Gen D [#1]

45. Perdón

Celeste Parker no vive en el internado, y eso era algo que tenía que agradecer ya que de ese modo nadie nos vería a Adam y a mí juntos. Él y yo caminamos por el pasillo del edificio buscando el apartamento de Celeste, hasta que lo encontramos, Adam mira a la puerta con determinación aunque se nota que tiene algo de miedo, está en cierto modo indeciso aunque quiera demostrar otra cosa. Yo entrelazo mi mano con la suya intentando darle seguridad y él sonríe con dulzura.

- No te preocupes, eres Adam Walker, va a salir bien- murmuro y llamo al timbre.

La puerta se abre a los pocos segundos y nuestras manos se separan.

- Scarlett Fuller, es un placer... ¿Él qué hace aquí?- los ojos de Celeste se abrieron como platos, ella no esperaba a Adam y como si nada, la típica cubierta que tenía cuando él estaba delante había sido perturbada por mí. - ¿Qué hacéis los dos juntos?- la confusión de Celeste era evidente pero se notaba que igual que su cubierta había desaparecido, había vuelto.

- Dame un minuto Celeste y te lo explicaré todo- digo cerrando la puerta detrás de mí.

- Esto no formaba parte de trato Scarlett, esto era entre tú y yo y has roto la confianza que tenía en ti- ahora estaba a la defensiva.

- Celeste suficiente, he venido aquí a hablar contigo, así que te agradecería que dejases de comportarte como una cría- habla Adam con seriedad mientras se cruza los brazos.

Celeste se queda unos segundos callada mientras mira a Adam con un gesto de enfado.

- ¿Mal momento para ofrecer café?- el chico que reconozco por trabajar con Celeste en el tercer ojo aparece en la sala. ¿Cómo se llamaba? ¿Jasper? ¿Jonathan?

- Un café, justo lo que necesito- murmura Celeste sin dejar de mirar con cierto odio a Adam.

- Yo quiero otro- responde Adam aún con los brazos cruzados.

- Perfecto, Scarlett ¿no? ¿Qué tal si me acompañas?- pregunta el chico moreno con una sonrisa de lado.

Adam me mira de reojo. No me iré, Adam necesita mi apoyo en este momento aunque no lo quiera admitir. Él me señala con la cabeza a la puerta y yo suspiro, él me está pidiendo que me vaya, y sé que yo ya no tengo ni voz ni voto.

- Por supuesto- sonrío y acompaño al chico a la cocina.

Él se pone a preparar los cafés de ellos y me mira- ¿Tú no quieres nada?- pregunta simpático.

- No gracias- sonrío de lado -No me gusta mucho el café.

- No importa, te entiendo perfectamente- dice y espera a que la cafetera se caliente y se gira para mirarme con una sonrisa. Que situación tan incómoda.

- Perdón por preguntarte esto, pero es que no me acuerdo de tu nombre- digo intentando salir del momento incómodo, ¿pero hay algo más incómodo que preguntarle a alguien su nombre porque te has olvidado?

Él se ríe - Me llamo Jack, no te preocupes, no esperaba que te acordases- yo sonrío de lado sintiéndome más cómoda ahora - Eres la famosa Scarlett Fuller y estás aquí en mi propia cocina, creo que debería ser suficiente para mí.

- No creo que sea para tanto, no es que sea famosa- ruedo los ojos y río.

- Me enteré el otro día de que ya eres parte de Kappa Beta ¿no?- pregunta curioso.

- ¿Cómo sabes eso?- tampoco era un secreto, pero era algo que a parte de nosotros, otra gente ignoraba, lo que ocurría dentro de la fraternidad, entre nosotros solía quedarse en secreto.

- Scarlett, trabajo en el tercer ojo, la información me llega demasiado rápido, sé más cosas de las que tú te podrías imaginar- noto algo de malicia en su voz así que trago saliva con miedo.