Capítulo 24

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 Caminar en el parque

No pude dormir. No después de ese recuerdo, si puedo llamarlo un recuerdo. Y lo peor de todo es que tener esa visión solo me trajo más dolor ... siempre y cuando no tuviera las respuestas a todas mis preguntas, lo mismo sucedería esa noche ...

Dudas. Miedo. Lágrimas. Palabras que pueden asociarse conmigo fácilmente, así como débiles. Y estaba cansada de sentir eso, aunque sabía que mi memoria apenas comenzaba a volver ahora. ¿Cuánto tiempo me seguirán esos sentimientos?

Abrí mi armario y me di cuenta de que Christopher había tomado el sobre. Estaba tratando de ayudarme, un esfuerzo que incluso suscitó dudas. ¿Sospechaba del hombre que me estaba ayudando, que estaba compartiendo su casa conmigo? Dudar de él fue un pecado para mí. Confiar en él era lo menos que podía hacer.

Logré conciliar el sueño solo después de mucho tiempo. No soñé con nada, sin visión, sin memoria. Cuando desperté, vi que había un gran armario en lugar del anterior anoche. ¿Quién puso eso por allí? Christopher ...

Me levanté de la cama y busqué al ángel. No estaba en la cocina. Salí por el pasillo y me di cuenta de que la puerta de la habitación prohibida estaba abierta de par en par. Cuando me acerqué, vi al ángel mirando la imagen que había pintado la noche anterior. Era muy atento, mirándolo como si tuviera un código secreto que necesitaba descifrar. Una vez más, me sentí mal porque él estaba tratando tanto de ayudarme. No creo  que pueda pagar lo que estaba haciendo.

Dulce: Voy a tirar ese cuadro- dije, acercándome.

Se sorprendió al escuchar mi voz.

Christopher: Lo siento, todavía no he preparado el desayuno.

Dulce: No hay necesidad de molestarse.

Christopher: ¿Y por qué estás tratando de deshacerte de la pintura?

Dulce: No me gusta ver esa imagen ...

Christopher: Es realmente inquietante la forma en que pintaste esta escena, pero también puede ayudarte a recordar algo más.

Confieso que no quería recordar nada asociado con esas dos lápidas. Sonó el celular del ángel.

Christopher: ¿Qué pasó?- Él dijo, respondiendo.

Pasaron unos segundos antes de que volviera a hablar.

Christopher: Creo que es una buena idea, preparémonos y vámonos pronto. Adiós...

Colgó.

Christopher: Anahí -, dijo, dirigiéndose a la puerta. - Nos invitó a ir al parque.

Dulce: Parqué?? - Dije imaginando a Anahí jugando en un parque.

Christopher: Sí, ¿no quieres ir?

Dulce: Claro, ¿ porqué no?

Fui a mi habitación y me preparé. El ángel no tardó mucho en prepararse y pronto fuimos a su automóvil. Me preguntaba cuánto tiempo no había visitado un parque. Ni siquiera lo recordaba, obviamente, pero estaba seguro de haber visto uno cuando era más joven. Christopher no tardó mucho en estacionar el automóvil. Cuando abrí la puerta, me encontré con algo completamente diferente de lo que pensaba.

Era un parque, pero no un parque de diversiones donde a los niños les encantaría pasar una tarde. Era un parque arbolado, cubierto de hierba, con un gran lago en el centro y un camino de piedra que lo rodeaba. Un entorno para alejarse un poco de la vida urbana.

Christopher: ¿No me digas que pensaste que era un parque de diversiones?- Christopher dijo, sonriendo.

Dulce: Bueno ... - dije sonrojándome. - Confieso que pensé, pero también imaginé que no era el estilo de Anahí invitarnos a ese ambiente.

Christopher: Um ... aun así creo que te decepcionó.

Dulce: Ya soy una mujer adulta, si aún no lo has notado.

Christopher: Cálmate ... no tienes que estar enojada. Prometo que iremos a un parque de diversiones la próxima vez.

Dulce: Bueno-  No dije nada, seguí adelante y lo dejé solo. El lugar era realmente hermoso. Un ambiente perfecto para alguien que quería un poco de tranquilidad para poder poner en práctica sus ideas, algo que necesitaba en ese momento. Terminé tirada en la hierba debajo de un árbol. Christopher se acercó y se acostó a mi lado.

Christopher: ¿Y? ¿Te gustó el lugar?

Dulce: Me encantó ... necesitaba sentirme así ... más ligera ...

Christopher: Mucho mejor que esa cena, debes estar pensando.

Dulce: Fue mi culpa, quedé como cenicienta.

Christopher: ¿No sería bella durmiente?

Duor Sí ... - dije con vergüenza porque me confundí. - Te hice perder tu tiempo ...

Christopher: No digas eso. Debería haber sabido que estabas cansada. Y ya dije que no me importaba que te acostaras conmigo.

Dulce: Debes haberlo amado, ¿verdad? - Hablé con un poco de ironía.

Christopher: ¿Qué quieres decir con "amado"? Creo que Anahí ha estado diciendo algunas mentiras sobre mí ... con una sonrisa en su rostro.

Dulce: Dijo que estás bastante disputado entre las mujeres ...

Christopher: No veo a ninguna mujer peleando con otra por mi culpa.

Dulce: ¿Y crees que solo hay este tipo de disputa?

"No lo sé", dijo con una sonrisa. - Cuando hablan de luchar por el amor, solo puedo pensar de esa manera. Anahí estaba exagerando, no soy todo eso.

Dulce: ¿Quieres decir que nunca disputaste una mujer con nadie?

Se giró para mirarme. Estábamos muy cerca, incluso acostados.

Christopher: Tienes mucha curiosidad ... Creo que deberías ser periodista en lugar de pintor ...

Dulce: Gracioso...

Volvió la cara hacia el cielo, que era azul, sin nubes a la vista.

Christopher: Digamos que ya conocí a alguien ... - dijo suavemente como si recordara algo del pasado...

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Hola chicas primero que nada una disculpa por tardar tanto en actualizar, voy a tratar de ponerme al corriente con los capítulos, espero que no hayan olvidado la historia.

Memoria PerdidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora