...
-Mmmm...César cierra la puerta.- decía Victoria entre apasionantes besos y risas.
-Ya mi vida eso intento...empujó la puerta de un solo golpe con su pierna mientras la llenaba de besos.
-Se me había olvidado lo riquísimo que era tener sexo contigo en un camerino.- Victoria reía a carcajadas.
-Seguimos arriesgados como siempre.
-Pues contigo es imposible resistirse, tú me puedes pedir lo que sea y yo te lo doy.
-Eso me gusto. Hay posibilidad señora de Évora que podamos seguir con nuestro encuentro apasionado en nuestra exquisita cama?.- César la miraba de una forma muy particular, de la manera más sexi que podía y levantó una ceja.
-Por supuesto mi amor.- Dicho esto Victoria se lanzó a su boca para llenarlo con su húmeda lengua y envolverle su boca.
Al sentir la húmeda y tibia lengua de Victoria en su boca, César se excitó instantáneamente, al punto de comenzar a jadear. Fue entonces que puso sus grandes manos en su cintura para guiarla de espalda por el pasillo hacia la cama, mientras se arrancaban fuertes jadeos con sus lenguas.
A punta de tropiezos entraron al dormitorio, cayendo en la cama, Vicky arriba de César.
-Ya te puedo desvestir amor.- le decía Victoria al oído a César, para luego darle pequeños besos en su cuello.
-Haz lo que quieras conmigo mujer...estoy entregado a tus encantos.
Dicho esto Victoria comenzó a desabrochar la comisa negra botón por botón mientras lo llenaba de besos húmedos en su piel. Como si quisiera marcarle la piel y en ella dijera propiedad de Victoria Ruffo. Es que ese hombre es único en el mundo, podía tener defectos, uno de ellos y el más peligroso eran sus locos celos. Más de una vez la regó por culpa de sus incontrolables celos, siempre le ha apestado ver a cualquier idiota cerca de su mujer...no era que la viera como propiedad, si no que ella era su mundo entero, y no le gustaba que alguien tuviera por segundos siquiera en sus brazos a su mundo entero, lo encontraba injusto. Como fuera, ambos eran unos locos celosos a más no poder, es por ello que se desquitaban cada vez que estaban solos.
Luego de que ambos se desvistieron los besos continuaron por cada rincón. César se subió arriba de Vicky, cambiando de posición, de forma lenta entró en ella, al punto que Victoria tensó todo su cuerpo en el momento. Una, dos, tres, cuatro, cinco...doce envestidas, fuertes gritos se arrancaban entre jadeos. Victoria se sentía en transe mental, de modo que comenzó a enterrarle las uñas a César en la espalda, ella quería seguir así pues estaba gozando mucho el momento, pero César quería que fuera eterno, lleno de pasión y amor. Así el hizo que cambiaran de posición, ahora ella volvía a tener el control y de forma lenta comenzó a enterrar a tite. Grandes saltos dio arriba de la protuberancia, César le sujetaba las caderas. Esa mujer lo había dejado completamente sudado.
Cada beso que se daban aumentaba el ritmo de su ser y sus más profundos deseos. Esos que solo algunas personas notaban y tenían la capacidad de percibir, específicamente esas niñas que creen en su amor y pueden ver lo apasionados que son entre ellos.
Finalmente Victoria cayó en el pecho de César, con un fuerte orgasmo, temblando, empapada de sudor y una carcajada fuera de sus sentidos. Él había liberado un poco antes el orgasmo con su potente voz.
-Ah no puedo creer que me perdí de esto durante semanas.- Victoria se reía mientras estaba muy agitada.
-Te gusto?.- Todavía se escuchaba muy agitado.
-Estuviste perfecto eh.
-Te amo tanto, que no imaginas lo plena que me siento cuando hacemos el amor.
-Ambos lo sentimos.- La apretaba con fuerza hacia su pecho, luego le besó el hombro.
-Vas a pasar la noche conmigo? Digo, no vas a tener problema? No quiero meterte en problemas, suficiente con lo de la obra, pero tengo que ser sincera, tampoco quiero que te vayas y no poder sentirte junto a mí.
-Ah que cursi eres mi vida. Jajaj. Tú tranquila, jamás rechazaría un proyecto a tú lado.
-Tú sacas mi lado más cursi, bien sabes que no soy así, más bien soy fría y ardiente jajaja. Me encanta que volvamos a estar en un proyecto juntos. Pero es en serio, quiero estar contigo, estás seguro que no vas a tener problemas?
-No mi vida, las cosas ya están mal, peor no pueden estar la verdad. Prefiero quedarme contigo con mi mujer haciendo cucharita...mmm.
-Que bien suena eso, te amo.- Se acercó lento para darle un pequeño beso.- Gordo, te puedo hacer una pregunta.
-Por supuesto mi vida.
-No te vas a cansar nunca de mí?.- Levantó su cabeza para mirarlo a los ojos.
-Jamás mi Vicky.- La beso apasionadamente.- Aunque pasen mil años y tengas toda la piel colgando y las arrugas invadan tú rostro, yo te amo y siempre lo voy a hacer porque me enamore no solo de tú anatomía, también de tú forma de ser, de tú alma y créeme que te voy a buscar en todas las otras vidas posibles y si no existen otras, soy capas de bajar al mismo infierno si es necesario. Que te quede claro que de mí no te separas.
-César, me dejas sin palabras, no sé qué decirte. Siempre me dejas sin palabras, la verdad que yo no sé qué hice para tener un hombre tan maravilloso como tú.
-Me tienes loco mujer, amo todo de ti. Desde el día que te vi en la oficina de chava.
-Y tú me alborotas las ganas, solo pienso en ti desde ese día.
-Tanta magia hago en ti?
-Sí, increíblemente, mientras más pasan los años te pones más guapo mi Évora.
-Mejor no sigas que me lo voy a terminar creyendo.
-Pues créelo mi amor.
-Tengo a la mujer más guapa del mundo eh.- Levanto la sábana blanca que los cubría a ambos, para envolverla a ella, le acomodó la cabeza en su pecho.
-Ya me dio sueño.- Victoria alzo un gran bostezo.
-Buenas noches dormilona.- Le dio un beso muy dulce.
-Buenas noches mi King.
De esa forma, abrazados y desnudos en su nido de amor pasaron la noche, una de las muchas noches que pasarían juntos en diferentes camas del mundo. Esta gira les prometía muchos momentos y grandes pasos para su relación.
Esa noche muchas tekilaz terminaron algo desilusionadas, pues tenían grandes expectativas del famoso encuentro de la pareja tekila, si bien sabían que Vicky y César tenían sus encuentros clandestinos y que luego les tocaba fingir, de todas maneras encontraron extraña la forma tan formal y fría que se saludaron, sobre todo el comportamiento que mostró César. Poco sabían que era lo que había sucedido. De todas formas prefirieron no mostrar mayor importancia al asunto.
...
22 de febrero
Eran las doce del día y Victoria acababa de levantarse de su cama. Estaba en Ciudad de México en su pent-house. Para la tarde tenía un cumpleaños, algo comprometedor, ya que era el cumpleaños de la pareja de su jefe, Omar Suárez y no tenían ganas de ir sola, claramente no podía llamar a César para que fueran juntos, de modo que decidió llamar a su hijo José Eduardo para que la acompañara.
-Bueno?.- Contestaba
-Hola mi vida, cómo estás?
-Bien ma y tú?
-Bien, aquí recién levantándome.- Bostezaba.
-Ayy pero que flojera me das Ruffo, a poco ya me la pagaste.
-jajaja ya no me molestes eh, mira que ya sabes cómo soy.
-Bueno, bueno ma no te enojes, solo digo la verdad.
-Si, tienes razón si soy bastante floja y qué, me encanta dormir y lo sabes.
-jajaja no cabe duda señora, no son horas para despertar!
-Bueno ya, no te llame para hablar de mi flojera hijo, necesito pedirte un favor...bueno más bien es una invitación.
-Ok a dónde me vas a llevar?
-Resulta que esta noche tengo un cumpleaños y no quiero ir sola, también va Maribel con su esposo y no quiero tocar violín como dicen ustedes. Me quieres acompañar?
-Ya vas aprendiendo a hablar mejor jajaja. No tengo problema, eso si puedo llevar a Boris? No lo quiero dejar solo.
-Pero hijo como vas a llevar al puerco ese! Que horror.
-Si Boris no va, yo no voy Ruffo, hablo en serio, es como mi hijo.
-Mmm. Como eres José Eduardo...ya llévalo, qué cosa caray. Menos mal que no tienes una serpiente de mascota, ahí si espantas a medio mundo.
-ajajajaja no inventes.
-Que barbaridad.
-Bueno ma allí voy a estar, paso por ti?
-Si, te espero a las 17:00.
-Nos vemos, bye.
...
Victoria y su hijo se encontraban en el cumpleaños. Era en la terraza de su casa, un jardín enorme, con música y muchos invitados. Vicky compartía con Maribel y su esposo.
Todos los de la mesa se habían levantado a fumar cigarrillo haciendo grupo aparte, en ese momento Victoria se quedó sola con Maribel en la mesa.
-Pero que bien te queda ese look, te ves chulisima.- Maribel la a cortejaba y resaltaba la belleza natural de su amiga.
-Ay no es para tanto, solo me hice un flequillo adelante y me corte un poco las puntas del cabello.
-Amiga se ve tú cambio, quedaste chulisima, de verdad te ves como angelical, más fresca, más renovada. Dime cuál es tú secreto de juventud.
-ajajaja Mari no es nada, estás exagerando...bueno, en verdad quieres saber mi secreto de eterna juventud?
-Ah ya no me digas qué...eh?
-Qué, qué? Jajaaja Qué insinúas.
-A tite? Jajaja.- En ese momento ambas estallaron en risa.
-Ay no. Cómo crees, quién crees que soy amiga por Dios.
-Por eso lo digo, porque te conozco jajaja. Pero que bueno, podrías convidarme un poco.
-Que vergüenza de verás, soy perversa pero no a ese extremo.- Reía a carcajadas.
En ese momento fueron interrumpidas por José Eduardo y unos conocidos del medio de producción, quienes venían con el cerdito Boris a punta de risas. Poco falto para que el hijo de Victoria hiciera unas cuantas historias en Instagram para que las fans de Victoria corrieran a las redes para ver su nuevo look de cabello y vieran lo realmente guapa que se veía. Nuevo look que su eterno amante no había visto ya que se encontraba en Cuba, pero que de alguna manera se las arreglaba para verla en sus redes sociales, dado que siempre se enteraba lo que ella hacía.
-Bueno ya nos vamos?.- Victoria ya se comenzaba a sentir algo cansada.
-Vamos ma, despidámonos de todos y va.
Victoria apagaba su cigarrillo para despedirse de su amiga Maribel y de todos.
Una vez iban camino al coche sonó el celular de Victoria, era una llamada que justamente cuando iba a contestar se apagó.
-Este celular que nunca escucho.- lo buscaba con desesperación en el fondo de su bolsa.
-Siempre lo mismo. Sube al coche y luego ves quien te marco.
Ambos subieron al coche. Una vez dentro Victoria vio que tenía varias llamadas pérdidas de César, no pasó mucho tiempo para que decidiera devolverle las llamadas.
-Vicky por fin doy contigo, dónde andas?
-Hola mi amor, lo lamento es que andaba en un cumpleaños y no podía atenderte cómo corresponde. Pero ya voy camino a mi pent-house.
-Si me di cuenta.
-Cómo supiste? Si no te dije nada.
-Acuérdate que tengo una cuenta de Instagram por allí y de ahí veo todo.
-Fíjate que se me había olvidado. Que psicópata me saliste.
-Te ves preciosa con tú nuevo corte de cabello. Muy guapa, lamentablemente no fui el primero en verlo...
-Fue porque tú quisiste mi vida, prefieres irte a Cuba de vacaciones mientras me dejas sola y abandonada.
-Mi amor sabes bien que debo ir a ver a mi mamá, esta sola y nunca me ve.
-Si se pero perfectamente pudiste a ver ido solo y no con Vivían.- Ella comenzaba a irritarse, por lo que José Eduardo pudo notar sus celos en cada expresión y palabra que utilizaba.
-¡Ya ma! Deja de reprochar al pobre...-Se entrometía José Eduardo.
-Esto es entre César y yo no te metas hijo.-Lo miró irritada.
-¿Quién habla? ¿Con quién estás?-Preguntaba César muy curioso.
-Está José Eduardo conmigo, que no se calla y como siempre te está protegiendo.
-A ver ma, ponlo en alta voz.- Victoria le hizo caso y puso el celular en alta voz.
-¡Hola César! Cómo estás?
-Bien muchacho y tú?
-Yo bien, aunque tú no mucho jajaj. Ya te andan cobrando sentimientos.
-No me queda otra más que soportar a tú madre jajaja.
-¡Ya termínala! Anda muy pesadita la Ruffo.
-Ya párenle eh, esto no se los voy aguantar, los dos en mi contra lo que me faltaba.-De inmediato saco el alta voz.
-No te enojes mi amor, ya vamos a tener muchos meses para estar juntos y amarrados así como nos gusta.
-Bueno, me voy a calmar...tienes razón, te amo.-Lo decía aun un poco molesta.
-Yo te adoro mi vida y bien que lo sabes.
-Ok mi amor, más tarde volvemos a hablar mira que aquí hay un sapo al lado mío.
Ambos rieron por el celular, incluyendo José Eduardo al oír a su madre.
...
Era ya de noche en Ciudad de México. Vicky dormía en su pent-house se encontraba sola, solo a sus pies, en la cama, estaban sus perritos, Coco y Channel. Mientras que César estaba en Cuba, ya era de noche, se encontraba un poco impaciente pues había quedado con Vicky hablar más tarde por celular pero ella volvía a no contestar, pero esta vez era porque estaba dormida. Entre sonido y sonido, Victoria por fin despertó con el tono de llamada que era su canción favorita "Can't take my eyes of you" de Frank Sinatra.
-Bueno?.- Vicky contestaba su celular medio somnolienta, sin ver quién estaba llamando.
-Hola, mi vida. Por fin doy contigo? Te pasó algo? Me tenías preocupado.
-Jajaja No, solo que me había quedado dormida sobre la cama, estaba viendo la tv.
-Ah jajaja tan dormilona por Dios. Puede estar temblando y tú sigues en el décimo sueño.
-Ayyy bien sabes que me encanta dormir.
-Si lo se mi amor. Te encanta!
-Bueno, qué cuentas? Estás con tú mamá?
-Estoy aquí con ella, estábamos conversando, pasando un momento bien grato.
-Que bueno me alegro mucho por ambos, se necesitan todavía ya que no se pueden ver mucho. Y Vivían? Está con ustedes?.-Se escuchaba su voz más sería cuando nombró a la mujer.
-Ya ibas a salir con eso...no, ella está con su familia. Esta enojada conmigo y prefirió estar con su familia, lo cual para mi es mucho mejor.
-Bueno, cuál es el problema de qué quiera saber? Soy tú mujer, la dueña de tú corazón tengo derecho de saber si estás con ella o no.- se ponía algo celosa.
-Mi Vicky ya estás celosa mujer?- reía a carcajadas.- Ya perdón de que me ría pero es que te pones tan posesiva cuando tienes celos, lo siento pero me encanta que todavía te provoque eso.
-Idiota! Si supiera tú pobre madre el hijo que tuvo, tan burlesco...y no te hagas la santa paloma eh, tú mejor que nadie sabe que eres peor de celoso que yo. Yo por lo menos te regaño después del hecho, pero tú haces escándalos y te da lo mismo quien esté.
-Jajaja Bueno ya, lo reconozco. Si soy demasiado celoso...- César hizo un silencio repentino.
-Qué te pasa? César?
-Si...aquí estoy.
-Y por qué te callaste de repente?
-Mi mamá me estaba escuchando, está aquí al lado mío. Me dice que quiere hablar contigo.
-Oh que gusto, por supuesto dame con ella.
A través del celular se escuchaba lo que César le decía a su mamá.
-Mamá ten.-entregándole el celular- Ya puedes hablar con Vicky.
-Bueno?.-
...
"Te quiero como para escuchar tú risa toda la noche y dormir en tú pecho, sin sombras ni fantasmas, te quiero como para no soltarte jamás..."
Gracias por leer♥
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Tan enamorados (historia terminada)✔️
RomanceSiempre han estado hechos el uno para el otro, a pesar del tiempo siguen unidos por el mismo amor, ese que los une con un hilo rojo. El hilo se puede estirar, contraer, flaquear pero jamás romperse. Tan enamorados como antes, como siempre. Solo el...