🎃 ESPECIAL HALLOWEEN 🎃

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Halloween, época del año que muchos niños ansían y los padres huyen, tdo a causa de los dulces. Época en que adolescentes nos seguimos vistiendo con disfraces, pero no necesariamente para pedir dulces. Sea cual sea, en nuestro caso para los hermanos Connor, nuestros padres no son fan del día.

—Los cuidas, pero en serio los cuidas —me advierte mamá con una mirada penetrante que asusta más que cualquier disfraz allá afuera.

—Lo intentaré —respondo, encogiéndome de hombros—. Pero sabes cómo son ellos, no prometo nada.

Mamá y papá me dan un beso en la sien y por fin me dejan salir de casa junto con Becca para ir a la escuela antes que el sol se ponga por completo.

—Te ves ardiente, pelinegra —saluda mi amiga con una sonrisa pícara.

La escaneo de arriba abajo con descaro.

—Y tú te ves impactante. Valió la pena cada hora que pase suplicándote que usaras falda.

Ambas reímos y nos apresuramos a caminar hacia nuestro destino. Cada año, para este día, la escuela es fan de hacer un tipo de feria dentro de nuestro campus con distintos puestos, algunos externos y otros propios de alumnos. Mi parte favorita siempre ha sido el laberinto en la cancha de fútbol o la casa embrujada que suele ser organizada por alguno de los clubes de la escuela. Admito que la primera vez que salí de ahí, lo hice sola y llorando a mares. ¿Qué puedo decir? Soy miedosa, pero me gusta esa adrenalina. Desde entonces no lo hago sola, así en lugar de llorar, río. Río, pero de nervios, sin embargo, mil veces mejor a que me vuelvan a hacer burlas.

Oh, my fucking God —reaccionamos Becca y yo al ver a la pareja del momento, Sebs y Meg, en la entrada del edificio principal de la escuela.

Con pasos algo dudosos, nos acercamos a ellos con la boca abierta y llenas de asombro. Sebas no se equivocó: Meg y él están que arden. Casi literal.

—Nunca dijiste que Meg era tan linda —le comenta la castaña a Sebs, observando el vestuario de ambos.

Megan es una chica linda, de baja estatura, o un tamaño cute, cómo me gusta decir, pues es aún más baja que yo; es rubia y con unos hermosos ojos color azul verdoso. Haber elegido el disfraz de Harley Quinn y Joker les ha quedado de maravillas. Megan se ve super sexy y linda con esa licra con agujeros y la blusa manchada más su maquillaje colorido que resalta sus ojos. Y por Dios, mi mejor amigo no parece él, estoy en shock. Ahora Sebastian parece ser competencia para la imaginaria lista de chicos lindos de los que me he ido rodeando al crecer. ¿Quién diría que lo sería?

—Amigooo —digo, alargando la última letra mientras toco los brazos muy bien tonificados de Sebs con el ceño fruncido—, ¿cuándo fuiste al gimnasio que no me dijiste?

Todos empezamos a reír y Sebs niega repetidamente con la cabeza, sin embargo, evade mi pregunta con la invitación para entrar a la escuela de una sola. Le sonrío divertida y lo dejo pasar. Así como dejo pasar las miradas lascivas que varios chicos y algunas chicas nos dan a Becca y a mí por nuestros disfraces.

—No creí que llamaran la atención —comenta a mi lado, mientras caminamos agarradas de los dedos meñiques.

Elevo las cejas y chasqueo la lengua, aun me estoy acostumbrando a la atención de los demás y a veces, resulta ser un poco abrumadora, pero en esta ocasión, tampoco me sorprende. ¿Por qué? Fácil, nuestros disfraces. Nuestra última opción fue hacer un tipo de combinación entre el clásico de ángel y demonio con el sol y la luna. En nuestra relación, es muy obvio que soy más santa que Becca, hasta sudo agua bendita a la par de ella. Bueno, no tanto. El punto es que quisimos hacerlo divertido e invertimos nuestros papeles.

El deportista y ¿la nerd? [PI #1] ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora