Ahren Montgomery
—¿En verdad crees que esto es mío? — sacudo el papel—. No sería tan descuidada como para dejar evidencias de este tipo, es absurdo.
Hago el papel una bola y la arrojo al piso.
Darya no dice nada pero mantiene la vista impasible.
—Olvídalo, era un trampa para ver cómo reaccionabas —baja el arma—. Ahren, Vladimir nos va a perjudicar si no haces nada.
Vladimir, Vladimir, Vladimir.
—¿Qué sucede con él? —la pregunta era estúpida de solo escucharla.
Rueda los ojos, exasperada y suelta un soplido.
—¿En serio? Mira, es mejor que no intentemos ocultarnos nada. Nuestro plan es acabar con esa mediocre religión y ya. ¿Bien?
Asiento como a una niña a la que le explican una tarea.
Exactamente esa era el plan, sonaba sencillo dentro de lo que cabe. Pero aun así seguían llegando problemas externos. Es como si quisieran evitar el fin de ese culto. Como si esos líderes supieran a lo que veníamos y provocarán ellos mismos esas contrariedades para evitarlo.
Y lo habría considerado en verdad de no ser porque el que se estaba entrometiendo es Vladimir Gelman, uno de la familia rusa; familia que no tiene nada que ver con lo que sucedía en Alemania. La retención de los parientes de Joseph Bukowski, el seguimiento a Adler... todo era obra de él.
¿Y para qué? Por una obsesión que no superaba conmigo. Es que es imbécil.
—Los cortes de tus brazos, ¿quién te los hizo? —si él se había atrevido a tocar a mi hermana sin su consentimiento, en verdad, me enojaría.
—Oh, je je —ríe falsamente—. Bueno, digamos que fue Samantha.
Abro los ojos en sorpresa.
—¿Samantha? ¿Ahora juegas a ser la pasiva?
—Para nada. Cuenta sin su ayuda desde ahora.
—¿De qué hablas?
—Digo que está en cautiverio.
—No es un animal —suelto— ¿Qué paso?
—No estoy muy segura, llegó de improvisto a atacarme.
—Darya, suéltalo ya.
Me paro a su lado y la incito a caminar conmigo, es mejor que nos movamos de una vez.
—Vladimir le dijo unas cuantas verdades, como que solo la utilizábamos y eso. —concluye con un gesto de mano.
Vacío mis pulmones sabiendo que tendré que volver a ver a ese hombre. De solo pensar en tenerlo parado frente a mi me daban nauseas. Darya lo nota y empieza a contarme lo que pasó para distraerme.
—Ponte cómoda —dice. Evadiendo el hecho de que debíamos caminar un buen rato hasta llegar a la cabaña.
***
—¡Están locas! —escupe Samantha.
No me pensaba que estaríamos en esta situación, ha decir verdad la habría matado y ya, pero tenía información crucial de eso líderes y teníamos que sacársela de alguna u otra forma.
Esto implicaba un gran cambio, ya no intentaría indagar de la buena forma, si había algo qué descubrir, sería a las malas; nos daban información o sino se les obligaría a hablar. Lo cual hacía que perdiera un poco el sentido de todo, el propósito era liberar a las personas de este pueblo, no eliminarlas. Pero si ellas mismas se esmeraban en proteger a pederastas, estaban enfermas y también debían ser ejecutadas.
ESTÁS LEYENDO
Catarsis © [Sin Corregir]
Mystery / ThrillerEl pánico fundía el lugar. El pánico carcomía a la gente. «¿Quién era el asesino?» y «¿Por qué cree que tiene derecho a juzgar y arrebatar vidas?». Eran preguntas que había escuchado estos meses por parte de personas que no sabían que yo estaba ahí...