hola.
- ¿Qué cuernos te pasa? Parecía que estabas agonizando.
- Eh...de seguro fueron los churros...jeje...- Carajos, no se disimular.
Bueno...al menos soy mejor que Sonic. En el centro comercial le dije: Mira disimuladamente.
Y se contracturo el cuello.
- ¿Te pasa algo, Ammes?- Está vez era Sonic interrogandome.
- ¡Ya te dije que fueron tus churros del demonio!
- ¡Oye!, Nadie insulta mis churros y vive para contarlo.
¿Qué está haciendo...?
Oh no...
- ¡Ahhhh!, ¡Joder!, ¡Quitate, ser inservible de Sátanas!- ¡Madres!, Este pendejo me está aplastando.
- ¡Sonic!, ¿¡Qué no vez las heridas que tiene!?- Shadow se agachó y me ayudó a quitarmelo de encima. Pude respirar mejor sin el peso de Sonic encima de mi.
- *Cof Cof*, Gracias, Shadow.- le agradecí. Pero claro, no me estaba poniendo atención, estaba buscando el mejor lugar del cuello de Sonic para intentar extrangularlo.- Wow, Wow, Wow. Alto ahí, compadre. Sin matanzas en frente de la niña.
- ¿Qué...?- Si pues...Eva no estaba poniendo la mínima atención, se estaba poniendo ciega en churros.
- Hpmh, te dejo solo porque aún me debes 30 dólares.
- Pero...podrías matarlo y luego robarle su billetera- Que linda mi hermanita, dándole ideas al psicópata de Shadow.
- Si. ¿Ves, Rose?, Todos ganamos.
- Nope, me baja al pendejo azul en este instante.
- Hpmh. Amargada.
- Je, bueno como sea, me voy a mi...casa...Jejeje, nos vemos luego. Vamos, Eva.
- Emm, ¿Rose?.
- ¿Sip?
- Exactamente...¿Que casa?.
-...
- Como lo sospechaba, te echaron, ¿Cierto?.
- Pfff, no.- Baje una mano, restándole importancia al asunto.- Claro que no...jeje- Y claro, como soy retrasada, no me puede faltar la risa nerviosa que siempre me delata.
- Rose...
- No importa, vámonos Eva.- La tomé del brazo y cruzamos la puerta. Salimos rápidamente de allí y nos dirigimos al apartamento para ver al dueño.
Gracias a Dios, Shadow ya me dió el dinero de la puerta y la ventana que me habían roto.
De hecho, eso es lo que le voy a pagar.
Le próximo mes le tengo que empezar a dar el dinero de los daños que produjo el incendio.
En serio, no se dónde voy a irme a quedar.
No quiero molestar a nadie pidiendole permiso para quedarme a vivir en sus casas.
¡Claro que no!.
Pero...no se que voy a hacer.
Claro...todavía llevaba arrastrando a mi pobre hermana. La cual solo se dejaba llevar por mi mano.
- Ay... perdón, Eva.
- Eso no importa...lo que me preocupa es donde nos vamos a quedar.

Me enojo un poco que lo dijese así nada más, si no me equivoco el incendio se provocó por SU descuido. No siempre me voy a poder encargar yo de todo. Y le encargue una simple cosa:

"-Eva, por favor, cuida el pollo que está en el horno, Shadow no me deja bajar, porque dice que debo descansar.
- Claro, Amy. No te preocupes".

Y claro, luego yo me tengo que preocupar durante una pinche operación de HÍGADO, por cuales cosas se habrían hechado a perder durante el incendio.
Tome aire y canalice mi irá para no explotar contra Eva.

- ¡No lo se!, !Que yo sepa esto no abría pasado si te hubieras concentrado en el horno!- Si eso...salió mejor de lo que esperaba. :)
Pero mi alegría se esfumó al ver la cara de sorpresa de Eva, que luego dió paso a una triste.
Inclino la cabeza y bajo las orejas.
- Tienes razón...creo que ya se porque mis padres se querían desacer de mi...soy muy torpe y todo lo hecho a perder...- empezó a llorar un poco, pero luego se secó las lágrimas.- Perdón...
Yo permanecí sería.
La mire sin decirle nada.
Luego, se me ocurrió una idea.
Una idea tan maravillosa que supuse que me la habían llevado los mismísimos angeles.
- ¡Vamos!- la volví a tomar del brazo y a jalarla por toda la cuadra, para llevar el dinero al dueño del apartamento y luego poder ejecutar mi plan malévolo.
Corrí como loca, arrastrando a Eva por todos lados, cuesta abajo.
Llegamos rápido.
Mire el portón de entrada y dude un momento.
Luego tome aire y entre, perdiendome entre las multitudes de inquilinos que tenía el dueño de los apartamentos.
Todavía llevaba a Eva prensada, pero está vez para no perderla de vista.
Entré en la oficina, que estaba desierta.
Bueno, excepto por el hombre que estaba sentado en ese sillón de piel.
El dueño.
Mi miro con cara sería y esbozó una falsa sonrisa.
Le pedí mil disculpas por molestarlo y le pagué el dinero de la puerta y ventana.
Se le miraba un poco sorprendido.
Me imagino que pensaba que le iba a rogar que me dejara seguir viviendo allí.
¡Ja!
No jodas.
Me despedí y salí lo más dignamente de su oficina.
Claro
Con Eva todavía pegada a mi brazo.
Cuando salimos de allí, saque mi teléfono y marqué el número.

-Ok... ahora si.
- ¿A quien llamas?
-...

-Aló?
-Si, hola Mephiles...

Dos polos distintosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora