TRES MESES ~ WOS 💜 [TERMINADA]

Capítulo 33

20 de mayo del 2020, San Luis, Argentina.

Al fin había llegado el fin de semana.

Esta semana había sido tan intensa para mí que ya no sabía dónde carajos meterme o como hacer para safar de ella. Pero después de todo no me quejo, al final me hizo terminar bien con Valen y eso era más importante por ahora.

Con Valen estábamos bien, nos habíamos visto durante todos estos días. El viernes tuvimos ensayo pero no pude estar con ninguno de los pibes, el próximo miércoles comenzaba la competencia y necesitaba pulir demasiado mi coreografía.

No es que me no tenía nada, al contrario estaba todo listo. Pero bueno, perfeccionista es mi segundo nombre por lo que debo hacerlo valer.

Ahora me encontraba junto con Camí y Facu, rumbo a una cabaña.

Si, efectivamente.

Los pibes nuevamente habían decidido alquilar una, más bien era una casa con pileta climatizada, ya que el frío comenzaba a hacerse más presente en estos tiempos.

Primero no estaba muy convencida en venir, por el mismo motivo que tenía que ensayar.

Pero Valen, Camí y Wawi insistieron mucho en qué debía venir, no me pude negar a esas tres caras y esos tres pucheros.

También pensé en que si me exigía demasiado al fin y al cabo terminaría perjudicandome a mi misma, entonces claramente no estaría siendo la idea.

Lunes y martes iba a ensayar firmemente para estar lista para la competencias del miércoles, no podía dejar de sentir nervios por lo mismo.

Me obligaba a disfrutar este fin de semana, hoy era viernes y estaríamos hasta el domingo acá. La casa era grande y según los pibes había demasiadas habitaciones para todos.

Estaba dispuesta a olvidarme de todos mis quilombos para poder disfrutar de estos días.

No voy a negar que había algo que me tenía preocupada de tener que estar compartiendo con los chicos todo un fin de semana.

Más bien con Valen, no estaba segura si tendríamos que compartir habitación, y de ser así.. ¿me tocaría compartir con Valen?

Naaa, seguro me toca con Cami.

Si estúpida, solo vos te crees eso.

No me molestaba tener que dormir con Valen en una misma habitación, pero me daba pánico pensar en que en algún momento íbamos a llegar más allá de dormir.

No se qué pasaba conmigo, es decir, obvio que quería dar el siguiente paso y estaba segura de Valen también, varias veces me había quedado claro aquello. Desde la primera vez cuando nos besamos en el paraíso hasta cuando me sentaba sobre su piernas, su amigo no era inmune a mi presencia o pequeño roce.

La verdad que me daba un poco de gracia y también me compadecía de el. En ningún momento me había insinuado nada, había idas y vueltas donde Valen sacaba su lado pervertido haciendo que mis estúpidas hormonas se alborotaran como locas, pero jamás me había presionando para que hiciéramos algo y no podía dejar de amar eso de él. Sabía que estaba ansioso por que nosotros dos estuviésemos juntos, pero que no se malinterprete porque yo también moría de las ganas. Pero el miedo a no ser lo que el esperaba me carcomía los pensamientos constantemente.