Capítulo 43: Reemplazo

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1 hora antes

-Jin ve con ellos, te llevarán al salón principal espera por mi ahí.

Oh Sung había dado una orden específica a todos los guardias del prostíbulo. Una orden que puso muy nerviosos a todos y a temer por su seguridad.

-Si el rey perece lo hará al lado de su reina. Creo que ya es hora de reunirnos mi amor – dijo ya estando solo en su despacho, mientras se miraba el anillo en el dedo anular de su mano.

Después de que todos sus trabajadores cumplieran con su labor, mandó llamar a todos los prostitutos hacia el salón principal. Los clientes que se encontraban aun en el prostíbulo fueron despedidos en el acto, para que solo los que residían permanentemente ahí se quedaran. Todos, no faltaba nadie, cada persona dentro de la gran mansión en estos momentos estaba ahí.

Oh Sung extendió la mano hacia Jin, llamándolo solo con la mirada. Y este se acercó algo tembloroso. Estaba nervioso, no había escuchado más de Namjoon, lo único que sabia era que estaba dentro. Por la ansiedad comenzó a pelarse los pliegues laterales de sus dedos, tanto así que algunos ya estaban con heridas.

Cuando estuvo lo suficientemente cerca, fue tomado por la cintura y pegado al cuerpo de Oh Sung.

-Estamos aquí reunidos porque tengo algo importante que decirles a todos. Magic Shop el día de hoy cerrará sus puertas- Todos veían expectantes, y después de haber escuchado algunos empezaban a temer, los secuestrados más que nadie, si sus cuerpos ya no les eran útiles lo mas seguro era que los eliminen. Mientras que a otros el entendimiento de la situación los golpeaba.

Jimin y Tae estaban entre la multitud también, Suho parado a su lado, quien trataba de analizar el panorama. Cuando volteó a ver el rostro de su hermano Sehun, entendieron que el momento había llegado para ellos.

-Claro que....no será permanente esta decisión. Esta mansión será eterna, sin embargo; considero que todos merecemos un merecido descanso. Por favor todos regresen a sus puestos y a sus habitaciones. Cuando las cosas cambien se les hará saber.

Con duda los muchachos que se rentaban caminaban de regreso. Y sus respectivos guardias iban detrás de ellos para asegurarse de terminar con la orden principal del Señor Kim.

-Vamos a mi despacho Jin, hay que estar en un lugar cómodo para los dos – Soltó su agarre en la cintura del pelinegro, para tomarlo de la mano.

- ¿Qué fue lo que te pasó? – abrió los ojos exaltándose, al ver los bordes rojos de los dedos de Jin.

-Yo...yo....

-No importa está bien, vamos para que pueda curarte – dijo sereno de nuevo, y caminó mientras entrelazaban sus dedos con los de Jin.

Ya en el despacho lo guió hacia uno de los asientos, trajo el kit de emergencias que siempre tenía en su escritorio y se acercó para tratar la herida.

Con cuidado desinfectó y luego colocó pequeños vendajes envolviendo minuciosamente cada dedo lastimado. Tan dedicado para no hacerle daño a su bella flor.

- ¿Por qué?

- ¿Por qué que mi señor?

- ¿Qué es lo que le ven? ¿Por qué siempre lo tienen que escoger a él? – Oh Sung vio con amargura.

- ¿De qué está hablando? ....No logro entenderlo.

- ¿De verdad? -sonreía con indignación - ¿No sabes a quien me refiero? ¿No se te viene a la mente el nombre de Namjoon?

Como la primera vez que lo increpó sobre ese asunto, Jin se quedó quieto en su lugar.

-Tú....mi hermoso Jin – el viejo se puso de pie y caminaba con los puños apretados, con los ojos clavados en el suelo, partiéndose la cabeza por querer saber – Te di todo, te di un buen trato, te vestías con las mejores ropas, tenías las mejores joyas que todos aquí ,no cualquiera podía meterse contigo, pero tu te atreviste a posar tus ojos en ese bastado de Namjoon.

Magic Shop - NamjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora