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Adan:

Conozco de pies a cabeza el estudio, por esa razón pido el permiso para estar libre este día y darle un tour completo a Bella.

Y aunque yo estoy tranquila, ella se ve como un corderito atrapado en medio de tantos lobos, aunque no creo que haya una pizca de inocencia en Isabella Lewis.

No puedo evitar pensar que debajo de esas gafas, las cuales  vuelven atractivo su rostro y sobre todo, resaltan sus ojos marrones... hay algo más.

Una niña traviesa, de quien que no dudo que se haya humedecido sus piernas viendo mis vídeos.

 Me gusta. Me atrae.

Todo en mi querida entrevistadora.

—Cabe aclarar que solo voy a visitar el sed, no quiero.—Hace un movimiento con sus manos y sus mejillas se tornan de color rojiso.—No quiero presenciar ninguna "Actuación"

—¿Ni siquiera la mía, Bella?

—Menos la tuya.—Responde segura.—No quiero verte  actuar y menos antes de entrevistarte, no dejare de imaginarte desnudo y eso seria incomodo.

—¿Entonces me veras después de la entrevista?.—Le pregunto con una sonrisa, se queda en blanco.—No hay nada de malo en verme desnudo, Bella.

—Para ti no, quizás porque estas acostumbrado a tu trabajo.

—No puedo argumentar nada.

—Lo ves.

Isabella suspira.—¿Y por donde empezamos?

—Por donde desees, Bella.





—Por donde desees, Bella

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—Entonces esta es una habitaciones donde hacen las orgías.—Los ojos de Isabella no dejan de admirar la habitación.

—Lo diferencias por la cama, aunque muchos prefieren jugar en el mismo suelo. Es sucio y morboso.

Ella rodea la habitación, señala todas las cámaras que se encuentran enfocando la cama.

—¿Y siempre es así? ¿hay personas detrás de estos equipos todo el tiempo?

—Algunas veces no.—Le respondo.—Cuando la escena es muy complicada y los actores desean sentirse más cómodos, solo se encuentran las cámaras grabando. Aunque eso es algo que solo algunos tienen de privilegios.

—¿Y tu gosas de ellos?

—¿Ya quieres adelantar las entrevistas?

—No, pero deseo saber.—Dice honesta.

Tomo un respiro y me acerco a ella.—Digamos que podría solicitarlo, pero prefiero no hacer complicada la tarea de las personas detrás de cámara.

—¿Es eso o quizás te causa morbo que te vean coger?

Me encanta esta mujer.

—Tal vez sea eso, Bella.

En la piel de AdánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora