Capítulo 62 | La Profecía

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-¿Seguro que estás bien? –Volvió a preguntar ella.

Las rocas que habían caído para obstruir el paso de los otros vampiros empezaron a deslizarse, cayendo colina abajo. Justin pasó sus brazos debajo de las axilas de ____ para levantarla. La alejó, en un intento de protegerla. El paso se abrió y distinguieron un par de personas entre el polvo y la nieve.

-¡Justin, Jack, ____!

-¿Papá? –Habló Justin.

Las personas caminaron más y ante ellos aparecieron Jake y Franklin.

-¡Jake! ¡Frank! –____ gritó e intentó avanzar hacia ellos, pero su cuerpo no aguantó el peso y cayó al suelo.

Los tres hombres corrieron hacia ella para levantarla.

-¿Qué le sucede? –Le preguntó Jake a Justin.

-Mató a diez vampiros del sur. Usando sus poderes –explicó el castaño, negando con la cabeza.

-¿Poderes? –Interfirió Franklin-, ¿eso es posible?

-Lo descubrimos apenas ayer –dijo ____. Tomó un largo suspiro.

-¿En dónde está Jack? –Volvió a hablar Franklin. ____ y Justin se miraron y bajaron la mirada, sin saber cómo responder su pregunta-. ¿Justin, en dónde está Jack?

-Brad… –La voz de ____ se cortó.

Ella vio cómo los ojos de Frank brillaron y las lágrimas amenazaron con salir. Apretó los ojos, apartándolas. Jake respiraba con dificultad. 

-Escuchen –dijo Justin-, entiendo lo difícil que es, pero ahora tenemos que encargarnos de que ____ llegue con vida a la cima. 

-De acuerdo –Franklin recobró la compostura-, Justin, llévala a Lavanda. Jake y yo nos ocupamos de retener a los demás. –Ambos se alejaron.

-Vamos, princesa. Ya estamos cerca –la alzó entre sus brazos y trotó por el camino.

-¿Cómo voy a saber qué hacer cuando esté frente a Lavanda?

-Lo sabrás. Sólo tienes que confiar en ti misma.

Algo jaló la camisa de Justin desde la espalda e hizo que cayera al suelo. ____ se giró hacia el chico, quien era arrastrado por un lobo.

-¡Justin!

-____, corre. ¡Corre!

Con dificultad caminó rápidamente, pero los pulmones le fallaban y no podía avanzar más de diez metros sin tener que detenerse a respirar.

Vio un brillo a unos metros de ella, sobre una roca. Era dorado y sobresalía entre la nieve.

-Lavanda –susurró para sí misma.

Cuando estuvo a tan sólo tres metros, alguien la empujó por un costado y cayó casi a la orilla del camino. Abrió los ojos con dificultad.

-Es una lástima –escuchó la voz de Trevor, el líder de El Clan de los Lobos-, tan cerca de llegar y mueres a unos metros de tu objetivo. Intenté darte una oportunidad, _______ VanGlodius. La oportunidad de concedernos el poder a los lobos y seguir con vida, pero la desaprovechaste. Y tus amiguitos, los vampiros del norte, acabaron con casi la mitad de mi gente. -Todo a su alrededor era borroso y escuchaba la voz de Trevor como un eco-. Te diré algo, aún tengo una propuesta para ti: haz que la profecía la ganen los lobos y mientras estemos dominando el mundo, no dañaremos a tu novio ni a su familia. Mira, te ayudo a llegar a Lavanda. –La tomó del cabello y arrastró por las rocas. Raspó sus brazos y piernas, sus ropas se desgarraron-. Bien, adelante. Sólo tienes que tomarlo. -Con la mano temblorosa tomó el collar. Parecía pesar más que su brazo-. ¡¿Qué estás esperando?! ¡Hazlo ya!

Sin saber por qué, esas palabras le hicieron recordar lo sucedido una media hora atrás:

-Todas las criaturas del bosque deben estar aquí –susurró Justin-, no te apartes de mí. Y cualquier cosa –sacó el cuchillo de su bolsillo-, úsalo sin importar qué pase.

____ asintió y tomó el arma, ocultándola en su bota.

Deslizó una mano lentamente por su pantalón hasta llegar a su bota. Sintió el mango del cuchillo en su mano y lo rodeó con los dedos. En un rápido movimiento lo sacó y lo enterró en el pecho de Trevor. Tembló con brusquedad mientras miraba el cuerpo del hombre caer. Lo había matado. La sangre de una persona teñía sus manos. Un sollozo escapó de su garganta. Tenía unas horribles ganas de llorar, tanto que sus ojos ardían.

Olvidó el dolor terrible en su pecho cuando escuchó gritos acercándose, las garras chocar contra el suelo. Lobos y vampiros corrían hacia ella.  A como pudo, tomó de nuevo el collar y cayó al suelo con él en la mano. En lo que parecía años, lo elevó lentamente hasta que rodeó su cuello. El tiempo se detuvo. Todos a su alrededor se congelaron y ya no se sentía débil. Se puso de pie y dio una vuelta para analizar el paisaje. La nieve desafiaba la ley de la gravedad al no tocar el suelo.

Pensó por qué estaba ahí. Cuál era su misión. No quería que los lobos dominaran el mundo, los vampiros del sur crearían la peor catástrofe de la historia. Quería que el mundo estuviera a salvo, sin guerras con criaturas ficticias.

De pronto sus pies dejaron de tocar el suelo y miró cómo se elevaba. Una luz rodeó su cuerpo y el tiempo volvió a avanzar. Después la luz se expandió en un estallido y ____ cerró sus ojos.

Una Profecía | Justin Bieber y _______ VanGlodiusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora