TRES MESES ~ WOS 💜 [TERMINADA]

Capítulo 49

Estaba en la mejor parte de mi sueño.

Estaba a nada de cortar la cinta que iba abrir paso a mi escuela de baile.

Por que si.

Mi sueño, y como meta de vida, era poder tener una escuela de baile. Donde no importara el género, la edad, si sos alto o bajo, si tenes exceso de peso o falta de ello. No había ningún tipo de requisito, con tan solo que hubiese ganas de bailar y llevarte bien con las personas que ibas a compartir las clases era más que suficiente.

Pero todo el sueño se vio afectado cuando sentí que alguien estaba tratando de despertarme.

¿Por qué? ¿Por queeeeeeee?

—Por favor, cinco minutos más.—Pedí arrugando mi cara.

Tenia la necesidad de retomar mi sueño, aunque fuese imposible ya.

—Nati, despertate dale.

¿A quién carajos le gusta molestarme?

—Mi escuela.—Seguí insistiendo en que me dejaran descansar.

—¡NATALIA LLAMO DANI!—Gritaron.

Pero no me percate de lo que había dicho, al contrario. La persona que había gritado mi nombre, a parte de hacer algo tan cruel como dañar mis odios, me tiró agua encima.

AGUA FRIA.

—Pero la concha de tu madre.—Me senté de golpe en la cama cuando todo el líquido me había mojado.—¿Pero cual es tu problema?—Mire a quien me había mojado.

Era Cami.

Nada más y nada menos.

—Pajera, llamo Dani.

—¿Y a mi que me calienta si te llamo Dani? Déjame dormir.—Mi mal humor ya había aparecido.

—A bueno, entonces seguramente tampoco te importa que Wawi este en pleno trabajo de parto.—Soltó sin importancia.

Pero estaba tan enojada porque me haya despertado con un poco de agua que ni siquiera tome dimensión de sus palabras.

—¡NO!—Grite.

¿Sos boluda o participas en los sorteos de yao cabrera?

—Para..—Recalcule.—¿Que dijiste?—Volví a preguntar cuando capte sus palabras.

Siempre tan estúpida.

—Que Wawa esta por parir.—Me grito.—Esta a punto de escupir la criatura.

Mi Wawa.

Mi Wawi.

Mi Wawita

¿Ya? ¿De ya?

—¿Y hasta ahora me decís?—Salte de la cama hasta la valija para buscar ropa, para poder ir al hospital.

—Voy a fingir que no dijiste eso.—Hablo entre dientes.

Ahí caí en cuenta que desde hace un rato largo ya seguramente está tratando de despertarme que por eso tuvo que recurrir al agua. Pero no puede culparme, realmente estaba cansada.

—Hace una hora estoy intentando despertarte, pero parecías un oso en plena hibernación.

Hija de puta.

—¿Que hora es?—Pregunte mientras me estaba vistiendo.

—Las nueve amiga.

—No dormí nada y estoy cansada, era obvio que no me iba a despertar.—Dije mientras intentaba ponerme el jean.