Capítulo 36

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Después de que Sehun estacionara el auto, Luhan tardo unos segundos en juntar el valor, para después salir.

Ambos caminaron a la par, hasta llegar a la puerta. Luhan abrió con su llave y Kyungsoo los recibió.

[Kyungsoo]— Niño Luhan, llegó más temprano hoy — hizo una reverencia — ¿Quiere algo de beber o comer? — pregunta mirándolo con sus manos cruzadas detrás de su espalda.

[Luhan]— Un poco de jugo y galletas es suficiente — sonríe dejando sus zapatos en la entrada de la casa — Llevalo al estudio, el señor Oh me ayudará con mi tarea — recién cuando esas palabras salieron de su boca, se dio cuenta de en lo que se había metido.

[Kyungsoo]— ¿A usted se le apetece algo, señor Oh? — pregunta mirando al mas alto de los tres.

[Sehun]— Con un café común estoy bien, gracias — luego de eso, el moreno asintió y se fue a la cocina a preparar lo que le pidieron.

Luhan estaba nervioso, no quería estar con este idiota toda la tarde, mientras le explicaba cosas que seguro jamás iba a usar en su jodida vida.

[Sehun]— Bueno, enseñame el lugar en donde estudias — con eso intento alivianar un poco el ambiente pero lo único que logró, fue que el menor sudara frío.

[Luhan]— Si, es por aquí, señor Oh — le hizo una seña con la mano y comenzó a subir las escaleras.

[Sehun]— ¿Podrías dejar de llamarme así? No tengo cuarenta años — le pide aun caminando detrás del menor.

Luhan al escucharlo levantó una ceja y mordió su labio para no reír.

[Luhan]— ¿Entonces? ¿Cómo espera que lo trate? — sigue caminando hasta que llega a la puerta del estudio.

[Sehun]— Solo Sehun o hyung, no se, cualquier cosa menos "Señor" Odio eso — camina dentro de la habitación mirando todo.

[Luhan]— ¿A si? Pues que lástima que lo odie — deja su mochila sobre el escritorio.

El mayor levantó una ceja y se cruzó de brazos, al escuchar tales palabras tan secas, salir de esos finos labios color cereza.

Le había sorprendido un poco su actitud, pero lo dejó pasar sin mucha importancia.

[Sehun]— Eso no importa, por ahora solo nos concentramos en la tarea — se sentó a un lado del de cabello de color, aprovechando la oportunidad para sentir el rico perfume del Park menor.

Luhan podía jurar que con cada respiración y cada roce de hombros o brazos, podía morir.

¿Por qué Sehun olía tan jodidamente bien?

Esa pregunta lo dejaba sin ninguna respuesta, sin aire, sin pensamientos, sin nada en realidad.

Porque cada vez que Sehun se tomaba el tiempo de repasar algo, se ponía de pie a un lado y se inclinaba, explicando lo que no entiende. Su perfume llenaba sus fosas nasales y bloqueaban su cerebro. 

En esa posición, también, más de una vez la tentación casi le gana. La camisa se despegaba de la piel del mayor, cada que se inclinaba, dejando ver sus clavículas y algo de sus pectorales.

Seguía sin saber de donde sacó tanta fuerza de voluntad, ya que literalmente no le había puesto ni un dedo encima.

Cuando Kyungsoo interrumpió en la habitación, le agradeció soltando un suspiro un poco mas libre, ya que se había sentido presionado por un momento.

Tenia que calmarse, de él dependía si Sehun, volvía arrastrándose o le dejaba el camino fácil y obvio la segunda fue descartada de forma rápida.

No lo hará sufrir, solo le devolverá las sensaciones que le hizo sentir.

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Sorpresa Bajo La Falda - [HunHan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora