Capítulo 61: Juntos

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Los gemidos de Jin eran ahogados y chocaban en la gran mano de Namjoon con cada embestida que le daba. De espaldas, arrodillado sobre el desastre de las sabanas, con sus brazos temblándole mientras trataba de aferrarse de la cabecera de la cama y con el trasero empinado recibiendo sin descanso el pene del moreno, así se encontraba Jin.

Con la mano libre Namjoon tenía sujetada la cadera del contrario, empujaba con fuerza, haciendo que la carne de Jin rebote cada vez que se hundía. El choque de la cama con la pared competía con los chasquidos del encuentro de los dos amantes.

-Shh no queremos que nos interrumpan- dijo el moreno cuando dio en un punto dentro de Jin que lo hizo arquearse e inclinar su cabeza hacia arriba, virando los ojos, intentando poner distancia de por medio, tratando de alejarse, porque las contracciones que tenía en el abdomen y en su miembro cada vez que Namjoon llegaba tan profundo hacían que su cabeza explotara y volvían su cuerpo una masa sensible que ansiaba más, aunque seguir así terminara con él.

Jin se puso derecho, pegando su espalda al pecho de Namjoon, ambos erguidos sobre la cama. Suspiros, temblores, contracciones que los dos amantes sentían en ese momento. El moreno llevó su mano para rodear el miembro del mayor, empezando masturbarlo sin compasión por el cuerpo de Jin, quien tuvo que taparse la boca con ambas manos, porque las del moreno estaban ocupadas en otro lugar.

- Eres tan delgado...- dijo Namjoon colocando su palma sobre el vientre de Jin, notando como se hacía un bulto en este- Puedo sentir ah...hasta donde llego dentro tuyo Jinnie...

El pelinegro no resistió más, la sobreestimulación lo llevaron a su límite, lo llevaron al orgasmo. Terminando en la mano de Namjoon y dejando caer su cuerpo sobre el colchón, donde jadeaba buscando aire con los ojos cerrados y aun recibiendo las embestidas del más grande.

-Nam....Nam~ solo un momento por ah!~ por favor ngh!~ - se sujetaba de las sabanas, los nudillos blancos por la presión, mordiéndose el labio para no hacer ruido y con espasmos aun estremeciéndolo.

Fue cuestión de poco tiempo para que el moreno se corriera dentro de Jin, volviendo sus penetraciones lentas y suaves, dejando caer su pecho sobre la espalda del ultimo. Encajando el rostro justo en la curvatura de su cuello mientras dejaba pequeños besos suaves en este.

-Te dije que no debíamos venir aquí.

-El closet que ngh~ tienes es grande....tanto co-como está habitación...pero ah!...te lastimaste las rodillas.

-Solo necesitaba que la colcha protegiera tu espalda del piso – el moreno abrazó la fina cintura de Jin y poco a poco dejo de moverse y con cuidado salió del pelinegro- Yo no sentí dolor en ningún momento.

Se movió hasta la orilla de la cama para ponerse de pie, tomó con cuidado el cuerpo contrario y lo aló hasta dejarlo al borde, dándole la vuelta para ver el rostro de Jin, encontrándose no solo con sus labios hinchados, su piel adornada por una capa de sudor que la hacía brillar, también con sus mejillas rojas y marcadas por lágrimas. Namjoon sabia la causa de ellos, pero aun así se recrimino mentalmente al ver el cuerpo completo del mayor. Se había excedido y estaba seguro de que en un par de horas todas las marcas rojizas y de dientes que se encargó de repartir armoniosamente y con fuerza en Jin se notarían más, pensó que lo había tomado con mucha brusquedad.

-No estoy llorando por las razones que crees Nam- dijo Jin que cuando abrió los ojos, sonriendo débilmente se encontró con el rostro del moreno, quien no estaba viéndolo de regreso, su mirada subía y bajaba por todo su cuerpo y entre ese recorrido notó como fruncia el ceño por unos instantes. Se puso de pie, y tambaleo un poco porque sus piernas no tenían fuerza, es por eso que el moreno fue rápido en sujetarlo.

Magic Shop - NamjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora