Capítulo 71 Sálvenme

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–Ríndase capitán Luthor - grito el capitán confederado, un veterano de 50 años de apellido Watson –es inútil que siga resistiéndose, se está quedando sin opciones–

–Lo siento –contesto gritando el calvo - esperare a mi amigo Kal-el y a su batallón–

Watson sonrió de medio lado, su malicia no pudo contener la sorpresa - tráiganlos a los dos– pidió y enseguida dos hombres atados a dos postes con las caras tapadas con un saco de manta salieron siendo jalados por varios soldados - lamento decirte que el tonto de su amigo no podrá venir–

Lo interrumpió Clark –no soy tonto - dijo con voz pausada –deja a Lex en paz–

–Mierda– exclamo Lex, dando vueltas deserrado sobre su caballo viendo a su mejor amigo atado con las manos en un tronco, había sido capturado Kal-el

A dos colinas de ahí

Lena había oído varios cañones ser disparados y pregunto a Abay de dónde provenía el ruido, no se alcanzaba a distinguir debido al eco que se formaba en las montañas, Abay señalo a un valle donde se notaba algo de humo, ambos apresuraron el paso para llegar lo más pronto hasta ahí, con suerte encontrarían a O'connell y vengarían por fin la muerte de su esposa.

A metros de llegar, Lena tomo a fiáin y la sujeto a un árbol para que se quedara con su potrillo, le dio un beso cariñoso sobre su nariz y se montó en beans, Abay iba montado ella parte de atrás del potro amarillo, aceleró el paso de beans para ver arriba de las colinas a varios hombres enfrentarse, era el ejercito de la unión ¿con una bandera irlandesa? –Vamos Abay– y bajo por la colina con fusil en mano.

En el campo de batalla

–Mierda, mierda, mierda– susurro dando vueltas sobre su caballo - ¡no te metas con Clark si no quieres saber de la furia de mi familia! - ¡dijo apuntando con un dedo al capitán - ah y otra cosa Watson.... No le vuelvas a llamar tonto a mi amigo!– gritó

El alto hombre estaba atado son sus manos sobre un madero, se notaba que lo habian golpeado y torturado aun así le sonreía a su amigo Lex, Kal-el se levantó, Kara juro que nunca antes a sus cortos 24 años había visto a persona más grande, por lo m...

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El alto hombre estaba atado son sus manos sobre un madero, se notaba que lo habian golpeado y torturado aun así le sonreía a su amigo Lex, Kal-el se levantó, Kara juro que nunca antes a sus cortos 24 años había visto a persona más grande, por lo menos media  dos metros de altura, era de pecho robusto y sus brazos gruesos como troncos, tenía marcados los abdominales, a pesar de su cuerpo maltrecho por los golpes Clark se levantó para enfrentar al capitán. - ¿Qué hacen? no lo dejen que se levante– ordeno el capitán viendo a sus hombres que no sabían cómo contener al gran hombre que tenían enfrente

El otro hombre que también tenía un madero sobre sus brazos formando una cruz, estaba aun hincado y tenía cubierto el rostro con una máscara de trapo, muy tranquilo, de repente se soltó de las cuerdas y se quitó el saco que cubría su cara– Queen– exclamó Kara, Oliver se acercó a un soldado y prácticamente le arrebato su fusil para matarlo y después a los soldados que le había apuntado, tomo al uniformado como escudo para contener las balas, en ese momento Clark peleaba con todo y madero sobre sus hombros, moviéndolo como si fuesen cualquier palo.

–¡A la carga!– ordeno Lex, no iba a dejar que mataran a su más leal compañero. Todos los soldados de la unión corrieron para encontrarse con los confederados, la prioridad de Lex era que no hirieran a su amigo Kal-el

Kara tomo su revolver con ambas manos y sobre el caballo giro el tambor diestramente para derribar a cuantos hombres se le pararan enfrente, cuando se le acabaron las balas guardo su arma para apuntar a los cañoneros que se estaban preparando para atacar, el capitán se dio cuenta que estaba causando una cantidad de bajas en el batallón y con una soga lazo a Kara de un pie tirándola del caballo con brusquedad para después arrastrarla sobre el pasto, Kara giraba sobre su torso para salir menos lastimada, pero su dolorido cuerpo le estaba cobrando factura.

Lena vio a muchos hombres enfrentándose, matándose con sus sables y fusiles, eran sin duda soldados irlandeses y confederados, un poco más lejos había un gran hombre que derribaba uniformados ¿con un tronco en sus brazos? .... pero algo más le llamo la atención, un soldado de alto rango arrastraba una persona por el pasto, el pobre hombre tenía sujeto su pie y mientras era arrastrado trataba de rodar sobre su espalda.

Ese no es un hombre....

Es una mujer....

Es rubia....

Es Kara....

–¡Kara!– grito y corrió para darle alcance al desgraciado que la arrastraba, antes de llegar, Abay se lanzó al piso rodando sobre su espalda antes de posarse sobre sus pies y lanzar su filoso cuchillo para aniquilar a un soldado que apuntaba a la azabache

–Baaam– una bala de un fusil tiro al capitán de su caballo dejando a la rubia dolorida retorciéndose sobre el pasto mientras los soldados se enfrentaban con sus sables, sintió unos brazos rodearla, pensó que estaba muerta y dios le había cumplido su último deseo, poder sentir de nuevo a su mujer, abrió los ojos y suspiro al ver a Lena con el cabello recortado y un grueso sombrero sobre su cabeza, tenía ropa de cazador con una amplia falda color café, tomo ambas mejillas de su azabache, le temblaban las manos y sin poder creer lo que veían sus ojos, cerro las distancias para poder sentirse viva de nuevo, volver a sentir que el oxígeno entraba por sus pulmones dándole fuerza intensifico el beso a su esposa que lloraba de alegría –Kara... mi amor – dijo sin aun creer lo que captaban sus sentidos y volvió a juntar sus labios

–Elú, ayúdame aquí - pidió Abay mientras cubría la espalda de ojiverde

–¿Puedes levantarte mi amor? - La rubia asintió y Lena la levanto despacio - vamos a ayudar a Abay– le dijo entregándole un revolver

Kara estaba feliz y pero también aterrada, su reencuentro lo había soñado muchas veces pero jamás creyó que fue en medio de una batalla –amor, tengo que decirte algo, y te va a alegrar muchísimo– dijo la rubia que disparaba derribando a muchos soldados

–Yo también me alegro de verte mi vida, y si quiero casarme contigo, no me importa si nos adelantamos a Alex y  a Sam solo quiero que sepas que voy a cuidarte todos los días de mi existencia y te necesito Kara más que al mismísimo aire– dijo con animada sintiéndose fuerte, viva, libre, salvaje. Quería sentirse así siempre y solo podría al lado de Kara

–Yo también te amo mucho, pero es otra cosa– dijo acercándose

–Lo que sea puede esperar– la jalo para apuntar a otro individuo que se acercaba mucho a ellas

Alex había llegado montada sobre su inseparable azabache, vio a Queen que peleaba junto a un hombre muy grande y un calvo muy gritón, sin mediar palabra comenzó a disparar desde su posición derribando a los agresores, la pelirroja llego hasta el trió que se encontraban jadeando de cansancio con sus manos sobre sus rodillas

–Kal ¿estás bien? - dijo el calvo poniendo una mano sobre la espalda del alto hombre de pelo azabache y ojos azules

El hombre no contesto solo asintió enfáticamente desviando la mirada hasta donde se encontraban los confederados que aguardaban la orden del segundo al mando.

El hombre hizo una seña con la mano y de inmediato los tambores empezaron a tocar junto con una trompeta, al momento salió otro contingente de uniformados que traían fusiles y sables en la mano

–Dios no– dijo el calvo para tirarse en el pasto muerto de cansancio

–Lex debemos de continuar, no tardaran en llegar– dijo Queen al calvo– gracias Danvers– asintió a la pelirroja

–Solo vine a ver, pero me quedare a tu lado para pelear– dijo con una sonrisa leve

–Espero que no se tarden, ya solo quedamos muy pocos aquí– exclamo Lex esperando recobrar con normalidad la respiración

Supercorp del viejo oeste "Esmeralda salvaje"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora