Después de eso...

Capitulo 32

Mas tarde saque las cobijas y almohadas del clóset, Adam desdobló el sillon y me puse a acomodar todo para acostarnos, Katy ya tenia rato dormida, extendí las cobijas y ambos nos metimos bajo las mismas. Adam se quito la camisa sin que le dijera nada, se acerco a mi y comenzó a subir mi vestido para quitarmelo.

—No Adam– susurre.

—sshh, me levantaré temprano y te despertaré para que te lo pongas.

Quito mi vestido y después siguió con el sosten, los colocó al lado de mi almohada y me pego a su cuerpo, solto un suspiro y empezó a masajear uno de mis pecho, cerre los ojos y comence a besar su pecho.

—sabes que no quiero ir a la cita con Julia ¿Verdad?— pego sus labios a mi oreja para que solo yo lo oyera.

—si amor.

—solo te quiero y te deseo a ti.

—no hablemos de eso— Adam bajo la cabeza hasta mi pecho y se metió un pezón en la boca, una de sus manos bajo a mi entrepierna —Adam.

—sshhh... te necesito, tuve una tarde horrible en el trabajo y luego mi madre.

—no quiero hacer esto aqui, respeto mucho a tu madre.

—por favor amor, no me niegues tu cuerpo— empezo a masajear mi vagina mientras seguia chupando mi pezón.

—Adam, detente— mi respiración de aceleró y comencé a gemir muy bajo.

—bebé, te necesito— lamió mi pezón.

Quería complacerlo pero Katy estaba en la misma habitación, le quite la mano y me separe de el, me senté en el sillón, tomé mi sosten y me lo puse, Adam me miraba molesto, después tomé el vestido y me lo coloqué nuevamente. Adam bufó y se levanto del sillón, salió de la habitación y me dejo sola. Lágrimas rodaron por mis mejillas, se que Adam había tenido una pésima tarde, pero este no era el lugar y el debía entenderlo. Me acosté y llore muy bajo, odiaba sentirme así y odiaba no poder estar con Adam libremente. Sin darme cuenta me quede dormida.

A la mañana siguiente desperté sola, recorde lo que había pasado la noche anterior, las ganas de llorar volvieron. Adam se había ido y me había dejado sola, me levante del sillón y recogí las cosas, estaba demasiado decaída asi que decidí irme a casa, no queria que Katy me viera asi y no podia ver a Adam después de lo que habia pasado. Salí del hospital, Katy se iría a casa y yo mas tarde iría a verla. Tomé un taxi y me fui con el corazón triste.

Mas tarde en mi habitación leía un libro, desde que llegue a casa me encerré en mi cuarto. Mi madre estaba ocupada con Harry y yo no queria ver a nadie. Como era posible que después de haber tenido unos dias fantasticos con Adam todo se haya ido a la mierda. Lleve mi mano a mi cuello y toque mi collar, una lágrima rodó por mi mejilla, extrañaba tanto a Adam, aunque lo había visto hace pocas horas. Me levante de la cama y caminé hacia la cocina, saque comida del refrigerador y la recalenté, no podia dejar de pensar en la cita de Adam y Julia, seria hoy. Me sente en la barra y me puse a comer, queria ir a ver a Katy, pero solo de pensar que vería a Adam y Julia juntos se me revolvía el estómago.

Mi madre llego a casa y caminó directo a la cocina y me vió, me sonrío y se sentó a mi lado, besó mi mejilla y tomó mi mano.

—desde que llegaste estas muy callada ¿Pasa algo?

—mamá.

—dime amor, platícame que te pasa...

Tal vez debería decirle todo a mi madre, ella siempre me a apoyado sin juzgarme y creo que necesito sacar todo esto que tengo adentro. Suspire cansada y deje la comida a un lado, voltee hacía mi madre y la mire a los ojos, comencé a contarle todo, desde que conocí a Adam en la parada de autobús, hasta lo que ocurrió esta mañana, sin darle detalles muy íntimos. Mi madre me vió con tristeza y acarició mis manos con las suyas.