🅃🄸🄽🄳🄴🅁🔥
~¡𝙁𝙚𝙡𝙞𝙘𝙞𝙙𝙖𝙙𝙚𝙨, 𝙅𝙞𝙢𝙞𝙣!
𝙋𝙖𝙧𝙚𝙘𝙚 𝙦𝙪𝙚 𝙩ú 𝙮 𝙔𝙤𝙤𝙣𝙜𝙞 𝙨𝙚 𝙜𝙪𝙨𝙩𝙖𝙣.❤
¿𝙀𝙣𝙫í𝙖𝙧 𝙪𝙣 𝙢𝙚𝙣𝙨𝙖𝙟𝙚?
» [𝚜𝚒] 🔥
» [𝚗𝚘]
Lo único que el pequeño Park Jimin pudo pensar fue un:
-"¿Cómo dices que dijiste...
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Jimin iba dado saltitos por toda la agencia de BigPark, buscando a su torpe padre que había dejado olvidado el contrato renovado de su mejor solista masculino en la barra de la cocina de la casa. Le llamó a su hijo preguntándole si por favor podía llevarselo sin comentarle nada a su madre.
Jimin le dijo que si, a cambio de que comprara más helado y galletas de chocolate y que nadie más se las comiera, porque iban a ser de él solamente.
Así que luego de que el alfa aceptara a regañadientes, el omega le había pedido a su tío que lo llevara en su coche, ya que el mayor había ido a visitarlo e iba a ir a dejar también unos papeles importantes, pero a la agencia donde trabajaba su hijo, y prácticamente la agencia de su hermano le quedaba de pasada. Y Jimin ahora iba dando saltitos de camino a la sala de ensayos, ya que la recepcionista le había mencionado que su padre estaba allí.
Jimin también estaba feliz porque podría hacerle una visita sorpresa a su alfa. No lo veía desde el día anterior en la tarde, y eso ya era demasiado tiempo para el corazoncito de pollo del menor.
Llegó a la sección de danza y tocó la puerta del único salón que parecía estar ocupado y tenía la puerta cerrada. Luego de un par de segundos, para su sorpresa, fue su amiga Nayeon la que le abrió. El omega se extrañó de que la fémina estuviera en el edificio creativo, si ella trabajaba en el administrativo, pero luego de ver sus labios un poco rojos e hinchados y el cabello revuelto, cayó en cuenta de la razón de que la mayor estuviera tan lejos de su zona de trabajo.
— ¡Noona! — gritó y se arrojó a los brazos de la pelinegra — Woa~ ¡tanto tiempo!
Le muchacha correspondió el abrazo muy a gusto y feliz.
— ¡Lo sé! Desde que tuvimos la tarde de películas en la casa del pálido Yoongi. — respondió entre divertida y enfuruñada — ¡Cómo tú no me quieres! — dramatizó.
El pelirosa rió al ver la mala actuación de la mayor.
— Tú también podrías llamarme para que quedaramos, ¿sabías? — respondió con sorna.
— ¡No me gires la guillotina, eh! ¡Respeta a tu Noona! Tsk, ya sabía yo que juntarte con Min te haría mal... — habló la ojigris, fingiendo seriedad.
