Más que Desconocidos [Areté Crild #4] ✔️

Capítulo 42 - El encierro

Capítulo dedicado @Bombom_0715 <3 

Taylor.

Flashback.

¿Y si no viene?

Boto el aire y le doy un trago a mi gaseosa ignorando esos pensamientos. Ella vendrá, estoy seguro.

En realidad no estoy seguro... Pero algo me dice que vendrá.

Hoy veré de nuevo a la rubia.

Aunque bueno, estos últimos días me he estado paseando por los alrededores del instituto solo para verla (lo admito), y he logrado sacarle un par de sonrisas y pláticas.

Ella es seria y cerrada, por lo que ha sido muy difícil acercarme pero por suerte no imposible. Hoy nos veremos en el auditorio.

Si es que viene.

Respiro hondo y lanzo la pelota contra la pared repitiendo la acción cuando vuelve a mi mano. Una y otra vez, es fastidioso.

Tomo un sorbo de gaseosa y subo la mirada ignorando la presencia femenina. Un momento.

¿Presencia femenina en este lugar solitario?

Es Miley.

Me levanto como un rayo y la observo de perfil. Parece estar buscándome y luce bastante tierna. Tiene una cola de caballo que deja a la vista su piel blanca, parece nerviosa y distraída.

—Llegas tarde —es lo primero que sale de mis labios y sonrío cuando salta ligeramente impresionada con mi voz.

— ¿Lo siento? —se gira quedando frente a mí y aprovecho de recorrerla lentamente con la mirada.

Nueva fantasía desbloqueada: Miley con uniforme y cola de caballo.

—Te ves preciosa —me acerco lentamente y ella me regala una sonrisa antes de cruzar sus brazos detrás de su espalda.

—Gracias, igual... Digo, que tú también te ves guapo, no preciosa, ya me entendiste...

Río y me detengo frente a ella robándole un rápido beso.

Su cara se pone rojita y su mirada de asombro solo me hace sonreír más. Se ve tierna cuando la toman por sorpresa.

—No hagas eso —dice rápido y tomo otro trago de soda bajo su atenta mirada.

— ¿Qué cosa?

—Pues, besarme... —la callo con otro beso y sonrío en medio de sus labios por que ella no me aparta en ningún momento.

Sus manos viajan a mis hombros y dejo la lata a un lado poniendo mis manos en su cintura.

Lentamente me da permiso para adentrarme a su boca y noto entonces que su cuerpo parece un papel de lo mucho que tiembla. Vale, sé que tal vez mi presencia la pone nerviosa pero, ¿para que tiemble así?