Capítulo 43 Presentando a la familia

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–mmmhmmm–no se habían dado cuenta de que habían llegado a su destino, Kara, Abay, Lena, Johnn, Ruby y hasta Nía miraban con ojos muy abiertos a la pareja en la entrada de la carreta –creo amor mío que esta dos nos van a quitar el puesto– dijo Kara haciendo que Samantha escondiera el rostro en el hombro de Alex – ¿siquiera puedes presentarnos hermana? –

– ¡JHONN! – grito Alex levantándose y jalando a Samantha de la mano para bajar del vehículo, abrazo al hombre moreno con mucho amor – como me alegra saber que estas bien– Johnn ilumino la tarde con su enorme sonrisa– mira Johnn ella es Samantha, mi prometida–

– ¿prometida? – Grito Kara – apenas te fuiste hace tres semanas–

–cariño, Alex conoció al amor de su vida no la molestes–

–Es un gusto– tomo la mano de Sam y coloco un beso en el dorso – Alex es como una hija para mí, entonces tú también serás una hija para mí–

Samantha se sonrojo –cariño, ¿Por qué tu padre no me dijo eso a mí? – susurro Lena al oído de Kara

–no te preocupes amor estoy segura de que Johnn también siente aprecio por ti– sonrió sincera –solo lo dijo para que Sam confiara en nosotros–

–¿Y quien es esta preciosura de niña?– pregunto Johnn mirando a rubí que giraba inquieta sobre su propio eje –

–Soy Rubí Arias–

–Hola Rubí soy el padre de Alex– le ofreció su mano en forma de saludo – es un placer–

–La cena ya casi esta lista– dijo Oliver en el marco de la puerta de la casa, fui a cazar un venado por la mañana, hay que comernos la carne antes de que se eche a perder, la lluvia está arreciando y las moscas podrían pudrir la carne–

–Oliver, Kal el te mando tu arco – Alex le dio en mano su arco tan adorado – no veo porque tanto cariño por un arco–

–fui criado por indios sioux, ellos me dieron el nombre de ouray (flecha en idioma sioux) el día de mi confirmación como hombre me regalaron este arco para que me internara en el bosque y sobreviviera solo un mes entero– contaba Oliver mirando con al objeto con aprecio– tuve que aprender a cazar y a cuidarme, este arco me dio comida y pieles que me dieron calor, ame los días y las noches, adore la naturaleza y al espíritu del bosque, con los años fui perfeccionado los tiros y ahora no falló uno solo–

El gruñido del estómago de Kara hizo que todos perdieran el hilo a la conversación– oh perdón– se disculpó la rubia

–Vamos amor antes de que te comas a Oliver– la jalo Lena con su hija colgando del brazo de su esposa –Rubí también debe de tener hambre–

Johnn venia de la mano de rubí, Cat se había centrado con su inseparable bolso rosa, Abay reía divertido mirando a Alex y a Sam que venían hasta atrás tomadas de las manos, se quedaron al pie de las escaleras de la entrada

–Son un encanto– dijo posando sus labios sobre la pelirroja

–te dije que te amarían–

–Te amo tanto Alex–

–Yo te amo más– se quedaron abrazadas de la cintura besándose a metros de la ventana

–dios esas dos no se van a aburrir ¿verdad? – Dijo Kara a Lena que miraba a su hermana por la ventana –jamás había visto a Alex de esa forma–

halona, ahora sabes lo que yo sentía cuando las veía a las dos– Abay dijo mirando a la pareja desde la ventana, señalo a Lena y a Kara – ustedes eran odiosas

–Creo que ni con papá la había visto así– dijo rubí que también miraba por la ventana

–Que yo recuerde nunca tuve la necesidad de separar a Alex de alguna de sus novias– dijo Johnn con los ojos bien abiertos sin creer lo que estaba mirando

– ¿Qué no vamos a comer o qué? – dijo Kara sin separar el rostro de la ventana

–si vamos, esa dos podrán morir de inanición si quieren – comento Lena cargando a su hija

La cena fue excelente con la familia creciendo no fue difícil, lo feo fue elegir, no corrección pelearse por una habitación, Cat quería la más grande, ofreció hasta cien dólares por esta pero Lena ya le había echado el ojo, Sam argumento que la más grande debía de ser de Alex y ellas porque rubí no podía dormir en la misma cama que ellas, Kara y Alex pelearon por las camas con una desafío de miradas la que parpadeara más rápido o mirara hacia otro lado perdería, Alex gano por supuesto con rubí distrayendo a la rubia no había quien ganara a la pelirroja, Kara, Lena y Nía se fueron a la habitación contigua derrotadas con una sola cama, Nía aun dormía con sus madres así que no habría acción nocturna. Johnn, Oliver Barry y Alfred durmieron en una sola habitación encima de un petate y con una sola cobija cada quien y Cat sola con la única habitación que tenía espejo.

La casa estaba realmente escondida en el bosque, no había ningún camino cerca en kilómetros, el pasadizo secreto se habilito para "el plan b" si es que llegaba a suceder que tuvieran que escapar rápidamente.

en la caballeriza estaban beans, fiaín, las dos mulas de Samantha, el lucero de Alex, el pinto de Abay, el Mustang de Oliver y los dos tordillos de Alfred y Cat respectivamente.

Las lluvias comenzaron a arreciar los días posteriores a su llegada, Alex corría a la habitación de Kara cuando comenzó a relampaguear el cielo, lo que no sabía su hermana era que se le había acabado el miedo a los relámpagos por el tratamiento que Lena le daba en las tardes y noches de tormenta eléctrica, la pelirroja encontró a Kara encima de su esposa con poca ropa y muy cariñosas ambas.

–agghhhh Kara mis ojos– grito Alex cubriéndose

– ¿Nadie te enseño a tocar cuñadita?– dijo Lena tapándose sus dos atributos – podrías haber preguntado si estábamos disponibles–

– ¿Dios Lena que tanto come la niña? – miro a su cuñada que no podía taparse ni con las dos manos

–cariño ¿Qué pasa? Te escuche gritar – pregunto Sam desde la puerta – ¡oh santo cielo!– con una mano quiso reprimir la carcajada no pasó desapercibido el medio de alimentación de Nía

–¡le pueden dejar de ver los senos a mi señora!– grito Kara haciendo que Nía comenzara a llorar – ¡ya despertaron a la niña!–

–Fuiste tú rubia impúdica– señalo Alex a su hermana – ya sé que están casadas y tienen una niña, pero ¿no se pudieron contener en una casa donde todo se escucha? –

Kara se levantó de donde estaba tapándose con una mano y con la otra ahuyentando a los espectadores – salgan de aquí– ordeno cerrando la puerta mientras detrás se reían a carcajadas ambas mujeres

–Cariño déjame decirte que en esta casa no va a haber privacidad– dijo Lena regresando a su lugar su blusón

–Entonces no vamos a terminar con la tarea– Kara se acercó para tratar de persuadir a su esposa de que no se colocara la ropa regando besos sobre su hombro

–me temo que no mi cielo, Nía ya se despertó y va a tardar en volverse a dormir, además las otras dos están esperando a echarnos en cara nuestra actividad que utilizamos para tu miedo a las tormentas – tomo a Nía para mecerla sobre sus brazos – debemos dormir, mañana Sam me va a acompañar a lavar la ropa al rio, tal vez me puedas alcanzar después para tomar un baño juntas– dijo elevando sus cejas sugestivamente– podrías tallarme lo que quieras–

–Nada más me encantaría corazón– dijo Kara regalando un beso a su mujer

–aghhh Lena ¿podrías dejar de babear a mi hermana? Aquí queremos dormir– grito Alexandra desde su habitación

–nadie te dijo que siguieras escuchando pelirroja metiche– contesto la azabache

–ustedes pueden seguir en lo que estaban a mí no me incomoda– grito Cat desde el cobertizo

–A mi si, voy aquedar loca– espeto Rubí

Supercorp del viejo oeste "Esmeralda salvaje"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora