_Tú mejor que nadie sabe como sucedieron los hechos y para fortuna de él y desgracia tuya, las cosas ya se aclararon y se sabe quien ordenó todo esto, me extraña que tus abogados no te lo hayan informado aún.
Frederick estaba pálido, ¿como le iban a informar, si ya no tenían abogados, solo quedaban unos de mala muerte que les habían asignado porque ya no podían pagar a los anteriores.
Justin miró como por primera vez su padre bajaba la mirada derrotado, sin embargo Margaret lo miraba beligerante.
_ Tu. - lo acusó. _fuiste quien lo ayudó a divorciarse de mí.
_ No podías retener a un hombre contra su voluntad. - la miró incrédulo.
_ Él me amaba. - se defendió.
_ Si, te amó, pero con tus desplantes y tus aires de superioridad hiciste que ese amor se acabara, el te amaba de verdad y en lugar de corresponderle y dejar que te lo demostrará lo destruiste, ahora el está rehaciendo su vida y le va a ir bien lejos de ti.
_ Y a ti te da gusto ¿verdad? - lo miró con odio.
_ No, no me da gusto, y me duele ver la forma en la que están terminando, pero es lo que ustedes sembraron. Y la verdad, no se y nunca entendí, el porqué de tu odio hacia mí. - la miró a los ojos. _no recuerdo haberte hecho nada.
Ella bajó la mirada derrotada, era verdad, el nunca le había hecho nada, pero a su hermano George si, el siempre se quejaba con ella y ambos se aliaban para hacerle pagar, aunque mirando hacia atrás no sabía que, sin embargo, había aprendido a odiarlo, al igual que su hermano.
_ De cualquier forma ya no importa. - dijo Justin, como les dije, ahora mi familia es otra, mi linda esposa. - miró a Gloria, con ternura. _mi bebé. - tocó el vientre de ella. _ y mis hermanos. - señaló a Roberth y a Gustavo.
_ ¿Y esos quienes son? - gritó George furioso, ofendido por llamarlos a ellos hermanos.
_ Ellos - recalcó Justin. _ son mis amigos, que han sido más hermanos que ustedes juntos y ellos son los que los tienen a ustedes aquí y por quienes van a pagar todo lo que hicieron. Y se los presento. Roberth es el encargado y socio de la firma de investigaciones más importante del mundo y Gustavo es el dueño, no sólo de esa firma sino de grandes compañías por todo el mundo, es una de las personas con las que te debiste haber entrevistado padre. - se dirigió hacia él. _si tu solicitud para unirte a la cadena de hospitales hubiese sido aceptada, y la otra persona y la que tenía que tomar la decisión final era yo.
Todos lo miraron atónitos, sabían lo que Frederick había buscado y luchado por obtener esa unión, no podía creer que eso fuera cierto.
_ Mientes. - atinó a decir fuera de sí.
_ No padre, no miento, después de que me dejaste a mi suerte, a que muriera en manos de mis secuestradores, hubo quien me tendió la mano, no solo salvaron mi vida, me ayudaron a salir adelante, y ahora aquí estoy delante de ti, diciéndote que tus palabras de menosprecio no dieron resultado porque aquel bueno para nada, aquel que jamás iba a triunfar en la vida, ahora es dueño, no solo de lo que tu tanto anhelaste, si no también de esa cadena de hospitales, Gustavo es mi socio, y yo no solo trabajo ahí, soy el dueño.
_ Todos empezaron a hablar al mismo tiempo, no lo podían creer, Justin nunca había sido lo que parecía, de haberlo acogido y aceptado como era, ahora tendrían su herencia intacta y quizás mucho más, él ahora era más de lo que ellos habían sido y soñado siquiera, su fama y reputación era a nivel nacional, pero la de él, era ahora a nivel mundial.
_ ¡Maldito...! - grito Frederick. _ siempre jugaste con nosotros, tu sabias lo que yo anhelaba esa unión.
_ Por eso no te di la cara, - dijo con calma. _porque no iba a hacer tratos contigo, mis hospitales son más que nada humanitarios y tu no tienes nada de humanitario.
_ Te vas a, arrepentir. - intervino George furioso.
_No lo creo. - dijo Justin levantándose de su lugar, seguido por Gloria y sus amigos. _de lo único que me arrepiento es de haberlos tenido a ustedes como familia, y hablando de familia por ultimo para no quitarles más su tiempo quiero que sepan que William y tu padre, Sarah, ahora son los encargados de manejar la clínica y lo están haciendo excelentemente bien.
_ ¡Te arrepentirás! - gritó de nuevo George, ese traidor también estaba contra ti.
_ Quizás, porque al igual que Margaret creyeron lo que tu les decías de mi, pero él recapacitó y se arrepintió, en cambio ustedes siguen destilando veneno. - se dirigió hacia la salida. _por cierto padre. - se volvió hacia ellos de nuevo. _ también me encontré a Annie y su esposo, lamento decirte que no lograste tu propósito de destruirlos, también trabajan en una de mis clínicas y están criando a su bebe, al que por supuesto tampoco conocerás. - dijo dando la vuelta y saliendo del brazo de Gloria, junto con los demás, y dejando a su familia entre gritos y maldiciones que el ya no escuchó.
Afuera Gloria abrazaba a Justin, mientras Gustavo y Roberth se alejaban dándoles su espacio.
_ Ya terminó. - dijo ella acariciando su pelo.
_ Aún no. - dijo con pesar. _falta mañana, pero después de eso trataré de olvidarme de ellos, no merecen mi ayuda.
Esa visita la había hecho con el fin de evaluar si había algún cambio en ellos, si podía ayudarlos en algo, sabia que penalmente era imposible, pero quizás aligerar su estancia en la prisión de alguna forma, porque literalmente se habían quedado sin nada, pero después de salir de ahí, había comprobado lo que Gustavo y Roberth le habían estado diciendo, ellos no merecían ningún tipo de ayuda, cualquiera de los cuatro si pudiera le clavarían un puñal por la espalda, eso era seguro.
_ ¿Como puedo ayudarte? - lo miró consternada viendo la tristeza, en su rostro.
_ Estando conmigo. - sonrió tomando su rostro entre sus manos. _estando tu y mi bebé. - tocó su vientre. _nada me falta, esto es pasajero. - la miró con ternura. _este dolor pasará, te lo prometo, tu y mis amigos no me van a dejar estar triste ¿verdad? - la besó.
Ella rodeó su cuello, claro que no lo dejaría solo, como él no la dejó a ella, ahora era su esposa, no habían podido esperar y se habían casado en un juzgado, la boda religiosa la dejarían para después de la sentencia.
Ella era feliz y el también ambos se necesitaban para seguir adelante, ella era su necesidad y el su complemento.
FIN
ESTÁS LEYENDO
MI NECESIDAD DE TI No.7️⃣ /SERIE HOMBRES DE LA SIERRA
RomanceJustin estaba sorprendido, ¿ella era la misma chica que lo había dejado impresionado en aquella ocación?, claro se dio cuenta de que desde entonces se le daba bien tomar lo que no era, suyo. La observo una vez más haciendo su trabajo y una sonrisa s...