Capítulo 4

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Llegamos a casa, aun no podia quitarle los ojos de encima a tan lujoso carro, todo su interior era negro con detalles plateados y sus asientos de piel era super cómodos. Moví mi mano para abrir la puerta del auto pero Adam me lo impidio, no podia evitar ponerme nerviosa cada vez que me tocaba, no entendía como podia excitarme tanto solo con un pequeño tacto.

–Reese, si aceptas hacerme el favor que te pido, yo contrataré investigadores privados para buscar a tu hermano y pagare el mejor centro de rehabilitación del país— parecía muy angustiado
—en serio necesito tu ayuda, pareces una buena chica y... ¿Cuantos años tienes?

—25— conteste confundida —¿Por que mi edad es importante?

—dime que aceptas y te dire todo

—¿Por que yo Adam?

—el primer día que te vi me diste la impresión de ser una chica buena, dulce, sensibleby me recordaste a...— paso su mano por su cabello —necesito que me digas si aceptas o no, de otra forma no puedo abrirme a ti.

—no lo se Adam, no te conosco y no se que clase de hombre eres, se que eres multimillonario, tu familia es dueña de la mas grande marca de cosméticos en el país, pero eso no me dice nada de ti como persona.

—Eso debería darte una pista ¿Crees que mancharia el buen nombre de mi familia haciendo una estupidez? No tengo antecedentes penales, jamas he pisado la cárcel, tengo un posgrado en finanzas, tengo un diploma en Harvard de la cual me gradue con honores y los mas importante, tengo todas mis vacunas— una pequeña sonrisa broto de sus labios.

—¡oh vaya! Ya puedo estar mas tranquila, tenia la duda si tu cartilla de vacunación estaba al día— no pude evitar sonreír.

—anda Reese, ayudame en lo que te pido y yo me encargare de todo el problema de tu hermano, ademas te daré algo de dinero para que ayudes a tu madre, se ve que es una mujer muy dulce.

—dejame pensarlo ¿Si? Por favor.

—esta bien, no tengo mucho tiempo asi que solo puedo darte 3 días.

—eso es suficiente— pude notar que solto el aire que retenía.

—gracias.

Sus dulces ojos verdes me vieron directamente a mis ojos cafés, había un destello de lujuria en ellos. Poco a poco se acerco a mi, me quede helada al pensar que me besaría, pero desvío sus labios hacia mi mejilla, planto un dulce beso en ella y pude sentir como acaricio mi mejilla con su nariz. Todo mi cuerpo estaba ardiendo con el contacto de aquel pequeño beso, mi entre pierna se empezo a humedecer de la nada, era una locura lo que este hombre lograba hacer con un pequeño contacto.

—yo... ha...— no pude evitar tartamudear —debo irme...

—vendre en 3 días por tu respuesta, espero aceptes me estarías haciendo un enorme favor...

—ok, lo pensare.

Baje del auto y camine a casa, Adam arranco el coche y se fue rapidamente, aun sentia un calor recorrer mi cuerpo por el beso que me habia dado. Suspire cansada y entre a la casa, mi madre estaba sentada en la mesa del comedor, parecia que habia llorado, al verme me lanzo una mirada triste.

—Nick me dijo que lo buscaría.

—¿Nos va a ayudar?— me sente a su lado —la última vez fue grosero con nosotros.

—esta rehabilitado, de hecho acaba de salir hace unos dias.

—¿En serio? Ni siquiera sabia que estaba en rehabilitación.

—sus papás son de dinero amor, le pagaron el mejor centro, estuvo ahí en año.

Las palabras de mi madre me hicieron pensar en la propuesta de Adam, él se estaba ofreciendo a pagar el mejor centro para mi hermano y ademas darme dinero para mamá, si aceptaba tal vez se acabarían nuestros problemas y ademas mi madre podria vivir tranquila, sin preocupaciones ni temor de que Harry volviese a escapar. Estos dos últimos años han sido un martirio, mi madre y yo trabajamos como locas para pagar la rehabilitación de Harry y ya se habia escapado una vez, desde ese día mi madre no a tenido ni un solo día de tranquilidad y me gustaria por ayudarla a que viva en paz.

—mamá.

—¿Que pasa amor?— me tomo las manos.

—como te comente en la mañana, Adam quiere que trabaje para el, me ofrece buscar a Harry y meterlo al mejor centro de rehabilitación del país.

—¡Whao! ¿En serio? ¿Solo por trabajar con el?

—si...— como no sabia de que se trataba el trabajo tuve que mentirle a mi madre, porque a lo mejor era algo que no le gustaría y no me dejaría hacerlo —es dueño de la mejor marca de cosméticos, Bennett.

—¡Oh dios! ¿Es un Bennett?

—si mamá, lo mas seguro es que quiere que trabaje en su empresa. ¿Crees que deba aceptar?

—pues no lo se, digo ¿Tu quieres? Amor, es genial lo que te ofrece pero si no quieres hacerlo no lo hagas, jamas te obligaría a hacer nada que no quieres.

—quiero hacerlo por Harry, mamá si el esta en un mejor centro de rehabilitación, no podrá escapar y los doctores serán mejores.

—Reese, siempre me has ayudado con tu hermano y eso te lo agradeceré siempre, Pero no tienes que vivir tu vida por Harry ni por mi, cualquier cosa que decidas yo te apoyaré.

—te amo mamá

—tambien te amo amor— beso mi mejilla —prepare la comida.

La charla con mi madre aunque fue corta me sirvió de mucho, amo a mi madre, amo a Harry y estoy dispuesta a hacer todo con tal de darle una mejor vida. Quiero que mi hermano salga del mundo de las drogas y termine sus estudios y quiero que mi madre sonría y no viva con la preocupación de si tenemos dinero o no. Voy a aceptar la oferta de Adam y hare lo que me pida, aunque tengo miedo de que sea algo pervertido, pero a quien quiero engañar, haria cualquier cosa que me pidiera, jamas habia deseado tanto a una persona en mi vida y el es hermoso, su olor me envuelve y su sonrisa es arrebatadora, con solo un toque me vuelve loca ¡Dios! Y su cuerpo es muy tentador. Es justo el tipo con el que perdería mi virginidad, he tenido relaciones pero nada importante, salidas a comer o al cine, jamas habia deseado entregar mi cuerpo antes de Adam. Se que un hombre como el jamas se fijara en mi y si lo llega a hacer sera solo cosa de una noche.

Mi madre y yo comimos tranquilas, después volvimos a la calle a seguir buscado a mi hermano, teníamos la esperanza de encontrarlo en sus antiguos lugares de reunion, pero al parecer Harry pensaba igual que nosotros y sabia que lo buscaríamos ahí. Unas horas después mi madre y yo regresamos a casa cansadas y decepcionadas, mi madre estaba muy angustiada, el miedo de encontrar a Harry tirado en un callejon nuevamente la aturdía. Odiaba verla así, daría todo por no verla angustiada ni preocupada y ahora estaba mas segura de que tenia que aceptar el trabajo de Adam, hoy mas que nunca necesitaba tanto el dinero, solo esperaba no arrepentirme de lo que estaba apunto de hacer.

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