Hard feelings |Draco Malfoy ||Cedric Diggory|

3.7 The first date

A.

El lugar favorito de Amelia para poder estudiar o leer algún libro siempre había sido cercano al campo de Quidditch; el color verde se encontraba en cada lugar en el que su mirada se encontraba, sentía el viento pegarle directo en el rostro (tanto el natural como el que era producido por los jugadores que entrenaban) y la luz que emanaba el sol era mucho mejor que forzarse la vista con las velas que se encontraban dentro del castillo. Por eso cuando su amiga Leah decidió unirse al equipo de Quidditch, Amelia tomó completa ventaja de la situación.

Cuando Leah se encontraba entrenando y Amelia tenía tiempo libre, iba a verla. Solía pasar las tardes con los gemelos Weasley observando a su amiga volar por los cielos; ellos le solían mostrar los caramelos y artículos de broma que estaban elaborando, su mayor meta era abrir una gran tienda de artículos de broma. Lamentablemente, Amelia fue la primer víctima; George le dio un caramelo con el cual su lengua iba creciendo hasta el punto de medir cerca de tres metros de distancia. Aunque pudieron arreglarlo, Amelia no les dirigió la palabra durante semanas enteras.

A pesar de que Amelia amara a Leah, había otra razón por la cual le encantaba pasar tiempo observando al equipo de su casa entrenar; su capitán.
Cedric Diggory era el galán y el chico más popular que había estado en Hufflepuff durante un largo tiempo. No era sorpresa que la gran mayoría de chicas de su casa suspiraban por él, incluso a la molesta de Pansy Parkinson la había escuchado mencionar lo atractivo que él era. Amelia llevaba ya tres años de amistad con él, no eran muy unidos, pero Cedric buscaba cualquier excusa pequeña para convivir con la pelirroja.
La chica era el flanco de envidia de muchas; les molestaba el observar como Cedric solía jugar con su cabello mientras estaban en la biblioteca y como él solía recostar su cabeza en el regazo de ella mientras esta le acariciaba su castaño cabello. Todo aquel que los veía podía pensar que estaban saliendo, pero Amelia se negaba a aceptarlo hasta que él se lo dijera directamente.

-¿Quieres probar este caramelo?- Fred le colocó en frente a Amelia un gran y rosado caramelo- llevamos practicando en él desde el inicio del curso.

-No pienso caer en sus juegos de nuevo.

-Te dije que no aceptaría- George le dio un codazo a Fred- ¿Ni por tres galeones?

-Podrían tener su bóveda en Gringotts llena, ofrecérmela y ni así aceptaría comer algo que fuera producido por ustedes- los miro obvia.

-Podemos tratar que Leah lo pruebe- dijo Fred.

-No, ella no probará eso- vio por lo alto como Leah sostenía la quaffle y, cuando Maxine O'Flaherty volaba dispuesta a quitársela, la empujo lo suficientemente fuerte como para que la chica fuera en picada en dirección al suelo.

-No sabía que Leah pudiera hacer eso...- dijo Amelia sorprendida observando como Maxine trataba de aterrizar en el suelo.

-Wow- espetó Fred.

-Creo que estoy enamorado- dijo George mientras seguía viendo a Leah, la cual volteó y le dedicó una sonrisa amable.

El resto del entrenamiento lo pasó Amelia escuchando lo maravillado que estaba George al ver entrenar a Leah de esa manera, aunque eso lo hizo darse cuenta de que, si volvieran a jugar un partido entre Gryffindor y Hufflepuff, Leah lo destrozaría. Con dos grandes botellas de agua fría, Amelia se acercó a Cedric y Leah, los cuales se encontraban dialogando sobre nuevas tácticas.

-Fuiste un poco ruda con Maxine, pero estuvo bastante bien- le dijo Cedric a Leah- sigue así cuando juguemos contra alguna otra casa.

-Seré peor- rio mientras observaba como Amelia se acercaba a ellos- ¡Amelia! ¿Me viste? ¡Estuve genial!