Supercorp del viejo oeste "Esmeralda salvaje"

Capítulo 31 Enredos y más enredos

Tocaron la puerta repetidas veces Kara se asomó por la mirilla apuntando con su revolver hacia la puerta viendo a su hermana colgar de los hombros de Abay, venia ahogada en alcohol, Lena los dejo pasar para seguir en lo que estaba haciendo, en la superficie de la cama ya hacia una bebé bastante molesta porque a su madre no le salía la leche esa noche, se había tensado tanto con lo sucedido que la leche dijo de emanar de sus glándulas mamarias.

–puedo ir por leche si quieres– sugirió Kara, lo que menos quería aparte de ver a su hermana borracha era que su mujer se enojara porque no tenía para darle de comer a su hija – tal vez pueda conseguir algo con el tendero–

–tal vez debas cariño, por más que me exprimo no puedo sacar ni una gota– veía a Nía que casi se desgarraba la garganta con cada lloriqueo

– ¿Qué pasa cuñadita?.... – pregunto Alex – ¿se te corto la leche...? hip... deberías de decirle a Kara que te de un masajito hip– dijo entre hipos

–No creo que deba tocarme mientras lo único que trato de hacer es darle de comer a nuestra hija–

–No de esos masajes tonta – dijo juguetona la pelirroja – deja mostrarte – sin decir agua va, Alex tomo a Lena desde la base de su seno para masajear con las yemas de sus dedos el voluptuoso atractivo de la esmeralda, lejos de molestarle Lena estaba aceptando que la intención de Alex no era para nada con alevosía y estaba dando resultados

–ALEXANDRA QUITA LAS MANOS DE MI ESPOSA– grito Kara demasiado enojada viendo que su azabache era toqueteada por su hermana ebria– Lena aleja esas manos de tu pecho–

–Cariño, en verdad está funcionando– dijo sorprendida Lena al momento que salían gotitas de leche por sus pezones – bien Nia ven acá cariño– dijo tomando a su castañita entre sus brazos – gracias Alex –

–SPLASH– se escuchó a Alex ser lanzada a través la ventana para caer en el abrevadero repleto de agua –NO VUELVAS A TOCAR ASI A MI MUJER– Kara celosa dejaba de ser la tierna cachorra para convertirse en un fiero león, a Alex se le había pasado la borrachera y recordó porque exactamente fue a buscar a su hermana, necesitaba contarle de todo lo que trato de hablar con Oliver Queen

Con una mojada pelirroja sentada sobre una silla y un Abay desmayado como tapete en medio de su habitación, la pareja decidió contar todo lo que habían visto en las colinas cerca del greasy creek empezando por los soldados que vieron pasar con esclavos y después del fusilamiento de algunos de ellos

Alex sabía que había comenzado una guerra entre los estados confederados y los republicanos, unos defendiendo la esclavitud mientras los otros tratando de abolirla, sabia también que tratarían de amedrentar a la mayoría de los involucrados que eran partidarios con la nueva ley del presidente Lincoln y que los confederados habían cumplido ya con algunas de sus amenazas de muerte.

Entre los confederados destacados se encontraba el señor Maxwell Lord, el nuevo candidato a gobernante de los estados de Kansas, Luisiana o Mississippi cualquier terreno que perdieran los republicanos sería una batalla ganada para ellos.

Alex les conto acerca de la curiosa charla que tuvo con el sheriff, que en vez de estar molesto por todo lo que le aventaba Alexandra a la cara parecía preocupado y desalentado, como si se supiera perdido o como dijo él... muerto.

Unos toques en la puerta las sacaron de sus pensamientos, Alex se levantó a abrir la puerta –Oliver – exclamo la pelirroja observando al hombre demacrado que estaba parado justo delante de ella – ¿pero qué...? – Alex no termino la oración porque el castaño le había caído encima de ella. En su espalda había una daga y la sangre salía a borbotones – ¿Qué demonios paso?.... Kara necesito coser a este hombre–

Kara saco de su carreta todo lo necesario para atender a aquel hombre Lena se levantó de su acogedora cama para ofrecerle su lugar al sheriff herido, la pelirroja suturo la herida y espero a que despertara

– ¿Quién te ha hecho esto? – Pregunto Alexandra – ¿Por qué viniste hasta aquí? –

–Porque sé que tu no me vas a traicionar – dijo quejándose – Danvers necesito contarte sobre la mina – Alexandra abrió los ojos rápidamente – pero antes quiero que sepas que todo lo que digo es real y necesitas confiar en mi–

Alexandra asintió – desde que note que realmente querías ayudar a las personas confié en ti plenamente, por eso no pude dejar pasar el hecho de que ahora cubras al malnacido de Maxwell Lord.... Pero cuéntame de que va todo esto, porque realmente se ha puesto interesante–

Queen exhalo fuertemente –ellos tienen a mi esposa e hijos – dijo conteniendo su llanto –Lord tiene una mina clandestina en las montañas Ozark –

–Si eso lo sabemos, sabemos que tiene esclavos para extraer oro–

El hombre negó – no Danvers no es oro lo que buscan.... Son diamantes– Kara y Lena se observaron la una a la otra – yo mismo he entrado a esa cueva y he visto a miles de personas entre esclavos negros niños, indios, mexicanos, trabajar arduamente, algunos perdiendo la vida y otros solo sobreviviendo.... Yo mismo he llevado a gente– el llanto de Oliver corría sobre sus mejillas – he entregado mi alma al diablo y todo para que, ¿para qué? No han soltado a mi familia yo he cumplido mi trato y el maldito los tiene recluidos en algún lugar–

– ¿Quién te apuñalo? –

–iba saliendo de la comisaria para hacer mi recorrido nocturno y solo vi la sombra no le vi el rostro, se movía tan naturalmente con la noche solo recuerdo que su sombrero era de copa–

–una persona tan bien vestida no debió de pasar desapercibida ante los ojos curiosos de todo el pueblo ¿no crees? –

Tengo un plan para el día de mañana dijo Alex para atraer la atención de todos.