Capítulo 24: Entrevista de doble filo

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Comenzaba junio y justamente iniciaba con la entrevista de César, que días antes del cumpleaños de Victoria fue invitado a una breve entrevista por la noche en el programa "Confesiones" de Aurora Valle, como siempre él acepto ir al programa. Ahora recién se publicaba la entrevista en el canal.
El día en que grabó la entrevista, Victoria lo acompañó, aún que claramente ambos se pusieron de acuerdo para tomar una "distancia" en los pasillos, cada quien por su lado o al menos eso pretendían.

Flashback

-Vamos, no te preocupes...es que quiero acompañarte.- Victoria se acercaba a él, que estaba recostado en la cama.
-Vicky, es muy riesgoso. Todos se van a preguntar qué haces allí a esa hora, fuera de tú horario de trabajo.- La miraba mientras tenía el celular en su mano.
-Pero...- César la interrumpía.
-Además no tienes que preocuparte. Yo solo grabo la entrevista y ya está, me vengo de inmediato para acá.
-No. No me parece. Quiero ir contigo César. Y no voy a aceptar un no de respuesta.
-¿Quieres qué nos vean?
-Oh por Dios.- César la miraba.- No va a pasar nada malo. A esa hora no hay nadie de la prensa dando vueltas. Y bueno...no te preocupes tanto, yo voy a estar lejitos tuyo.
-Bueno y si vamos a estar lejos...entonces para qué vas?
-Pues porque quiero acompañarte. No me quiero quedar sola aquí en casa. Ay ya César, no soy Vivían, como para que me dejes botada aquí. Soy tú mujer o no?.- lo miraba sería.
-Pues ya, estás decidida. Esta bien.- la miraba riendo.
-Y no te rías. A mi tú me respetas.
-Ok ya, no es necesario que te pongas pesada conmigo. Para mi no es una tortura ir contigo, me encanta de hecho.
-Ah si? Pues fíjate que no pareciera eh. Tenias cara de que estaba estorbando, casi torturándote con la idea.
-No digas eso mi amor...es solo que me preocupa que nos vean, más si nos ven llegando juntos.
-Te aseguró que nadie nos va a ver, no te preocupes. Vamos a ir justo en el horario en que no anda casi nadie. Lo importante es que no nos vean llegando juntos.
-Entonces cómo lo hacemos? Cada uno en su coche?
-No. Vamos a ir los dos en tú coche. Lo importante es que no me vean bajando de el.
-Esta bien.- estaba escribiendo en su celular.
-¿A quién le escribes tanto?.- se pegaba a su lado, tratando de mirar su celular.
-A Mariana.- se levantaba las gafas y la miraba.- ¿Por qué preguntas?
-Por nada...solo quería saber, ya que te veo muy entusiasmado escribiendo.
-Si, de hecho mira.- le mostraba el celular.
-Ok ya. Si te creo.
-Para que no te pongas celosa.- le acariciaba el cabello.
-Mándale saludos de mi parte. A ella y a los bebés.
-Ok mi vida, yo se lo digo.- le escribía a su hija Mariana, que estaba en Miami.
Victoria se levantaba de su cama e iba por ropa para César.
-Mi amor cómo vas a ir vestido al programa? Con qué ropa?
-Yo había pensado en ir en bóxer solamente.
-Ay ya.- comenzaban a reír juntos- Hablo en serio.
-No había pensado en nada. Simplemente una camisa de las que tengo a cuadros y unos pantalones.- seguía recostado en la cama.
-No. Tienes que ir con algo un poco más formal mi amor. Ósea no digo que vayas con una corbata ni nada de eso, pero igual el programa de mi amiga Aurora es más "semi formal" ya ves.
-Bueno si tú dices...y qué me recomienda señora Ruffo?.- la miraba.
-Pues yo no soy muy de vestirme bien que digamos. Pero se cuando algo es más formal o no...bueno, te acuerdas de la camisa negra que fuimos a comprar exclusivamente para la obra?
-Si, si me acuerdo.
-Debe estar por acá.- revisaba el guarda ropa de su casa, pero allí también habian cosas de César.- No la encuentro. Te la llevaste?.- volteaba a verlo.
-No...creo. A ver, parece que la tengo aquí.- se levantaba de la cama.- Aquí en la maleta.- cada vez que pasaba tiempo con Victoria andaba con su maletita gris, que la usaba exclusivamente para cuando iba a pasar tiempo con ella.
-La encontraste?.- Vicky lo miraba.
-Si aquí está.- César escarbaba la maleta sobre la cama.
-Que bueno. Entonces ponte esa camisa.
-Esta camisa negra con unos jeans? O no? Así no me veo tan viejo, como tú me dices.
-Jajaj Si, esta bien así. Se ve un poco más juvenil, aun que ya pareces viejito mi amor.- volvía a reír.
-Me estás molestando?.
-No.- seguía riendo.
-Dios, siempre te burlas de mi.
-Lo siento César.- se paraba al frente de él, subiéndose a la cama. De esta forma quedaba a su altura y luego lo beso.
-Entonces me voy a duchar para vestirme.
-Bueno...ah ponte esta chaqueta.
-Como usted diga reina.
Una vez llegaron a Televisa, César estacionó el coche. Ambos bajaron de el, estaban de suerte pues nadie los vio. A excepción del guardia, que ya a esas alturas estaba acostumbrado a ver a muchos actores llegar e irse juntos, no era una novedad.
César ya estaba en el estudio, cuando Aurora se encontró con Victoria en los pasillos, cerca del estudio donde grababan su programa.
-Hola mi Vicky.- Aurora se acercaba a saludarla con un beso en la mejilla.
-Hola Aurora. ¿Cómo estás querida?
-Muy bien, aquí ando chambeando como me ves. Pero no me quejo, es mi programa y me gusta. Y tú? ¿Cómo estás?
-Bueno si, pero ya grabas y te vas a tú casa verdad? Yo bien gracias a Dios.
-Pues si. Fíjate que tengo que hacerle una entrevista a César Évora y ya me voy. Me alegra que estés bien Vicky. Deberíamos juntarnos eh? Con Lupita y tú hermana Gaby...
-Ah que bueno...- hizo como si no tuviera idea de la entrevista a César.- Si, por supuesto. Deberíamos hablarlo, nos ponemos de acuerdo y hacemos una salida.
-Si, nos hablamos. Bueno tengo que ir al estudio. Cuídate si?
-Ok nos vemos, tú igual cuídate.
Aurora la dejaba a mitad del pasillo, sola. Claramente ella no tenia ni la menor idea de la doble vida que llevaba su amiga. Aurora consideraba a Victoria como una amiga, pero más que eso eran unas buenas conocidas, ya que no se conocían del todo. A diferencia de la gran amistad que tenía Victoria con Lupita Martínez, quien sabía y conocía muy bien a su amiga.
Una vez Aurora estaba lista, ya instalada en el estudio, llegó César. 
-Hola César.- le daba un beso.
-Hola Aurora. Un gusto estar aquí, que me hayas invitado. Gracias.
-De nada César. Es un gustazo tenerte aquí. Bueno te voy a hacer unas preguntas muy de tú pasado, para que la gente en sus casas sepa un poco más de ti. Cómo llegaste a México y todo.
-Esta bien, no hay problema.
Victoria decidió entrar al estudio. Habló con un productor, y entre medio de las cámaras estaba bien escondida viendo cómo grababan toda la entrevista.
Una vez terminó la grabación de sintió algo incomoda pues César había hablado mucho de Vivían, ya que las preguntas estaban muy relacionadas a su familia y cómo había llegado a México. No pudo evitar sentirse mal, de todas formas decidió salir del estudio entre medio de los camarógrafos, trató de pasar desapercibida pero justamente cuando ya casi salía Aurora la vio.
-Vicky?.- Victoria no la escuchó.- ¡Vicky!.- fue hasta ella. ¿Qué haces aquí?.- la miró intrigada.
-Ay nada, digo...tenia que hablar algo con un productor, justamente que trabaja aquí en tú estudio...- mintió.
-Ah y pudiste hablar con él?
-No, no lo encontré...y de hecho vi que estabas con César entonces decidí quedarme un poco para ver solo una parte de su entrevista.
-Que bueno. Y te gustó?
-Si, si estaba muy interesante.
Justo salió César de allí y se encontró con las dos.
-Ah mira, justamente...hablando del rey de Roma. César ven.- Aurora le hacía señas.
-¿Qué pasó Aurora?.- César se acercó.
-Mira aquí está tu amiga, tú partner en las novelas. Vicky Ruffo.
-Hola César.- Victoria fingió su papel de compañera.
-Hola Vicky.- le daba un beso en la mejilla.
-Me alegra que se hayan encontrado. Mira, Vicky me estaba diciendo que vino a ver un productor, al no encontrarlo justo nos vio y se quedó viendo la entrevista.
-Ah mira tú.- le abría los ojos.- Que bonito.
-Si. Me quede pegada viéndolos. Salió súper bien.
-Bueno, yo los dejo tengo que ir a ver unos detalles de la grabación para luego irme a casa. Adiós cuídense. Un gustazo César.- le daba un beso a cada uno y se iba.
-Así que venías a ver un productor?.- rió.
-Si.- lo acompañó con la risa.
-Mira tú...no lo pudiste encontrar?
-No, pero me quede viendo a un cubano, bien guapo por cierto.
-Ah si?
-Si y me encanta.- le coqueteaba con la mirada.
-Tal vez ese cubano esté molesto porque usted vio su entrevista.
-No lo creo. Bueno y si lo está, luego se le pasa en la casa.
-Ah entiendo señora Ruffo.
-Me voy al estacionamiento señor Évora.
-La sigo luego.
-Lo espero allí.- salía del estudio.
Victoria se fue por uno de los pasillos de Televisa. Cuando iba caminando se encontró de frente con su amiga Mizada Mohamed.
-No puedo creerlo. Vicky querida.- la abrazaba.
-Hola Mizada. ¿Cómo estás?
-Bien Vicky muy bien. Y tú?
-Me alegro mucho, yo estoy bien también. Ya ando grabando aquí, con la nueva novela. Es corta eso si, pero esta muy padre, es algo nuevo para mi, ya que pertenece al género comedia.
-Oh pero que bueno. Si algo oí o vi por allí acerca de tú novela. Me alegro Vicky.
-Bueno, de hace tiempo que no nos vemos.
-Si hace buen tiempo ya. Deberíamos hacer una junta. Bueno por ahora ando con mucho trabajo con mi canal de YouTube y la conducción de aquí, pero ya se podrá.
-Claro, de todas maneras Mizada.
-Esperó verte pronto amiga.
-Ay yo igual.- Vicky sacaba su celular que tenía en el bolsillo de su poleron azul, bastante juvenil y sport por cierto.- Te parece si nos tomamos una foto?
-Por supuesto Vicky.
Le pidieron a un asistente que andaba por allí para que les tomara la foto.
Cuando Vicky llegó al estacionamiento César ya estaba ahí.
-¿Por qué te demoraste en salir? Era yo el de la entrevista.- rió.
-Si, es que me encontré con una amiga, Mizada.
-¿Quién?
-Ayy si la conoces. Mi amiga, Mizada. Es bastante espiritual.
-Ah verdad, ya me acordé.
-Hablamos un poco y nos tomamos unas fotos. De hace tiempo que no la veía, ya que tiene sus temas y yo los míos.
-Bueno señora, nos vamos de aquí?
-Si, vamonos. Tenemos mucho de qué hablar eso si.- se subía al coche.
-¿Qué pasó?
-Tú sólo conduce.
Ya habían llegado a la casa de Victoria. Estaban en el sofá de la sala. Casi ya era de madrugada.
-Bueno me vas a decir qué te ocurre? No hablaste nada en el coche.- César la miraba sin entender su comportamiento.
-Nada en específico. Supongo que deben ser cosas mías, de mi cabecita.
-¿Por qué dices eso? ¿Te molestó algo?
-Si...aun que a estas alturas ya tengo que aceptar que no soy tú mano derecha y tú mano izquierda...
-Ah...estás molesta por eso que dije?
-Si, ósea solo un poco...digo...por lo bien que hablaste de Vivían y yo allí oyéndote, viéndote...casi te creí todo el cuento.
-Vicky mi vida, no digas eso. Solo lo dije y ya. Me acorde de esos momentos tan dificiles para mi y durante mi carrera ella fue mi apoyo. Tengo que admitirlo, me apoyo cuando todo estaba en mi contra para poder venir aquí a México.
-Esta bien.- se cruzaba de brazos, sentada en el sofá.- Ella siempre tendrá su lugar...
-Ya, por favor no te pongas así corazón.- le tomaba las manos y se agachaba- Sabes muy bien que te amo a ti. De hecho prueba de eso es que estoy aquí, contigo.
-Si César, esta bien. Solo que me sentí un poco mal...escucharte hablando así. Me imagino que te sentirías igual si yo dijiera lo mismo de Omar.
-Si, tienes razón. Me sentiría igual de mal, pero tranquila. Te entiendo mi vida, aun que la diferencia ahora es que ya no estás legalmente casada con Omar.
-Bueno, olvidémonos de lo que dijiste o no. Son solo palabras que no dicen lo que sentimos realmente.- le sonreía.
César se sentaba a su lado para besarla.

Tan enamorados (historia terminada)✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora