Katy me miraba de arriba abajo, estaba de pie a unos paso de su cama con el vestido que Adam me había comprado, me hizo girar varias veces para verme de todos los ángulos posibles. Una lágrima rodo por su mejilla, empece a sentir un nudo en la garganta. Katherine merecía que su hija viviera, verla crecer, verla ir a bailes o a eventos, verla casarse de blanco. Katy me miraba como si fuera lo mas hermoso del mundo, eso me enternecía mucho y al mismo tiempo me hacia sentirme mal por mentirle. Me acerque a ella y me sente en la orilla de la cama, tome su mano y la bese.
—no llores mamá— acaricie su mano —me haras llorar y no quiero arruinar mi maquillaje– sonreí.—perdon amor, es que eres tan hermosa, jamás pense que te volvería a ver y menos asi de bella.
—tu eres mas hermosa que yo– me levante de la cama —tengo que bajar, Adam me esta esperando.
—claro, claro amor, anda ve, diviértete ¿Vendrás a dormir hoy?
—no lo se— no le avise a mi madre... mmm a Ana...
—amor ya te dije que puedes llamarla mamá, eso es ella para ti ¿Algún dia me dejaras conocerla?
Apenas iba a contestarle cuando Nora toco la puerta, entro a la habitación y me dijo que Adam me esperaba, muy dentro de mi agradecí la interrupción. Me despedí de Katy y baje hacía la sala, estaba algo nerviosa, llegar al evento del brazo de Adam era algo emocionante. Ya en la sala, vi a Adam hablando por telefono, levanto la cabeza cuando me escucho, al verme abrió la boca en sorpresa, colgó la llamada y metió el celular a la bolsa de su pantalón. Escaneé su cuerpo de arriba abajo, se veia gloriosamente guapo y sexy, su traje negro le quedaba de maravilla y su pelo estaba sedoso y suave, él me miraba de la misma forma que yo, camino hacia mi y coloco sus manos en mi cintura.
—estas hermosa— beso mi mejilla —tendre que alejar a todos los hombres que asistan al evento.
—si claro— sonreí —dices eso para halagarme.
—no, bueno si, pero es verdad.
—esta bien, te creo ¿Nos vamos?
Adam sonrio y me guio hasta la puerta, me sentia como en un sueño. Adam era lindo y cariñoso conmigo e iríamos juntos al evento, era como mi mejor fantasia, como un sueño hecho realidad. Salimos de la casa y subimos al coche de Adam, el seguía sonriendo y yo me sentia feliz. De camino al evento solo hablamos de musica y películas, era muy lindo ver a Adam relajado y me gustaba mucho hablar con él, conocerlo cada día mas. Cuarenta minutos después llegamos al lugar donde sería el evento, ya habia mucho autos y personas haciendo fila para entrar, la ventaja de trabajar para el despacho era que no necesitaba hacer fila. Adam y yo bajamos del auto y caminamos a la entrada, el guarda de seguridad ni siquiera me pidio mi identificación, solo vio a Adam y nos dejo pasar rapidamente.
—pense que tenía influencias al trabajar en el despacho pero olvide que venia con unos de los mejores clientes de Jones y Asociados— reí.
—¿Osea que me estas usando?— bromeó.
—si un poco.
Adam me tomo del brazo y beso mi cabeza, caminamos hacia el fondo del salón, me puse a buscar a Rebeca pero no la veia por ningun lado. Adam se detenía a saludar a personas que ya estaban acomodadas en algunas mesas, lo solte y le dije que iría a buscar a mi compañera, el asistió y me dijo que no me tardara. Camine buscando a mi amiga por todos lados, de pronto la vi salír de una puerta apartada del tumulto de gente, me acerque a ella y la salude.
—por fin llegas— me dijo preocupada, vestía un hermoso vestido rojo que dejaba ver su espalda —todo es un caos, la comida no ha llegado y el maestro de ceremonia canceló porque se resfrío.
—tranquila Rebeca, ahora mismo llamo a la empresa que nos iba a traer la comida y...— me quede pensando —tu puedes ser la maestra de ceremonias, tienes facilidad de palabra.
—¡¿Que?! ¡¿Yo?!
—si... solo relajate, todo saldrá bien.
Rebeca no parecia muy convencida, saque mi celular de mi pequeño bolso y busque el correo de la empresa de comida y busque el telefono, marque inmediatamente. Al parecer uno de sus vehículos repartidores había tenido una falla mecánica, pero ya habian enviado a otro para que la comida llegara a tiempo. Cuando le dije a Rebeca parecia mas relajada, continuamos checando que todo estuviera en orden, a las 9 en punto Rebeca se subió al escenario y empezo a darle la bienvenida a toda la gente que ahí se encontraba. Busque a Adam y lo localice fácilmente, camine hacia él y lo acomode en su mesa, él se sento y después me tomo de la mano.
—¿Dónde te sentaras?— me acerco a él y me susurro al oido.
—tengo que ayudar a Rebeca y despues me sentaré con ella, recuerda que vengo como empleada.
—no, cuando termines vienes aquí, me separaron un lugar para mi acompañante y esa eres tu.
—Adam...
—no acepto un no por respuesta, ve has lo que tengas que hacer y después regresas aqui, conmigo ¿Entendiste?
—esta bien— sonreí.
Me aleje de la mesa y volvi al lado de Rebeca quien ya habia bajado del pequeño escenario. Nos dirigimos a la parte de atras del salón para revisar que las bebidas y aperitivos estuvieran listo, cuando coordinábamos a los meseros la comida llego y Rebeca suspiro aliviada. Ya estaba todo listo, el evento podia llevarse acabo sin ningún inconveniente, cuando vi que Rebeca ya no me necesitaba me fui a la mesa de Adam, cuando llegue a su lado me sonrió, se puso de pie y alejo la silla para que yo me sentara, cuando lo hice solte un pequeño suspiro de alivio, caminar de un lado a otro en tacones no era muy buena idea. Adam se volvio a sentar a mi lado.
—¿Terminaste?— me dijo al oido.
—si eso creo, la banda ya esta empezando a tocar y la comida ya llego, todo esta listo.
—me alegro, vamos a bailar.
—¿Que? ¡No! Deja que haya gente en la pista, aún no se levanta nadie— y como arte de magia la gente se empezo a levantar cuando la banda empezo a tocar.
—¿Que decías?— se burlo.
—tienes suerte.
Adam se puso de pie nuevamente y me ofrecio su mano, la tome y me guío hasta la pista. La musica era lenta, Adam coloco ambas manos en mi cintura y yo puse las mías en su pecho duro, podia sentir su músculos definidos sobre la tela del traje. Empecé a sentir que flotaba, Adam olía espectacular y sus brazos en mi cintura se sentían como un delicioso fuego que me quemaba dulcemente. Dos canciones mas y regresamos a la mesa, cuando me sente aun sentia las manos de Adam sobre mi, era una hermosa sensación. Adam se consentraba en la gente en la mesa, al parecer era conocidos de negocios, me disculpe con todos y me levante de la mesa, queria revisar que todo estuviera bien, busque a Rebeca pero no lo encontraba en ningun lado, camine hacia el área de servicio pero no la vi por ningun lugar.
De pronto una mano me sujeto, voltee asustada para ver quien me sostenía y vi al licenciado Jones sujetándome, solte un suspiro de alivió y le sonreí.
—me asusto licenciado.
—lo siento— aun me tenía sujeta —solo queria decirte que te ves muy bien esta noche— su mirada recorrio mi cuerpo —no pense que tuvieras tan buen cuerpo.
—¿Perdón?— sus palabras me tomaron por sorpresa, jamás me habia hablado así.
—no se si te lo han dicho hoy pero, te sienta muy bien ese vestido, te marca todas tus curvas.
—sera mejor que me vaya— intente zafarme pero me tenia sujetada muy fuerte.
—no te vayas— me pego a su cuerpo —sabes, me gustaría probar esos labios.
—deje en paz— empece a forcejear con él —respeteme por favor.
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Después de eso...
RomanceReese es una chica complicada, no tiene tiempo para el amor, su hermano y su madre consumen toda su vida. La llegada de un hombre atractivo alterara su estilo de vida, ella no quiere amar y el no puede amar. ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~ ©Queda expresam...