Viernes 27, Marzo
Cat
Empiezo a bailar con unos compañeros de clase, con los cuales no he hablado para nada en todas estas semanas de escuela, son agradables, aunque ya estén un poco ebrios. Y yo no he tomado absolutamente nada, esto está mal. Voy con paso decidido a la cocina y veo a Joan y a Nico preparando los tragos.
-¡Cat! ¿Qué tal la estás pasando? -me pregunta Nicolás, que está muy guapo, como siempre.
-Ahora, pues muy bien. Necesito uno de esos -señalo los vasos ya preparados- por favor.
-No, creo que a ti te prepararé otro -dice Joan- estos están algo...fuertes.
Joan se pasa la mano por la frente y me sirve uno de los tragos, si no me equivoco es vodka.
-Por cierto, muchas gracias por hacer la fiesta, en serio se lucieron. Les cuento que jamás pude tener la fiesta de quince años que quería, porque no tenía amigos que quisieran hacerla y mucho menos asistir... -estoy apunto de llorar por segunda vez esta noche- en serio, gracias.
Voy directo a abrazar a Nicolás y me recibe con calidez, quisiera que no se termine nunca este momento.
-No hay de qué. -dice Joan, en su lugar- Ten tu vaso.
-Gracias ¿Los veo en la pista de baile al rato?
-Te acompañamos -dicen al unísono. Vaya, qué coordinados, supongo que entre ellos debe existir esa conexión tan fuerte de pareja.
Nico
Esto parecía más una pelea que un baile, Joan y yo salimos tras ella con unos vasos de trago en las manos y Joan se adelantó jalándola para bailar frente a él. Está loco si piensa que me quedaré mirando. Me pongo detrás de ella y sujeto su cintura para atraerla hacia mí. Creo que solo un vaso es más que suficiente, ella baila mientras le da unos sorbos al trago.
Joan me mira por encima de Cat, como si se estuviera burlando de mí. En eso, él la jala de la nuca y termina con sus manos en su espalda. Veo que se acerca más a ella para decirle algo al oído que no logro escuchar por la música. Cat niega con la cabeza y se safa de él ¿Qué pendejada le habrá dicho? No sé por qué motivos, ella se volvió a pegar a mí. Era evidente que solo quería bailar con los dos y no dar una vuelta en el auto como seguramente le ofreció. Cuando el ambiente ya está más tenso de lo usual veo a Daniel pasar cerca de nosotros ¡Genial! lo jalo del brazo para evitar que se vaya a donde sea que se haya estado dirigiendo.
-¡Oye! ¿Por qué no bailas un poco con la cumpleañera? Nosotros ya la tuvimos un buen rato- No puedo creer lo que estoy diciendo solo para acabar con este momento tan incómodo. Daniel me mira de manera muy extraño porque evidentemente soné realmente estúpido
-Ah... supongo que está bien- dice mientras toma a Cat de la cintura
-Al rato ya salen los tragos- agrega Joan antes de irnos a la cocina
No sé cuál es la puta necesidad de Joan de incomodar a Cat siempre que la tiene cerca, es obvio que ella no confía del todo en él y no la culpo, Joan no es precisamente un ángel.
-Quita esa cara de culo Nick, te dije que no quería ver más de tus estúpidos celos- dice sacándome de mis pensamientos.
-No sé de qué mierda hablas, solo deja de acosar menores de edad, no creo que quieras irte a la cárcel ¿Verdad?- le contesto mientras comienzo a llenar los vasos con hielo y licor, los dejo en la isla de la cocina para que él se encargue de poner la gaseosa.
ESTÁS LEYENDO
Solo un Juego de Niñas
De Todo-Ya no tenemos a nadie más ¿No? -se rió Cat -Como siempre, tú y yo contra el mundo... y es mejor así a decir verdad. ... Anto y Cat se mudaron de un lugar en el que vivieron las cosas más tristes de su infancia y de toda su vida. Con la esperanza d...