Capitulo 21

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Caída la noche Adam me llevó a su departamento, aún estaba molesta con el por lo del dinero y las tarjetas, asi que todo el camino no le dirigí la palabra. Al llegar bajamos del auto y subimos al elevador, deseaba tanto pasar la noche con Adam, pero justo en este momento no estaba segura si pasaria algo entre nosotros. Subimos hasta el décimo piso, salimos del elevador y Adam saco las llaves de su bolsillo, abrió la puerta y me dejo pasar. El departamento era muy lujoso, los tonos plateados y azules dominaban el lugar, mire el enorme sillon en forma de L y me sente en el, Adam camino a la cocina y sirvió dos copas de vino, regreso a la sala y me dio una, la tome y le di un pequeño sorbo.

—¿Estas molesta?

—mucho— deje la copa en la mesa de centro —sabias que no queria nada de eso he hiciste los tramites a mis espaldas.

—era un deseo de mi madre, no podia negárselo.

—no importa, no usare nada.

—Reese, deja de ser tan orgullosa, mi madre y yo queremos ayudarte, ella porque cree que eres su hija y yo por...— se acerco a mi —me importas, mas de lo que crees.

—tambien me importas, pero...

—hey— hablo mas bajo —en serio, toma lo que te damos– levanto su mano y acaricio mi mejilla —dejame cuidarte en todos los aspecto, por favor.

Adam comenzo a besarme lentamente, cerre los ojos y me deje llevar por su beso, mi hambre por Adam crecía cada segundo mas. Me recosto en el sillon sin romper el beso, sus manos ya estaban en mis cadera y las mías en su espalda, Adam bajo el beso a mi cuello y despues a mi hombros, mi manos cobraron vida y empezaron a desabrochar su camiseta. Adam se separó de mi y se levanto del sillon, dos segundos alejada de su cuerpo y ya extrañaba su calor, Adam sonrió al ver mi expresión y me levantó entre sus brazos, envolví mis brazos al rededor de su cuello y comence a besarlo. Sin romper el beso Adam camino hasta la recámara, al llegar a ella me dejo caer delicadamente en su cama. Se coloco encima de mi y me miro a los ojos.

—eres tan hermosa.

Sus manos ágiles me quitaron la blusa, beso mi pecho dulcemente sobre la tela del sostén. Yo solo podia arquear la espalda ante su dulce contacto. Adam seguía consentrado en mis pechos, yo de nueva cuenta, seguí desabotonado su camisa hasta que esta quedo totalmente abierta, coloque mis manos sobre su pecho desnudo y lo acaricie de arriba a bajo, el me quito el sostén y empezo a besar tiernamente mis pezones desnudos. Él me trataba de la forma mas delicada posible, sabia que era mi primera vez, asi que tal vez queria que fuera un dulce experiencia.

Adam seguía besándome los pecho y comenzo a bajar hasta mi vientre, sus manos comenzaron a desabrochar mis pantalones y me los quitó junto a mi ropa interior de un tirón. Me encontraba totalmente desnuda frente a él, mi respiracion de acelero y mis mejillas se sonrojaron, ningun hombre me había visto desnuda jamas, Adam se separo de mi y comenzo a observarme de arriba abajo.

—¡Dios! Eres tan perfecta— sus manos acariciaron mi vientre —y tu piel es tan suave.

Se puso de pie y se quito el resto de su ropa, yo me quede asombrada al ver su enorme erección, el sonrío tiernamente al ver mi cara. Se volvio a colocar encima de mi y volvio a besarme, esta vez mas intensamente, con desesperación, lujuria. Le seguí el beso y mordí su labio inferior, Adam solto un pequeño gemido, después una de sus manos bajo a mi vagina y comenzo a frotarla, yo ya estaba demasiado húmeda, con mucho cuidado introdujo su dedo medio y comenzó a moverlo lentamente mientras nos deborábamos a besos. Ambos estábamos perdidos en la pasión, de pronto se detuvo, extendio su mano a uno de los cajones que estan a lado de la cama y sacó un condón, me miro fijamente y me susurro.

—¿Estas segura de esto?

—mas de lo que imagine.

Me sonrio y se coloco el condón en su enorme pene, me abrió las piernas y se coloco en medio de ellas, empezo a besarme los muslos muy despacio hasta llegar a mi parte intima, me sorprendió un poco pero al momento de sentir su lengua sobre mi olvide todo, unos languetasos mas y yo ya estaba desesperada, mis gemidos cada vez se hacian mas intensos, de pronto levanto la cabeza y me miro con lujuria.

—sabes muy bien, tan dulce y me encanta escucharte gemir.

Adam tomo su miembro con su mano y lo coloco en mi entrada, me miro a los ojos y yo solo afirme con la cabeza, lentamente lo introdujo, despacio sin prisa, lance otro gemido por el dolor que sentia, Adam no se movia se quedo ahí esperando que mi cuerpo se ajustará a el.

—voy a moverme Reese.

Y con eso empezo a balancearse muy lentamente, yo gemía en cada embestida, Adam volvía a besarme, aferre mis manos a su espalda, el dolor que habia sentido en un principio se habia convertido en puro placer y lujuria.

—oh nena, estas tan apretada— me decia entre besos —¿Quieres que me mueva mas rapido?

—si... por favor...

Aceleró el ritmo, ambos estábamos cubierto de sudor todo el cuerpo. Adam gemía, yo tome su cabello y lo acerque a mi para besarlo, amaba sus labios.

—Reese, córrete para mi nena— puso su mano en mi clítoris y comenzó masajearlo.

—mi amor...

—me vueles loco, no creo tener suficiente de ti.

Él seguia con su dulce martirio, de pronto algo en mi comenzó a crecer y una exploción invadió mi cuerpo, un enorme gemido salió de mi boca, Adam acelero mas el ritmo, tambien comenzo a gemir hasta que se detuvo. Salió muy despacio de mi y beso mi frente, se dejo caer al lado de la cama y coloco mi cabeza en su pecho, ambos tratábamos de controlar nuestras respiraciones.

—tenemos que volver a hacerlo— le dije en voz baja.

—ni que lo dudes— sonrio y beso mi mejilla.

Adam se movio un poco, se quito el condón y lo tiro en la papelera, después nos cubrio con una manta, al intentar acomodarme senti húmedo debajo de mi, voltee a ver que era y pude ver una mancha roja sobre la sábana.

—¡Dios! Ensucie tus sabanas finas— le dije a Adam apenada.

—no importa, ven— me extendio los brazos —tengo muchas sabanas, ahora solo quiero tenerte entre mis brazos.

Me acerque a el y me acosté a su lado, ambos cerramos los ojos y rapidamente nos quedamos dormidos.

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Ando un poco agripada, tratare de seguir subiendo capítulos pero si no publico ya saben por que es 😔😔 gracias  a las que leen a diario y dejan sus comentarios ❤️🥰
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Claudia Franco

Después de eso...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora