Isabella Lewis es una reportera que siempre trata de llevar el control, obsesiva con el trabajo y que busca sobresalir cada vez que puede en el.
Motivo por el cual lleva el apodo de "La Loca Bella".
Y cuando ninguno de sus compañeros acepta una entr...
—¿Aquí es cuando te preparas antes de salir a escena?. —Digo con una sonrisa.
Adán tiene una bata color blanco cubriendo su cuerpo, doy vueltas por su "Camerino" y el me detiene, sentándose sobre su regazo.
Nuestros labios se tocan y mis manos pervertidas bajan por su caderas acaricio las líneas del tatuaje y siento su erección formando.
Adán rompe el beso.
—Creo que ya no tendré que estimularlos, ya lo hiciste tú por mi.
Me río y lo beso una vez más.
—Adán entras a escena.. —Dani se detiene al verme. —Isabella, que gusto verte.
Hago una mueca, la mano de Adán va a mi muslo y yo me levanto.
—Te necesito ahora en el set.
—Enseguida voy.
Dani le da una mirada y abandona la habitación, Adán se vuelve hacia mi.
—Aún tienes tiempo para arrepentirte.
Niego con la cabeza.
—Estaré bien.
El se ve preocupado.
—Estar bien, ve. —Empujo su cuerpo.
El se ríe y antes de que abandone la habitación, lo detengo.
—Adán.
Se vuelve hacia mi.
—Yo también te quiero.
Sus ojos se abren.
—¡Adán!. —Vuelven a llamarlo, pero ya tiene una sonrisa producto de mi confesión.
Me quedo en silencio unos minutos y respiro despacio, la presión se me baja y mis piernas tiemblan.
Estoy nerviosa y no sé cómo será esto exactamente.
Bueno, si lo se.
Veré a mi novio acogiéndose a otra tipa.
Que mal se oyó eso.
Creo que voy a desmayarme.
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Estoy en el set, a un metro de Dani y a varios de la cama, donde se encuentran preparándose Adán y Freya, mientras ella yace tumbada completamente desnuda, Adán permanece con la bata.
Al menos es así cuando dan la señal para empezar a grabar.
No hay palabras, solo es sexo.
Sexo duro y sucio, ellos empiezan y yo me cruzo de brazos, como si de esa forma me diera fuerza y peso para no caer contra el pavimento.
Ellos graban empezando con una escena oral y la sensación que siente mi cuerpo no es tan fuerte, ni cuando veo que Adán finge el primer orgasmo.
Se que es fingido, lo he visto correrse conmigo, he sido testigo de sus expresiones cuando se corre en mi boca.
No es lo mismo.
Así que hasta ahí estoy normal, aunque literalmente otra se esté cogiendo a mi novio.
Pero.. entonces llega esa escena de anal y todo se vuelve incómodo, más aún cuando ella comienza a gemir su nombre solo para fastidiarme.
Adán es rudo con ella y me pesa porque nunca lo he visto así conmigo, porque nunca hemos cogido por detrás.
Respiro profundo.
Dejo que continúen y cuando me giro, tengo el rostro de Dani girado en mi dirección, viéndome con total burla.
Ellos se besan y algo revuelve mi estómago.
Siento como la bilis sube por mi garganta y los ojos de Dani sobre mi no me ayudan para nada.
Es más de lo que puedo tolerar.
Siento una presión mas potente en el estómago y tengo que apartar la mirada, pero no es suficiente porque aún los oigo.
Adán está gimiendo.
¿Es actuación? Se ve tan real.
No dudes ahora, Isabella.
Aunque dude o no, ya he salido del set, la bilis a llegado hasta mi boca.
—¿El baño, donde está?
Una de las chicas en los pasillos, aunque al inicio me confundida por mi aspecto, me indica rápidamente el camino, me cubro los labios y logro llegar a tiempo al inodoro.
Dentro dejo salir todo:
Mi frustración.
Mis celos contenidos.
El enojo.
El desagrado
La impotencia.
Y a pesar de todas esas emociones atacándome, no he retrocedido para nada en lo que pienso, seguiré con Adán...
