ᴛᴇ Qᴜɪᴇʀᴏ, ᴇʟɪᴢᴀʙᴇᴛʜ

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Jughead desvió su mirada para ver al chico que ella mencionó —Ven aquí, celosa.— rió levemente mientras la tomaba de la cintura —Soy tu chico, siempre y cuando, tu seas mi chica.— Betty rodó los ojos y el volvió a reír para luego besarla.

—¿Entonces...?— enarcó una de sus cejas.

Betty frunció el ceño, sin comprender —¿Qué?

—¿Aceptas ser mi chica?

Ella posó sus manos sobre el pecho de el y lo miro con una sonrisa divertida mientras se acercaba a su oreja —Lo sabrás en cuanto tu semana se termine.— le susurró.

—Eres mala, Cooper.

—Lo se, gracias.— sonrió con egocentrismo.

Mientras, el la miraba con ternura.

Jughead Jones

¿Me estoy enamorando? No, es solo una estúpida apuesta. No quiero lastimarla pero ya lo hice una vez, no creo que se decepcione más de mi.
Ni siquiera estoy seguro de que le guste, tal vez solo este jugando conmigo.

—Me voy a bailar.— me avisa antes de perderse entre la gente e irse en busca de Toni. Como me dejó solo, decidí volver con sus amigos.

—Al fin llegas.— habló Sweet Pea para luego darle un trago a su bebida.

—Hablaba con Betty, estaba celosa.— comencé a reír al recordar la manera en la que discutió con aquella chica.

—¿De verdad quieres a Betty?— me preguntó Fangs con seriedad —Porque si no es así, aléjate. Ella sufrió demasiado, no necesita más.—

Ahora me siento como una basura.

—Si, la quiero.—

¿Qué podrán hacerme si se enteran? Nada.

Están en una pandilla Jughead. Piensa.

Desvié mi mirada y veo a el mismo chico rubio que Betty señaló antes acercándose a ella. Un enojo creció dentro de mi al ver como le sonríe a el. ¿Celos? No lo se, pero no dejare que ese idiota se pase de listo con ella. Decidido, me levanté de mi asiento para caminar hacia ellos.

—Hola, nena.— la tomo de la cintura para besarla.

La sonrisa del rubio que le coqueteaba cambio a una mueca mientras se alejaba. Bingo.

—¿Eres idiota?— me preguntó molesta.

Me llevo una mano al pecho fingiendo dolor —¿No te gusto mi beso?

Soltó un suspiro —Eres increíble... 

—Lo se.— respondo y recibo un golpe en el hombro —Auch, no puedes golpear a tu novio.

¿Dije novio? Ups, se pondrá histérica.

—No eres mi novio.

Si, eso ya lo veremos rubia.

—Se que te mueres por ser mi novia, solo te haces la difícil.— suelto divertido, ella al contrario, si antes estaba molesta, ahora quería asesinarme.

—Hablo con quien quiero y no me hago la difícil.

Narrador Omnisciente

Betty se alejo de Jughead para buscar al chico rubio con el que hablaba anteriormente.

—Nick ¿Verdad?— preguntó con una sonrisa.

—Si. Oye, creo que tu novio esta molesto.— señaló al pelinegro mientras hacía una mueca.

La rubia volteó para ver a Jughead apoyado en la barra mirándola con un semblante serio 
—No es mi novio, lo que viste fue solo una escena de celos de mi amigo.

Betty no mentía, no eran nada más que amigos, si es que así se les podía llamar. No le molesto que haya hecho una escena frente a Nick, ella también la hizo cuando lo vio con la pelinegra; estaba molesta con el por como actuaba, por su egocentrismo.

Bailaron un rato bajo la mirada de Jughead, quien se acerco en cuanto Nick puso las manos sobre la cintura de Betty. Aunque no quería admitirlo el sentía algo por Betty, siempre fue así, solo que no quería aceptarlo.

—Betts ¿Podemos hablar?

—Si.— miró al rubio —Ya vuelvo.— aviso. El solo asintió.

Caminaron fuera del lugar hasta llegar a la motocicleta de ella —¿Estas enfadada?

—¿Y tu qué crees?— pregunto cruzándose de brazos.

—Me parece injusto que yo deba terminar con Veronica, pero que tu puedas coquetear con el rubio mal teñido.— frunció el ceño.

—No es eso, solo quería que te enfades porque me molesta que seas tan egocéntrico.— el levanto ambas cejas —¿Y qué esperabas? ¿Engañar a Veronica?

—No, no la quería engañar. Quería ver si las cosas funcionarían contigo.

—Claro, aseguro que estés rendida a mis pies para cambiar a mi novia.— habló con sarcasmo.

Jughead suspiró para volver a hablar —¿Por qué siempre tienes que ponerte a la defensiva?

—¿Por qué siempre tienes que ser así?

—¿Así?— preguntó confundido.

—Restregándome en la cara que puedes tener a cualquier chica solo para que sepa que también jugaras conmigo.— respondió enojada, porque en verdad esa era la actitud de el.

—¿Crees eso de mi? ¿Qué jugare contigo?

—Por favor, Jughead.— soltó una risa amarga —Solo haces esto porque soy la única que no ha caído a tus pies y eso te vuelve loco.

Desde pequeños ambos sentían algo por el otro, aunque ninguno lo dijo. Pelearon y eso hizo que cada uno siguiera su vida guardando esos sentimientos.

—Hago esto porque te quiero, Elizabeth.— contestó serio.

Ella lo miro a los ojos, pudo ver que el decía la verdad. Se acercó y lo tomo de las mejillas para besarlo. Cada roce de sus labios era suave, lento y dulce. Se separaron por la falta de aire y juntaron sus frentes. 

—Entonces ¿Qué dices? ¿Quieres ser mi chica?

Betty soltó una suave risa —Faltan cinco días para que sepas la respuesta.

—No me hagas esperar, ambos sabemos que dirás que si.

—Si sigues así mi respuesta será un rotundo: no.

—Espera ¿Me dirás que si?— preguntó con ilusión.

Ella volvió a reír para entrar al bar y dejar al pelinegro con la duda, pero el iba tras ella.

—Saludare a los chicos y luego te llevare a tu casa.— le avisó.

—¿Y tu a donde iras?

—A mi casa.— respondió con cierta obviedad.

Se despidieron de los amigos de la rubia y volvieron a salir para subir a la motocicleta. Minutos después llegaron a la casa de Jughead y ambos bajaron de la moto.

—Adiós, Jones.

—Se dice "adiós, amor", pero con el tiempo lo entenderás.— se encogió de hombros haciendo reír a Betty —Adiós, Coop. Te veo mañana.— le robó un beso y entró a su casa.







































Notas:

Perdón por no actualizar.

Bueno... ya pueden odiar a Jughead, aunque tambien lo pueden amar porque si siente algo por ella.

¿Me hablas a mi? - BugheadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora