TRES MESES ~ WOS 💜 [TERMINADA]

Capítulo 50

Cuando llegamos nos tocó esperar un rato afuera de la sala, porque Wawi estaba cansada y lo único que nos dijeron los médicos cuando salieron de la habitación de nuestra amiga era que necesitaba recuperarse de aquello.

Era lógico, tener un bebé no creo que sea algo de lo que salgas reluciente.

—Loco, hace dos horas estamos esperando.—Se quejo Depa.

Hasta yo lo entendía, también me sentía cansada de esperar y ansiosa por conocer el bebé.

—Es raro que ni siquiera le hayan traído al bebé para que le dé teta, Guada.—Comentó Maia.

—¿Le habra pasado algo al bebé?—Pregunté, no podía evitar preocuparme.

—No creo, de ser así estoy seguro que algo nos hubiesen dicho.—Me dijo Valen mientras me abrazaba por la espalda.

A Ángela no la convenció demasiado, ella también estaba muy preocupada porque no nos decían nada.

Otra hora más paso y nada que nos decian algo sobre Wawa. Depa se paseaba de un lado al otro, un poco más y le piso terminaba con manso hueco. El Negro se mordía las uñas de los nervios, todos estabamos igual de nerviosos y preocupados.

Lo peor es que nadie se acercaba para comentarnos algo, no se si había que ir a besarles el culo para que soltaran algo o que onda.

Y como si mis pensamientos le hubiesen llegado a alguien, repentinamente apareció una persona. Un peli negro con un rostro que parecía encontrarse en la mejor de las perfecciones, de hecho parecía que lo habían sacado de alguna novela de wattpad.

¿Que?

Yo también leo novelas, que se creen.

El mismo, era doctor, de unos veintiocho años al parecer. Joven y lindo.

—Buenas tardes, disculpen que los hayamos hecho esperar tanto tiempo.—Nos hablo el doctor.

A la puta, hasta la voz que tenía era de infarto.

—Mi nombre es Sergio, fui el encargado del parto de la señorita Guadalupe.—Que suerte tienen algunas.—Si bien el parto no demoró demasiado, hubieron ciertas complicaciones.—Todos mis sentidos se alertaron, y no hablo solo de los míos todos los chicos se preocuparon.

Comenzaron a atacar al doctor con preguntas, no había momento que lo dejaran hablar.

—Chicos callensen por favor.—Les pidio Ángela entre medio de tanto ruido.—Dejen hablar al doctor.

El mismo agradeció con la mirada a la rubia para seguir hablando.

—Gracias. La cantidad de sobrepeso fue algo perjudicial para Guadalupe a la hora del parto. Estuvimos a nada de no poder salvarle la vida tanto a ella como al bebé, prácticamente fue algo complejo, pero muy complejo estabilizar su ritmo cardíaco y que le llegara respiración a los pulmones de ambos.

Por Dios, pobre. Nadie podía creer lo que estaba pasando.

—¿Y ahora? ¿Como están los dos?—Pregunto Depa.

—Muy bien, es a lo que iba.—Contesto el doctor.—Pudismos estabilizar absolutamente todo, a penas Guadalupe pudo dar a luz nos encargamos de llevar el bebé a Cuidados Intensivos Neonatales. En este momento esta conectado a respirador pero con muy buena evolución.

Así fue como un poco de tranquilidad llegó a nosotros.

—Doctor, ¿y qué es nena o nene?—Pregunto Maia.

—¿No sabían el sexo del bebé?—Fruncio su ceño confundido.

—Guadalupe decidió que fuese de esa manera, el dia del parto quería saber el sexo del bebé.—Le comento Ángela.