Supercorp del viejo oeste "Esmeralda salvaje"

Capítulo 99 Mi buen amigo Abay

–Vamos a morir todos estúpido– grito de nuevo el soldado quitándole la caja al gobernador para guardarla en su saco

–Tienes mucha razón, todos moriremos – la risa de Fleck fue un excelente distractor para que Abay saltara a la embarcación para comenzar desatar a Lex

–Abay... mi buen amigo Abay.... Solo tú entiendes mi pena– Lex estaba demasiado drogado y trataba de sobar la calva de Abay mientras este forcejeaba con él para quietarle las sogas de los pies y las manos

–calla Lex nos van a escuchar–

–Aby... mi buen amigo...aby– Lex cantaba una improvisada melodía mientras tomaba al nativo con ambas manos y sobaba su cabeza como si fuese una lámpara maravillosa –no te olvides de Clark aby– dijo Lex señalando al ojiazul, los tres se encontraban en un punto ciego para los demás tripulantes

–Lex, escucha bien, tienes que fingir que aun sigues atado–

–pero no lo estoy.... Tú me desataste, mira– Lex enseño sus manos moviéndolas de un lado a otro

–te estoy pidiendo que finjas–

–Está bien, está bien– asintió a regañadientes –a veces hieres mis sentimientos– dijo comenzando a llorar y poniendo ambas manos sobre sus ojos, gracias a dios no había nadie cerca de la popa si no ya los hubieran matado

–no llores cállate– pidió el nativo escuchando a alguien que se acercaba, Abay subió al techo de la embarcación, O'Riley miro a ambos soldados que seguían en la misma posición y camino de nuevo hacia la proa

–ahí esta Jack– dijo O'Riley señalando al capitán que aguardaba con otros cinco militares

La embarcación se acercó a la orilla para subir a Jack junto con sus soldados – supongo que la tarea ya está hecha– pregunto Fleck, estaban a escasos dos kilómetros del lugar donde se suponía estaría el barco dispuesto para comenzar con la pirotecnia

–hemos seguido a algunos integrantes de la legión, visualizamos a Wayne y a Prince en el puerto, a Allen y a Curry en el pueblo no pudimos ver a los demás legionarios

–mmmhhh eso me parece sospechoso, hay que estar alertas de lo que puede ocurrir no confió mucho en que la legión este trabajando por separado, ¿Cuántos soldados dejaste en el puerto? –

–por lo menos a cien de ellos, no quiero exponerlos al peligro son buenos hombres y...–

–sí, sí, si...– corto Fleck de inmediato el discurso del soldado – ya sabemos que son buenos y tienen hijitos y bla, bla, bla... ahora dime ¿ya llego Cobblepot al pueblo?

–vimos la carrosa con.... –

–Eso es todo, O'Riley necesito que la mayoría de las personas estén en ese puerto–

– ¿y cómo lo piensas hacer? –

–bueno tengo un amigo que nos pude ayudar– O'Riley sospechaba ya del alter ego de Fleck, el maldito payaso causante de varios crímenes en el estado de nueva york y Pensilvania –a todos les gustan los payasos ¿no es así Jackie?–

–Pues a mí me dan miedo–

–bueno, a las seis en punto varios de mis amigos saldrán de sus escondites para llevar a las personas en un carnaval hasta el puerto, la legión no podrá con todos mis amigos y no tendrá tiempo de evacuar a toda esa gente, tú y tu ejército serán los salvadores de la noche y la unión será catalogada como los causantes de la peor matanza de inocentes de todo estados unidos en el gobierno de Lincoln–

De pronto Abay salto del barco y lanzo su cuchillo hacia Fleck que alcanzo a esquivar pero se le clavo a un soldado que estaba a unos metros de él, todos tomaron su armas para aniquilar al nativo que salió huyendo hacia la popa del barco pero Lex y Clark lograron salir detrás para abalanzársele a los soldados tirándolos al rio junto con ellos, Fleck corrió hasta la proa con Jack detrás de él, para ver que sus otras dos prisioneras atuvieran donde las dejo

–estoy aquí malditos– dijo Lena llamando la atención de Fleck mientras Kara golpeaba a Jack dejándolo noqueado y Abay sujetaba al gobernador con una cuerda por el cuello antes de lanzarlo a por el estribor del barco, los tres veían como el hombre pataleaba desesperado debido a que los cocodrilos se acercaban mientras el barco llegaba a su objetivo.

–Van– una bala dio en la espalda del nativo que cayó frente a Lena

–NOOOOO– grito la azabache lanzándose al piso para apretar la herida, O'Riley tenía un arma apuntándole a Lena que se tiro junto a su amigo inconsciente –ABYYYY–

Kara se abalanzo al soldado para quitarle el arma –aaaghhh– Kara le hizo una llave desarmándolo para empezar a forcejear ferozmente – maldita rubia– O'Riley tiro a Kara para poder tomar su sable y herirla pero le estaba costando demasiado, la rubia le tiro el sable para comenzar a pelear puño a puño

Jack se levantó para ayudarle a su compañero, el capitán tomo una soga para lazar a Kara del cuello y jalarla para tírala callando sobre su espalda, Lena enojada se levantó de inmediato y le clavo el sable en el estómago la azabache aprovecho y lo empujo por la proa, los cocodrilos se acercaron rápidamente para alcanzar a morder al soldado qué gritaba tratando de salvarse subiendo de nuevo al barco ayudado por la soga que seguía aun en el cuello de la rubia

–aggghhh– se quejaba Kara con ambas manos sobre su cuello tratando de que la cuerda no le sofocara hasta morir, O'Riley aprovecho que la rubia tenía las manos ocupadas para poder golpearla dejándola desmayada, Lena tomo el arma y le disparo al soldado dejándolo muerto sobre el piso del barco el cual ya había pasado el puerto de nueva Orleans, corrió hasta llegar a su esposa para quitarle la soga del cuello y tratar de despertarla

–Kara amor despierta – Lena saco la soga de su cuello y al arrojarla se dio cuenta que el piso de madera se encontraba mojado –mierda–

Ya no pudo reaccionar un golpe en el rostro casi la noquea, como pudo se fue arrastrando hasta donde se encontraba el arma pero el desgraciado de Fleck la tomo de su larga melena para arrastrarla por el piso tenia cara de loco, aun con las ropas desgarradas por los enormes animales y el cuerpo sangrando por las heridas tomo a Lena y la ato a un poste cerca del cargamento –ahora si maldita esmeralda, te llego la hora– Fleck saco de la casaca de O'Riley los cerillos y prendió las largas mechas de la pirotecnia y la dinamita –jajaja – se reía demencialmente mientras el fuego se acercaba a su objetivo, tomo el timón de la embarcación y la dirigió de nueva cuenta el puerto –sabes, no importa si muero, lo único que quiero es acabar con esos burgueses idiotas y la maldita legión–

–Maldito demente.... arderas en el infierno Fleck–

–todos vamos a arder querida.... Jajaja jajaja– el payaso no se dio cuenta cuando la soga le paso por el cuello y cuando volteo para ver quién era, no contaba que Kara junto con Abay ya lo tenían inmovilizado al timón del barco –malditos suéltenme.... maldito piel roja me encargare de desollarte vivo–

–Que tengas suerte, payaso– contesto Abay colocándole un par de tubos de dinamita atados a su espalda mientras Kara movía el timón para alejarlo del puerto

Ambos cortaron la soga de las manos de Lena y saltaron al agua a babor para llegar nadando a la orilla del rio viendo como el barco se alejaba más y más del puerto, Kara y Lena cargaron por los hombros a Abay que ya estaba demasiado agotado por la sangre que había perdido y poder alejarlo del impacto de todos los proyectiles, los fuegos artificiales se iban encendiendo uno a uno dejando ver el espectáculo que tenía preparado el gobernador cuando –PUUUUUM– un estruendoso sonido las movió de sus lugares sintiendo como el agua alcanzaba a salpicarlas por el estallido

–Kara amor, la carreta–