En la piel de Adán

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Isabella:

Leo el mensaje que me dejo papá despidiéndose y sonrio, estoy en la mesa sentada junto a Adán y muchos de sus amigos, compañeros y productores.

Incluso ese “Dani”

—¿Estas bien?. —Me giro hacia Adán, el me muestra una sonrisa.

—Si, es papá. Eso es todo.

Su sonrisa se mantiene y los mozos, quienes nos traen los platillos, nos interrumpen, toda nuestra mesa está llena de ruido.

Algunos conversando y otros discutiendo sobre quién tiene más popularidad seguido de Adán.

Observo a cada chico, tienes sonrisas perfectas y todos un cuerpo atlético, si el rostro no es uno tan agraciado, el cuerpo lo convence todo, muy diferente a las chicas.
Ellas si todas son guapas, operadas o no, son muy hermosas.

¿Todas las mujeres aquí son así de perfectas?

Como si una respuesta me abortara el rostro, una mujer pelirroja ingresa por la puerta.

¡Oh sorpresa!

Es la mujer del último video que vi de Adán, video con el que me masturbe por cierto.

—Freya, viniste. —Le dice una de las chicas y otras la miran en entrecejo.

Freya toma asiento cerca de Daniel, quien le da una sonrisa.

—¿Qué acaso tu sugar Daddy te dejo salir?. —Se burlan dos chicas.

—Al menos yo tengo quien me de, cariño y no hablo del trabajo.

—Entonces , no se porque sigues trabajando aquí, Freya. Si ya tienes quien te pague todas tus necesidad.

Freya va a hablar, pero Dani se adelanta.

—Freya es un miembro importante del equipo, chicas. Si ella se ha quedado es porque yo se lo pedí.

Freya le sonrie.

—Además no estamos aquí para pelear, al menos hoy llévenme bien con ella.

—Así les ates una correa al cuello, las envidiosas no van a cambiar. —Suelta ella.
Dani toma un respiro y pide que todos tomemos nuestras copas.

—Hay que brindan por Adán y las 10M.

Con una sonrisa me vuelvo hacia Adán, el esta muy emocionado por este logro.

—¡Felicidades, Adán! . —Corean todos.

Nos llevamos nuestras copas a los labios y pasamos a la cena, corto el pedazo de carne con los cubiertos y me lo llevo a la boca.

Mastico y pruebo otro poco del líquido que hay en la copa, antes de colocarlo, noto dos miradas sobre mi.

La de Dani y Freya, el parece comentarle algo acerca de mi y lo presiento así porque la mirada de Freya no se aparta de mi mientras el le habla cerca al oído.

Una sonrisa de burla cruza sus labios mientras juguetea con el arete costoso y que seguro le compro su sugar Daddy.

—Isabella.

Parpadeo al escuchar a Rick, me vuelvo hacia el, no solo el, sino también Adán y Kai me observan extrañados.

—Si, dime.

—Hablamos sobre tu padre, dije que nos cayó bien.

Sonrio despacio. —Ustedes también le cayeron bien.

—¿Y cuándo vendrá?. —Pregunta Kai. —Deberiamos organizar otra salida ¿No Adán?
Adán le sonríe con un gesto y luego se acerca a mi.