Supercorp del viejo oeste "Esmeralda salvaje"

Capítulo 21 Venimos por ti

Un sonido de pasos la alerto, no era el caminar de Kara

– ¿cád atá tú ag déanamh anseo? (¿Qué hacen aquí?) – dijo a los hombres parados en el marco de la puerta de la cocina, Lena los reconoció al instante

–venimos por ti, tu madre nos ha mandado.... Espero que no pongas resistencia – dijo el pelirrojo con voz áspera en su idioma natal

–que lastima no podré ir en estos momentos, díganle a mi madre que iré en cuanto nazca mi bebe– dijo tomando todo el valor posible para responder sin bajar la guardia

– ¿Dónde está Olsen? – pregunto el castaño pensando que el moreno era el padre del niño

–el murió...– dijo secamente– mi esposo no tardará en llegar, es mejor que se vayan– amenazo Lena

–Entonces no nos dejas otra opción– la acecharon con paso presuroso y Lena tomo un sartén y se lo estrello en la cara al pelirrojo noqueándolo

– ¿tú también lo quieres intentar? – le pregunto al castaño que se abalanzó sobre de ella, Lena sintió un miedo recorrerla completamente, los recuerdos del día que fue abusada volvieron a su cabeza alojándose como garrapatas – suéltame no me toques – dijo jadeando con el peso encima del hombre que intentaba quitarle de la mano la sartén

–No quisiste por las buenas– dijo el castaño, Lena aún estaba en el piso y como pudo zafó una pierna y le pateo la cara aventándole a unos pocos metros, el castaño se levantó sangrando de la nariz y corrió hacia donde había escapado la ojiverde

Lena cerró la puerta y la atranco con la mesita del buro de Kara, el castaño llegaba corriendo con la única intención de derrumbar la puerta y solo la hizo zafarse de una de las esquinas del marco cuando este la tacleo, con el otro golpe el marco de abajo cedía, un golpe más y Lena estaría perdida, busco entre el pequeño armario algo con que defenderse pero solo hayo una navaja de afeitar, el castaño ya había roto la puerta y le estaba quitando los seguros cuando – ¡BAM! ¡BAM! – dos balazos lo dejaban tirado medio del marco de la puerta, Kara entraba sobre el cuerpo herido del cazador pero – ¡BAM! – Otro balazo daba en la espalda de Kara perforando su omóplato.

– ¡NOOOO!– Lena grito acercándose a la rubia– ¡NO! !KARA! – la rubia había quedado boca abajo en el piso con una enorme mancha roja que se hacia más grande sobre su hombro izquierdo

–VEN.... QUE VENGAS TE DIGO– dijo el pelirrojo sacando a Lena de su shock, jalando a la azabache del brazo, el pelirrojo tenia sangre sobre su cabeza debido al golpe que le había propinado Lena con el sartén –CÁLLATE ESTÚPIDA – de un cachetada casi la noquea tirándola al piso con el labio partido

–BAM– otro balazo se escuchó tirando al hombre que estaba por propinarle otro golpe en la cara a su esposa – nadie le pega a mi mujer– dijo en un susurro cansado tirándose al lado de Lena

Winn llego enseguida encontrando a Lena toda ensangrentada tratando de controlar la sangre de su esposa con un trapo presionando en su omóplato –ayúdame Winn – pidió la azabache y el castaño se agacho para ver la herida de la rubia, el tiro había sido limpio atravesó el omoplato y salió hacia la clavícula– ayúdame–

– ¿tienes ron? – Lena asintió y salió corriendo de la cocina hacia el pequeño refugio donde la rubia guardaba sus licores, llevo el ron hasta Winn – Lena enciende la chimenea– ordeno a la mujer, Winn derramo el alcohol dentro de la herida de Kara y logro ver que salía del otro lado ya mezclado en color rojo de la sangre – pon a calentar el quita cenizas – Lena lo hizo después de limpiarlo, ya se imaginaba para que iba a servir eso